Dacia moderniza la imagen de sus concesionarios de cara a su siguiente ofensiva

Aunque la historia de Dacia es larga, y ronda ya a las seis décadas, su etapa dentro del Renault Group, que es la más conocida en el mercado español, supera por poco los 20 años. Puede parecer poco tiempo, pero han sido dos décadas bien aprovechadas, en las que la firma rumana ha protagonizado una rápida progresión, tanto en producto como, sobre todo, en su presencia comercial en nuestro continente, donde ha situado al Sandero como el vehículo preferido por los particulares durante los últimos años y ha posicionado también al Duster entre los SUV-B con más matriculaciones. Dos pilares básicos en su gama, a los que más recientemente se unió el Spring, su primer eléctrico, y el Jogger, un coche muy funcional que mezcla ideas de los familiares y los SUV, y está disponible con cinco y siete plazas, e incluso con mecánica híbrida, toda una novedad para Dacia.

En realidad, todo comenzó en 2004 con el lanzamiento del Logan, una berlina compacta y low cost que logró algo que otros muchos fabricantes habían intentado sin éxito: ofrecer al cliente un coche nuevo por el mismo dinero que hasta entonces se pagaba por uno usado. Y la fórmula terminó de redondearse cuando se sumaron a la familia el Sandero en 2008 y el Duster en 2010. La trayectoria de la marca ha incluido otros productos de éxito, como el monovolumen Lodgy o la pequeña furgoneta Dokker, a la venta todavía en algunos países, aunque el siguiente paso importante fue, sin duda, la llegada del Spring, uno de los eléctricos más vendidos en Europa gracias a su bajo precio, o del también citado Jogger.

El año pasado, y como parte de un programa de modernización de su imagen, todos los coches de Dacia estrenaron al unísono la nueva identidad corporativa, lo que incluía un logotipo rediseñado. Y desde la firma rumana de Renaut Group destacan el hecho de que fuese a la vez, algo sin precedentes, al parecer, en la industria del automóvil. Una modernización que ahora se completa aplicando esa identidad a los concesionarios, dentro de un proceso que, en el caso español, se ha iniciado en la tienda de Dacia Retail Group de la Avenida de Burgos de Madrid y se completará antes de acabar el 2023 en el resto de la red, compuesta por más de 60 concesionarios y 200 puntos de venta, a los que se suman los aproximadamente 400 agentes, lo que lleva el número total a 600 puntos. Según Francisco Hidalgo, director general de Dacia España, "esa cifra ya no debería crecer", e incluso sería lógico que decreciera a medida que el comercio electrónico gane terreno.

Un SUV-C, lo siguiente de Dacia

Pero las noticias en Dacia no acabarán ahí, pues la marca prepara, de cara al 2024, otra de sus revoluciones: la conquista del segmento C. Porque si la firma rumana ya ha demostrado músculo en el segmento B con Sandero y Duster, ahora apunta a la categoría inmediatamente superior, que concentra un 35% de las ventas en Europa. Y para ese segmento C reserva un SUV que derive del Bigster Concept mostrado en su día. Es decir, un coche que el cliente pueda comparar con rivales como Citroën C5 Aircross, Hyundai Tucson, Kia Sportage, Renault Austral, SEAT Ateca o Skoda Karoq, entre otros, pero con precios mucho más bajos.

Como es lógico, será un modelo con un precio superior a las facturas habituales en la marca, pero en Dacia dicen confiar en la respuesta del público porque el actual Sandero cuesta de media unos 2.000 euros más que su antecesor y, sin embargo, está funcionando aún mejor comercialmente. En lo que va de año, es líder absoluto del mercado español, y desde la marca aclaran que tres cuartas partes de los pedidos corresponden a las variantes Stepway, o que el 60% de las ventas son de versiones de GLP con etiqueta Eco. Mismo porcentaje que en el caso del Jogger, por ejemplo, lo que permite a Dacia ser, con diferencia, la marca dominadora en el mercado de coches de GLP en España, con un 86% del total. Un liderato mantenido, por cierto, desde 2017.

De este modo, Dacia se ha hecho ya este año en nuestro mercado con un 9% de las ventas a particulares, situándose en la cuarta posición por marcas, aunque no descartan seguir ascendiendo en la clasificación porque están ya muy cerca de Kia y Hyundai, que completan hasta ahora un podio liderado por Toyota. El objetivo es alcanzar y superar el 10%, y la llegada en 2024 de un SUV-C parece decisiva en esos planes.

Tiendas con nueva identidad

La nueva imagen de Dacia se aprecia ya en el exterior, pero centra los cambios principalmente en el interior de los concesionarios, donde es más evidente esa nueva identidad de marca, basada, no obstante, en los principios de funcionalidad, flexibilidad, sostenibilidad y contención de costes. Así, el diseño de las salas de exposición puede calificarse de frugal, y cuenta solo con los elementos esenciales para organizar y distribuir loes espacios, y para mejorar la experiencia del cliente. Además, se han diseñado tres formatos diferentes, adaptados a los diferentes tamaños del local y al número de vehículos expuestos, con la idea de que esas salas de exposición de Dacia puedan evolucionar con el tiempo y adaptarse a los cambios que se produzcan en cada punto de venta.

De ahí que los elementos del mobiliario sean móviles y adaptables. Y hechos, en su mayoría, con materiales reciclados y duraderos, pues paneles, alfombras, pintura de paredes, suelos o lámparas se han elegido con cuidado desde el punto de vista ecológico. Por ejemplo, las bases de los paneles se han fabricado con una especie de ladrillos creados a partir de neumáticos reciclados. Y los productos de merchandising, que no se ofrecían en las tiendas de Dacia desde 2019, volverán a los puntos de venta. La primera colección será un conjunto de objetos diseñados en torno al tema de la naturaleza: una mochila, una gorra, una botella de agua y un impermeable. Todo ello, también, con un enfoque sostenible desde el diseño hasta la distribución.

Para replantear la relación con el cliente, se ha modernizado, además, todo el proceso de compra, tanto online como en la propia concesión. Y con objeto de crear una relación más personal y directa con el cliente, el vendedor se sentará ahora al lado del potencial comprador, y no frente a él, pues ambos compartirán la misma pantalla para configurar más fácilmente el vehículo e incrementar la sensación de claridad y transparencia. Además, con la aplicación de realidad aumentada Dacia AR, el vendedor podrá mostrar al cliente, por ejemplo, un vehículo que no esté en la exposición, recorriendo el vehículo a escala real, ampliando los detalles e, incluso, sentándose en su interior de forma virtual.