Desafíos Defensa 24 | Una hoja de ruta hacia la logística militar 4.0 y la modernización de las FFAA

Se atribuye a E.J. King, almirante de la flota estadounidense durante la Segunda Guerra Mundial, una de las citas más famosas para resumir la importancia de la logística en una campaña armada: "No sé qué diablos es la logística esa de la que [el general George] Marshall siempre está hablando, pero quiero un poco". Como jefe de Estado Mayor con el presidente Franklin D. Roosevelt, el célebre (y bienvenido) Mr. Marshall fue el responsable último de la mayor expansión militar en la historia estadounidense y llegó a ser aplaudido por el propio Winston Churchill como el verdadero "organizador de la victoria" aliada en Europa.

Los recientes conflictos militares, ya sea la invasión rusa a gran escala de Ucrania o la guerra Israel-Hamás, han vuelto a demostrar, una vez más, que la gestión logística de una fuerza militar es instrumental para sacar el máximo partido a sus capacidades operativas. En resumen: sin logística, no hay defensa.

En las Fuerzas Armadas españolas, los encargados de esta labor estratégica son los Mandos de Apoyo Logístico de cada uno de los ejércitos (Tierra, Armada y Aire y Espacio). Entre sus misiones están las de ejecutar la política de adquisiciones de equipo y material para la defensa, programar las tareas de mantenimiento y apoyo logístico, así como la dirección de los planes de ingeniería, transporte e infraestructura relativos a sus respectivas áreas. En plena ofensiva para actualizar las capacidades de la defensa nacional, y con un impulso paralelo e igual de relevante para modernizar la logística y la gestión militar, estamos ante un camino repleto de retos.

Para decodificar en qué punto estamos en esta transición y cuáles son los siguientes pasos a dar, conversaremos con los jefes de los Mandos de Apoyo Logístico del Ejército de Tierra (MALE), teniente general Fernando Miguel García de las Hijas; del Ejército del Aire y del Espacio (Malog), teniente general José Luis Pardo, y de la Armada (JAL), almirante Ricardo A. Hernández en el foro Desafíos Defensa 2024, organizado por El Confidencial en la ciudad de Córdoba el próximo 31 de enero. La mesa redonda del desafío logístico estará moderada por Alicia Alamillos, redactora jefa de Internacional de El Confidencial y Premio Internacional de Periodismo Manuel Alcántara 2023 por su cobertura de la guerra en Ucrania.

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Un desafío compartido por los tres altos mandos es el de mejorar los procesos de mantenimiento de sistemas de armas para dotarles de más disponibilidad operativa y alargar sus ciclos de vida para maximizar el presupuesto. Para esta misión, los tres ejércitos están buscando incorporar a su logística nuevas tecnologías, desde inteligencia artificial a fabricación aditiva, robótica o conexiones 5G. Repasamos a continuación las iniciativas más importantes.

Revolución logística

Un buen ejemplo de este esfuerzo es la nueva base logística del Ejército de Tierra en Córdoba General de Ejército Javier Varela. Con una inversión prevista de 350 millones de euros, de los que la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Córdoba aportan un tercio, este proyecto aspira a generar un polo industrial y tecnológico en la ciudad que generará más de 1.600 puestos de trabajo directos y otro millar indirectos. El MALE ha abierto un proceso experimental para identificar las tecnologías a incorporar a estas instalaciones, que ocuparán más de 80 hectáreas y cuya fecha de inauguración está prevista para 2027 (y su plena operatividad para 2035).

Otro proyecto de referencia que impulsan desde el Mando de Apoyo Logístico es el futuro sistema de logística predictiva (Silpre) que el Ejército de Tierra desarrolla con Navantia, y la colaboración de Indra y la Universidad de Córdoba, para programar el mantenimiento óptimo de armas, equipos y materiales. Un trabajo apoyado por la celebración del Foro 2E+I, en el que cada año el Ejército de Tierra busca con industria y expertos identificar líneas de actuación para el impulso tecnológico del concepto Ejército 35.

También conversaremos con el teniente general García de las Hijas, quien asumió como MALE en enero de 2021, sobre los programas de armamento y equipos para la actualización de las capacidades del Ejército de Tierra. En 2023, se recibieron las primeras unidades de los vehículos de zapadores Castor y se firmó la adquisición de los vehículos de apoyo a cadenas (VAC) y el lanzacohetes de alta movilidad Silam. Para este año, están pendiente la recepción de los primeros vehículos 8x8 Dragón, que van demorados en el cronograma, y varios proyectos de modernización de equipos clave (como las baterías Nasams y Patriot). Tambiélos vehículos de exploración y reconocimiento terrestre (VERT) y de vigilancia terrestres (VVT); novedades sobre la modernización de los carros de combate Leopardo y el futuro de los Centauros, y la licitación de los vehículos militares tácticos todoterreno (VMTT) para sustituir a los Santana.

Bases conectadas

El Ejército del Aire y del Espacio también está inmerso en un proceso de digitalización de logística y operaciones con su programa bandera Base Aérea Conectada, Sostenible e Inteligente (Bacsi). Este plan lleva reuniendo desde hace cinco años a empresas, universidades y militares con el objetivo de digitalizar los ecosistemas de las bases aéreas, conectando equipos, personas y proyectos para lograr una mayor eficiencia operativa. Las áreas de investigación incluyen conectividad, sostenibilidad, optimización, protección, seguridad y sostenimiento. Este empeño está reforzado por las jornadas de demostración tecnológica en la Base Aérea de Albacete, celebradas en octubre del año pasado, donde se validaron 15 casos de uso de nuevas tecnologías.

Entre las iniciativas destaca el sistema logístico de nueva generación (SLNG) que incorporará todos los avances de las diferentes áreas Bacsi para la adaptación tecnológica e industrial de las bases nacionales. También los sistemas de red inalámbrica Wifi 6 y 5G para manejar los crecientes volúmenes de datos e información en los teatros de operaciones modernos, o el desarrollo de un sistema de mando y control que permita la integración de gran diversidad de vehículos no tripulados.

Aprovecharemos para comentar con el teniente general Pardo, que asumió en septiembre de 2021, sobre la actualización de equipos, como la futura incorporación de los aviones C295 de vigilancia y patrulla marítima de Airbus, los nuevos Eurofighter del programa Halcón II o la incorporación, a partir de 2026, del dron Sirtap de Airbus (que también utilizará el Ejército de Tierra). Además, en el horizonte, la transición hacia el FCAS/NGWS, un caza de combate de 6ª generación conectado con un enjambre de drones que sustituirá a los Eurofighter en 2035-2040.

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El Arsenal Inteligente

La Armada, por su parte, está avanzando el proyecto arsenal inteligente o arsenal HI3E (híbrido, inteligente y eficaz) con el mismo espíritu de modernización y adaptación digital de sus capacidades. Los ejes de trabajo incluyen la automatización de procesos, integración de tecnologías, uso de datos únicos, infraestructura sostenible y adaptación organizativa.

Entre los lineamientos del documento Visión del Ajal del arsenal inteligente, que comentaremos con el almirante Ricardo A. Hernández, se busca una adaptación de la logística de la Armada a la incorporación de los submarinos serie S-80 —el primero de la serie, el S-81 Isaac Peral, fue entregado el pasado noviembre— o las fragatas F-110. La Armada ya está inmersa desde hace unos años en esta singladura hacia la logística 4.0 y cuenta con proyectos operativos como el Centro de Inteligencia Artificial (CIA2) y el Centro de Gestión del Dato.

En el capítulo de la modernización y actualización de capacidades, la Armada también tiene muchas novedades. En 2023 ya se recibieron los primeros helicópteros H-135 para la flotilla de la Armada y se encargaron los helicópteros MH-60R Romeo de la estadounidense Lockheed Martin. Además, se mantienen los trabajos en las fragatas F-110, el resto de la serie de submarinos S-80, y se encargaron a Navantia dos buques hidrográficos. En la agenda para 2024, se esperan novedades de los dos nuevos Buques de Acción Marítima (BAM) para guerra antisubmarina y la sustitución de los Harrier del ala embarcada, entre otros temas.