Margallo abre el laberinto: "El Real Madrid es más admirado fuera que dentro de España"
El otrora ministro de Exteriores habla del club de su vida, irregular en esta Liga, y de su laberinto, ese del que suele salir con vida en momentos donde parece no tener escapatoria
Con 12 años vivió la adrenalina de la primera gran remontada del Real Madrid en la Copa de Europa. José Manuel García-Margallo era un niño que estudiaba en San Sebastián y su padre tuvo la iniciativa de buscar un punto de la geografía española en el que llegara la señal de televisión de la final de la Copa de Europa que disputaban el Real Madrid y el Stade de Reims en el estadio parisino del Parque de los Príncipes. Fueron al monte Jaizkibel y allí se produjo el milagro. Llegaba la señal de televisión desde la frontera francesa. El Real Madrid conquistó un título histórico tras ir perdiendo por 0-2 en los primeros diez minutos del partido, empatar con goles de Di Stéfano y Rial, volver a ir en contra y acabar ganando 4-3 con tantos de Marquitos y otra vez Rial.
Han pasado 67 años de aquel día histórico. José Manuel García-Margallo conoce perfectamente de qué pasta está hecho el Real Madrid, de dónde viene ese gen competitivo que le hace ser un equipo especial y cómo se ha convertido en uno de los mejores embajadores de España por sus hazañas. El exministro de Exteriores y Eurodiputado se enamoró de la manera de competir del Real Madrid de Di Stéfano y Gento y desde entonces no deja de sentir la adrenalina que produce hacer posible lo que parece imposible. Presenció en el palco del estadio da Luz de Lisboa otra noche histórica para el madridismo. El gol de cabeza de Sergio Ramos que provocó la remontada para ganar la Décima. "Te voy a contar una anécdota. Cuando todo parecía perdido se me acercó Mariano Rajoy y me dijo que, como ministro de Exteriores, tenía que hacer algo. Era una broma. Rajoy es muy madridista", empieza comentando García-Margallo en esta entrevista para El Confidencial. Ha asistido a más finales de la Champions.
Es un apasionado del deporte y ha viajado por todo el mundo, conocido a jefes de Estado, que le han manifestado su admiración por el Real Madrid. "Hemos tenido reuniones en las que llevábamos un balón y una camiseta del Real Madrid y nos facilitaban las cosas", confiesa. Su querido Real Madrid, al que desgrana en esta entrevista con orgullo y exigencia, afronta la final de la Copa del Rey contra Osasuna y las semifinales de la Champions contra el Manchester City. Llega con las dudas que provocan el rendimiento irregular del equipo de Ancelotti en la Liga y está en el laberinto, ese del que suele salir con vida en momentos donde parece no tener escapatoria. Acaba de publicar el libro España en su laberinto y su madridismo y relevancia internacional sirven para pulsar la visión de José Manuel García-Margallo, para hacer un repaso a las claves de la actualidad del Real Madrid.
******
PREGUNTA. ¿Qué opciones le da a su Real Madrid de salir airoso del laberinto en el que se mete con la final de la Copa del Rey y las semifinales de la Champions?
RESPUESTA. Tiene dos partidos complicados en menos de una semana. Van a ser duros y, honradamente, le doy más opciones de ganar la Copa. Sobre el papel es más equipo que Osasuna. El Manchester City me parece un equipo magnífico y tiene a Haaland, que es un futbolista que me entusiasma. Pero el Real Madrid sabe cómo competir en estos partidos.
P. Habla de Haaland con asombro. ¿Le gustaría tenerlo en su equipo?
R. Sí, es un grandísimo jugador. Como Mbappé. Imagínate si tuviéramos a los dos en el Real Madrid, junto con Vinícius y Benzema jugando por detrás. Seríamos imbatibles.
P. ¿Haaland o Mbappé? ¿Con quién se queda para su equipo?
R. Son distintos, pero es más jugador Mbappé. Entra por la derecha y esta es una posición en la que nos falta un jugador. En el Real Madrid hay buenos futbolistas fuera de su sitio. Rodrygo no es extremo derecho, ni Camavinga lateral izquierdo, como Kroos no es pivote.
P. ¿Pero a un madridista como usted no le duele que Mbappé le diera calabazas?
R. No nos hizo ninguna gracia. Qué le vamos a hacer. Se equivocó, pero es agua pasada. Podía haber sido el ídolo del madridismo durante los próximos diez años. Lo que fue Di Stéfano. Un icono. Lo que no entendí es que no hubiera una cláusula de penalización. Parecía que estaba casi hecho. Pero es que el fútbol español no puede competir contra estos equipos como el Chelsea que se gastan más de 200 millones de euros solo en el mercado de invierno. El Paris Saint-Germain es un club estado y los clubes de la Premier tienen unos derechos de televisión gigantescos. Competir contra ellos es hacerlo con un brazo atado a la espalda.
P. ¿Le ha decepcionado el rendimiento del equipo en la Liga?
R. Era la crónica de una muerte anunciada. Esta temporada era muy difícil estar al nivel de la pasada porque ya hay jugadores como Modric y Kroos que tienen más años. Hemos perdido a Casemiro y Tchouaméni no ha dado el resultado esperado todavía. Es un equipo un año mayor, tiene que disputar una gran cantidad de partidos y lo nota. Yo creo que necesita una renovación. Es un grito a voces. La temporada pasada ya vivimos con el corazón en un puño con las remontadas en la Champions, que tuvieron partidos que parecían un milagro. Esta temporada no se ha podido aguantar el tirón en todos los frentes.
P. ¿Cuánto disfrutó con las remontadas en la Champions?
R. Muchísimo. Al Real Madrid nunca se le puede dar por muerto. Tiene algo especial y le va bien la épica. Es el ADN de este equipo, el de hacer hazañas que parecen imposibles. El Real Madrid se diferencia por su espíritu competitivo, por no darse nunca por derrotado. El escudo pesa mucho.
P. ¿Qué imagen provoca el Real Madrid en el exterior, sus victorias a lo largo de la historia, con épicas remontadas y el gen ganador?
R. Ya en la época oscura de la dictadura, al día siguiente de jugar el Real Madrid en la Copa de Europa y ganar, los españoles que estaban en otros países entraban al trabajo sacando pecho. Te puedo decir que lo que representa el Real Madrid es impresionante. Es más admirado fuera que dentro de España. Bien recibido y respetado en todos los países. España es diferente por la rivalidad interna. El Real Madrid forma parte de la marca España. El deporte tiene un valor importante, de igual manera que Rafa Nadal nos da prestigio y ahora lo hace Carlos Alcaraz. Esto se llama españolear. Presumir de España es muy importante.
P. ¿Qué opinión tiene de la gestión deportiva e institucional de Florentino Pérez?
R. Inmejorable. Es un magnífico gestor, con una enorme visión internacional y un adelantado a su época. Es de los gestores que se anticipa al futuro y es el modelo de éxito en el que se basó el proyecto de Santiago Bernabéu. Para mí es el mejor presidente de la historia del Real Madrid después de Bernabéu. Ha construido un estadio para el futuro, que será el orgullo de la ciudad. Y lo ha hecho en una situación complicada porque no podemos competir con otros clubes con mayor músculo financiero. Ha fichado a jugadores jóvenes con un enorme potencial. Ahí está el rendimiento de Vinícius o el de Rodrygo, al que yo le veo en un futuro en un puesto de interior adelantado. El sitio que ocupa Modric.
P. ¿Es de los que se ha quedado sorprendido con el nivel tan alto y la personalidad que tiene Vinícius en el juego del equipo?
R. A mí me parece un futbolista genial. Tiene todas las características de un gran extremo izquierdo por la capacidad para desequilibrar. Me recuerda a los primeros años de Gento, del que se decía que solo sabía correr y después aprendió a correr con la pelota. Vinícius en el primer año era desconcertante y su progresión es extraordinaria. Ha mejorado en todo, la pausa, el regate, la definición... Es más completo.
P. Donde tiene problemas es con los marcajes de los rivales y los episodios de racismo. ¿Qué le recomienda?
R. El racismo me parece repugnante. Todo lo que sea discriminar e insultar al que sea diferente es lo contrario a la tolerancia. Esto es un problema de educación y cultura y los clubes tienen que hacer algo para convencer a sus seguidores de que el deporte es diversión. Lo demás es un error y una falta de empatía. También le digo a Vinícius que tiene que aprender a reprimir sus ganas de contestar en el campo. Se juega que le saquen tarjetas. No hay mejor desprecio que no hacer aprecio y los árbitros le pueden coger animadversión. Es joven y tiene que aprender, pero también es verdad que le muelen a palos y es difícil de llevar.
P. ¿Le gustaría que Ancelotti siguiera la próxima temporada en el Real Madrid?
R. Sí. Lo que funciona no hay que cambiarlo y me parece que Ancelotti no tiene nada que demostrar. Esta temporada era muy difícil volver a ganar la Liga y la Champions, porque como repito este equipo tiene una cierta edad. La profundidad de banquillo no es tampoco la que quisiéramos. Ancelotti es un entrenador que ha ganado títulos en las cinco grandes Ligas, sabe gestionar un vestuario tan difícil como el del Madrid y también impone sus ideas. Me gusta. Como me gustaba Zidane.
P. ¿Qué posibilidades le da de eliminar al City de Guardiola?
R. Guardiola también es un gran entrenador. Pero la eliminatoria la veo igualada. Son un buen equipo. Igual que me gusta Haaland, digo lo mismo de Kevin de Bruyne. Las apuestas dicen que es favorito el City, pero eso mismo sucedió el año pasado y luego ya se vio lo que pasó. Si el Real Madrid es capaz de jugar como lo hizo en la goleada de Copa al Barcelona en el Camp Nou es un equipo imbatible. Tenemos a Courtois, que es el mejor portero del mundo. A mí me encanta Militao, que se ha convertido en el jefe de la defensa. Hemos cambiado los dos centrales de golpe, a Ramos y Varane, luego a Casemiro y el equipo ha seguido ganando.
P. ¿Y con Benzema en su mejor versión se puede ser más optimista?
R. Benzema me encanta. Hemos descubierto todo su talento desde la salida de Cristiano Ronaldo. Estábamos hartos de decir que no era un goleador y lo que hacía es estar al servicio de Cristiano. Ha demostrado lo buen delantero que es y me recuerda a Di Stéfano por la cantidad de campo que abarca y cómo lleva el balón de medio campo hacia delante.
P. ¿Le gusta cómo se aplica el VAR en el fútbol o cree que hay más polémica con la tecnología?
R. Yo debo de ser de los antiguos porque no me entusiasma. Me parece que con el VAR sigue habiendo decisiones que son interpretables y no tiene la eficacia que sí vemos en el tenis. Por ejemplo, en los fueras de juego se tiran las líneas de una manera que admiten discusión. Sigo creyendo que el gol que le anulan a Marco Asensio en el Camp Nou no es fuera de juego. Lo veo así o a lo mejor es que soy muy madridista.
Hay recetas para salir del laberinto en el que estamos. Cuando iniciamos la transición, España era un solar por la situación económica
P. ¿Qué opinión tiene con el escándalo del caso Negreira?
R. Lo que espero es que se haga la luz. Vivimos en un Estado de derecho y hay que aplicar la ley sin contemplaciones. Si lo que se publica en los medios es cierto, se ha alterado el fair play. No prejuzgo nunca hasta que se pronuncie la justicia. Pero no es ejemplar y está haciendo daño a la imagen de España.
P. Para terminar, ¿qué opciones le da al Real Madrid de ganar Copa y Champions?
R. Va a ganar las dos competiciones. A pesar de que en la Liga hay que reconocer que ha tenido un rendimiento irregular, veo que en el mes de mayo está en forma para competir y ser un equipo fiable.
P. De su libro podemos hacer alguna referencia, de la nostalgia de los años de la transición española...
R. España en su laberinto es un libro que sirve para recordar cómo fue la transición y el contraste con lo que está pasando en estos momentos. Hay recetas para salir del laberinto en el que estamos. Cuando iniciamos la transición, España era un solar por la situación económica y más factores y fuimos capaces de superar aquella situación. Pero mejor hay que leerlo.
Con 12 años vivió la adrenalina de la primera gran remontada del Real Madrid en la Copa de Europa. José Manuel García-Margallo era un niño que estudiaba en San Sebastián y su padre tuvo la iniciativa de buscar un punto de la geografía española en el que llegara la señal de televisión de la final de la Copa de Europa que disputaban el Real Madrid y el Stade de Reims en el estadio parisino del Parque de los Príncipes. Fueron al monte Jaizkibel y allí se produjo el milagro. Llegaba la señal de televisión desde la frontera francesa. El Real Madrid conquistó un título histórico tras ir perdiendo por 0-2 en los primeros diez minutos del partido, empatar con goles de Di Stéfano y Rial, volver a ir en contra y acabar ganando 4-3 con tantos de Marquitos y otra vez Rial.
- El palo a Militao con el que el Real Madrid pretende arreglar los problemas defensivos Ulises Sánchez-Flor
- Míchel, genio y figura: las razones de su sorprendente dimisión del Olympiacos Ulises Sánchez-Flor
- "Sólo un rebote lo cambió todo": así resucitó el Real Madrid en Belgrado en busca de la Final Four Rubén Rodríguez