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El programa electoral de Aliança Catalana: otra DUI, Ejército propio y prohibido el burka
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La ultraderecha independentista

El programa electoral de Aliança Catalana: otra DUI, Ejército propio y prohibido el burka

El partido de Orriols promete expulsar a los "Estados español y francés" de Cataluña, convertir el castellano en "optativa" y "perseguir la catalanofobia". Creará un “fondo soberano de inversión” e instalará minireactores nucleares

Foto: Silvia Orriols, líder de Aliança Catalana y alcaldesa de Ripoll. (EFE/David Borrat)
Silvia Orriols, líder de Aliança Catalana y alcaldesa de Ripoll. (EFE/David Borrat)

Aliança Catalana, el partido xenófobo independentista de Sìlvia Orriols que se presenta por primera vez a las elecciones autonómicas de Cataluña, propone realizar otra declaración unilateral de independencia (DUI) como primera medida de su programa electoral, en el que defienden la creación de un nuevo Estado que será bautizado como el Principado de Cataluña con un Ejército propio y una mayor presencia policial en las calles para combatir la inseguridad. Si gobiernan, avisan, prohibirán el uso del burka en la vía pública y expulsarán a los presos de origen extranjero, lo que supondría un ahorro de 150 millones a las arcas del Govern. Reclaman para ello la cesión de la competencia migratoria cuanto antes, como Junts.

La propuesta electoral de Aliança Catalana es netamente independentista -"debemos levantarnos en Estado independiente y expulsar a los Estados español y francés de Cataluña”-, y comparte el ideario propio de los partidos de ultraderecha con bastantes similitudes con Vox, aunque su programa es mucho más agresivo y osado. Contiene un discurso abiertamente populista y xenófobo: pretende el cierre de fronteras -”en Cataluña no cabe todo el mundo”-, considera a los inmigrantes un estorbo para el progreso de Cataluña y alerta del peligro de la extinción de la lengua catalana.

Todo el articulado destila una exaltación chauvinista que glorifica el "pasado nacional" de Cataluña, cuyo origen histórico fijan “hace más de mil años” y que surgió como “un escudo de Europa para salvaguardar el legado de Occidente” frente al invasor musulmán:

”Somos herederos del legado grecorromano y de la moral judeocristiana (...) como súbditos de los visigodos, contemplamos nuestra tierra invadida por las poderosas tropas islámicas que buscaban la subyugación total del continente europeo. En aquellos tiempos de resistencia, hace más de mil años, Cataluña nació como una serie de condados de frontera, como un dique de contención ideado por el emperador Carlomagno para garantizar la independencia y la libertad de los estados europeos y el imperio carolingio. Empezamos nuestro camino, pues, como un escudo de Europa para salvaguardar el legado de Occidente que tanto peligraba durante la alta edad media", glosa el punto sobre la Unión Europea. Se definen como europeístas "de primera hora", en este caso al contrario que Vox.

Independencia

En el primer punto del programa figura la declaración unilateral de independencia (DUI) y la “toma de control” del territorio, que se denominará “Principado de Catalunya”. Orriols ha acusado a los líderes del procès de timoratos y asegura que ella llevará a término lo iniciado. “Si Aliança Catalana obtiene la mayoría absoluta en el Parlament, declarará y defenderá la independencia de Catalunya. No queremos, necesitamos ni esperamos la autorización de ningún organismo extranjero para liberarnos. Los catalanes, por el simple hecho de existir como pueblo nacional consciente, debemos levantarnos en Estado independiente y expulsar a los Estados español y francés de Cataluña. Somos los dueños de nuestra tierra”.

Continuar formando parte de España, aseguran, “equivale a sufrir un saqueo fiscal anual de más de 20.000 millones de euros”; supone condenar a la muerte a la lengua catalana; significa ser tratados como “españoles de tercera”, fritos a impuestos y con los servicios públicos “saturados”.

Foto: La alcaldesa de Ripoll, en Girona, Sílvia Orriols. (EFE/David Borrat)

Aliança Catalana defiende que para que Cataluña sea un Estado "homologable" a cualquier otro de la Unión Europea, debe formar "un ejército adaptado a los retos y tamaño del país".

“Como partido político nacionalista, mientras no tengamos la mayoría parlamentaria para declarar la independencia, trabajaremos para tener el país preparado para la secesión: estableciendo contactos internacionales con otros estados, dando imagen de país soberano distinto a España, reduciendo la deuda de la Generalitat, aumentando nuestra soberanía energética, mejorando nuestra soberanía alimentaria, promoviendo nuestra independencia financiera y fomentando que nuestro tejido empresarial y productivo esté en manos catalanas”

Lengua catalana

Alertan de que la lengua catalana corre serio peligro de extinción por la inmigración. “Con el actual ritmo de flujos migratorios, en pocas décadas llegaremos a ser el 5% de catalanohablantes en el total de la población”. Por eso prometen utilizar todos los recursos para promover el catalán y “hacerlo indispensable para vivir en el país”. Proponen, entre otras medidas, ofrecer ventajas fiscales a las empresas y particulares que acrediten el uso del catalán y exigir un examen de catalán para conseguir un permiso de trabajo. Citan la obligatoriedad de la lengua para policías, médicos y personal de turismo. "No queremos tener que contratar a médicos en el extranjero que no tengan la capacidad de desarrollarse en catalán". También promoverán la lengua occitana.

"No queremos tener que contratar a médicos en el extranjero que no tengan la capacidad de desarrollarse en catalán"

Además, atacarán a los denunciantes por discriminación del castellano en las escuelas. “Perseguiremos la catalanofobia”. La escuela será 100% en catalán y fomentará el espíritu nacional. “Queremos una escuela en catalán, meritocrática, que fomente la excelencia y que revise los planes educativos para difundir el conocimiento de nuestro pasado nacional”.

"Fondo soberano de inversión"

Fomentarán la soberanía alimentaria con medidas proteccionistas como crear un etiquetado ‘made in CAT’ para los productos locales. Defienden la construcción de minireactores nucleares para garantizar la soberanía energética. Y promoverán el “nacionalismo industrial”, para lo que crearán un "fondo soberano de inversión" de modo que la Generalitat tenga capacidad de comprar las empresas viables que crea conveniente y así trasladar o mantener la producción a Cataluña. Otro pilar central de su política de reindustrialización será el Instituto Catalán de Finanzas (ICF).

Su recetario económico es neoliberal -bajada masiva de impuestos, reducción a la mínima expresión de la administración pública y del gasto social- y acusan a España de aplicar un “saqueo fiscal” de 20.000 millones al año. En el camino hacia la independencia, exigen la recaudación del 100% de los tributos.

Inmigración

Su discurso es xenófobo. Culpan de todos sus males a España y a los inmigrantes, a quienes consideran los causantes de que “baje el índice de hablantes de catalán; decaigan los resultados académicos de nuestros institutos; se deprecien los salarios; se saturen las colas de espera de los hospitales; aumenten los atendidos en los bancos de alimentos; y se pierda el valor de muchos inmuebles que ven cómo a su lado aparecen pisos patera que asustan a los compradores”.

Exponen que el “alud migratorio que sufre Cataluña” -151.000 migrantes en 2022- es por "decisión de las autoridades españolas" y defienden la “necesidad de cerrar las fronteras a los inmigrantes económicos hasta que Cataluña vuelva a tener capacidad de integrar a los extranjeros en la lengua catalana”.

“En Cataluña no cabe todo el mundo”, afirman y justifican la expulsión de los irregulares, de los que delinquen y de los presos de nacionalidad extranjera, que suponen la mitad de la población reclusa. Según sus cálculos, Cataluña se ahorraría 190 millones de gasto anual: “Cataluña no tiene ningún deber hacia la rehabilitación de extranjeros, regulares o irregulares. Creemos que estas tareas corresponden a los gobiernos de sus países de origen”.

Foto: Sílvia Orriols, alcaldesa de Ripoll y cabeza de lista de Aliança Catalana para el 12 de mayo. (EFE/David Borrat)

Y justifican también por cuestión de seguridad la prohibición de llevar burka en la calle. “Para garantizar la seguridad de nuestros ciudadanos y que las personas sean fácilmente identificables en caso de necesidad, promoveremos una nueva normativa que prohíba ir con el rostro tapado por la vía pública, como por ejemplo burka o casco”. Impulsarán consultas ciudadanas para decidir acciones como la apertura de "una nueva mezquita" o "un nuevo centro de menas".

Educación

Aliança Catalana fomentará el espíritu nacional desde las aulas, 100% en catalán. La asignatura de castellano será optativa. Cambiarán el nombre del Departamento de Educación por el de Departamento de Enseñanza porque "Aliança Catalana entiende que quien enseña es la escuela y quien educa es la familia".

Hacen mención a los desastrosos resultados de Cataluña en el último informe PISA, de los que culpa al "Estado español" por su trasiego de leyes educativas. "Un motivo más que avala la necesidad de dotarnos de un Estado catalán independiente", afirman.

Foto: La candidata de la CUP, Laia Estrada. (EFE/Quique García)

Sobre la sequía, uno de los grandes problemas que está muy presente en las elecciones, Aliança Catalana asegura que impulsará una política estratégica de primer nivel garantizando “el acceso al agua de los productores agrícolas de todo el país”.

Además, reducirá a la mínima expresión la administración pública y tender a un "gasto social cero". En un apartado denominado “Recortes”, prometen reducir el número de consejerías del Govern, y "altos cargos y organismos que “viven del erario público”. Encargarán una auditoría para detectar el “gasto superfluo” y detectar irregularidades.

Aliança Catalana apostará por "reformar el sistema mediático catalán para normalizar la lengua nacional", considerando que se ha "castellanizado". Promoverán la cultura y la información con un punto de vista "catalanocéntrico". Y denuncian el "sectarismo" de TV3.

Aliança Catalana, el partido xenófobo independentista de Sìlvia Orriols que se presenta por primera vez a las elecciones autonómicas de Cataluña, propone realizar otra declaración unilateral de independencia (DUI) como primera medida de su programa electoral, en el que defienden la creación de un nuevo Estado que será bautizado como el Principado de Cataluña con un Ejército propio y una mayor presencia policial en las calles para combatir la inseguridad. Si gobiernan, avisan, prohibirán el uso del burka en la vía pública y expulsarán a los presos de origen extranjero, lo que supondría un ahorro de 150 millones a las arcas del Govern. Reclaman para ello la cesión de la competencia migratoria cuanto antes, como Junts.

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