La España sin Vox: Galicia, País Vasco, La Rioja y Navarra resisten a la fuerza de Abascal

3.640.063: el número de votantes a Vox en las elecciones generales de este 10 de noviembre es desconcertante. La formación de Santiago Abascal ha conseguido el apoyo de (más o menos) la misma cifra de electores que apoyaron al Ciudadanos de Albert Rivera en 2015, cerca de medio millón más de los que votaron a Podemos en 2016, y un millón más de los que eligieron a Abascal el 28 de abril. Vox, tercera fuera política. "Tenemos a más de 50 españoles para poder recurrir todas las leyes liberticidas y anticonstitucionales", dijo el líder y candidato a la Moncloa por el partido más a la derecha del hemiciclo, en la celebración de unos resultados que no permiten, 'a priori', hablar de desbloqueo de las instituciones a corto plazo.

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El triunfo de Vox es innegable, y ha sido celebrado no solo por sus seguidores, afiliados y militantes, sino también por parte de la extrema derecha europea: Marine Le Pen, hija y actual líder del Frente Nacional francés, aplaudió el "impresionante trabajo de oposición" de Santiago Abascal, que "ha dado sus frutos en pocos años". A los ojos de la prensa extranjera, el avance de la formación, que ha crecido de manera exponencial desde su irrupción en el Parlamento andaluz, no augura nada halagüeño: "La extrema derecha deja de ser marginal desde Franco". Así a todo y a pesar de sus resultados a nivel nacional, cuatro comunidades autónomas se han librado del partido*: ni Galicia, ni País Vasco ni Navarra han dado escaño alguno a Vox.

Galicia, aún bicolor

A menos de un año de las elecciones autonómicas en Galicia, la comunidad gallega sigue manteniendo casi el bipartidismo: PSOE y PP empataron a escaños, con tres cada uno, en unas elecciones en las que el Bloque Nacionalista Galego (BNG) recupera un asiento en el Congreso de los Diputados. En general, las cuatro provincias gallegas se han decantado por los dos partidos tradicionales, con una sola excepción: el partido nacionalista gallego se convertía en el partido más votado en el municipio ourensano de Allariz, el único en el que la formación liderada por Ana Pontón supera a socialistas y 'populares'. Esto supone, además, un crecimiento de casi diez puntos porcentuales con respecto a las pasadas elecciones del 28 de abril.

Aun así, el partido liderado por Santiago Abascal consiguió el apoyo de 114.834 gallegos, lo que supone el 7,8% del voto de la comunidad, frente a los algo más de 87.000 que consiguió en las anteriores elecciones. Antes de conocer los resultados definitivos, el 'tracking' de Sondaxe para el diario 'La Voz de Galicia' daba, no obstante, un escaño para la formación de extrema derecha, por la provincia de A Coruña. El candidato al Congreso por esta provincia, Miguel Ángel Fernández, encendió la polémica después de que se publicara una 'encuesta' desde el perfil de Facebook de Vox en Cee (Costa da Morte) en el que pedían elegir entre el candidato por el BNG Néstor Rego, al que definían como "el aldeano", y el propio Fernández, "un español de bien y hasta guapo".

Tierra 'peneuvista' y sin derecha nacional

La comunidad vasca es otra de las que ha logrado frenar no solo el avance de la extrema derecha, sino que además ha visto cómo, a pesar de crecer en votos, el PP se quedaba fuera otra vez. La derecha repite así en País Vasco, sin obtener representación alguna, a pesar de los más de 100.000 votos del PP, una cifra casi cuatro veces mayor que la obtenida por la extrema derecha de Abascal, con algo menos de 29.000 votos. Lo cierto es que el partido verde, el único que ha salido victorioso del 10 de noviembre, nunca había sido bienvenido en suelo vasco: el pasado mes de abril fueron varios los enfrentamientos en las calles con simpatizantes de Vox, llegando a haber detenidos en San Sebastián y Bilbao.

No es ninguna sorpresa: en las pasadas municipales ni Vox ni Ciudadanos conseguía representación; en la ciudad más poblada, Bilbao, el partido de ultraderecha se presentaba por primera vez el pasado 26 de mayo, consiguiendo solo 1.904 votos, menos del 1,2% de las papeletas de los bilbaínos.

Navarra, las derechas sin Vox

La última 'aldea gala' en la que Vox no ha conseguido representación es la comunidad navarra, donde las derechas se presentaron en coalición. Navarra Suma (NA+), la alianza en la que se engloban PP, Ciudadanos y Unión por el Pueblo Navarro (UPN), decidió concurrir a los comicios generales del pasado 28 de abril, a las municipales de mayo y a estas últimas de manera conjunta para expulsar al nacionalismo de la comunidad autónoma pero sin contar con la ayuda de la formación de Santiago Abascal, una opción que ni siquiera contemplaban.

Aun así, la formación obtuvo 18.656 votos, cerca de mil más de lo que se llevó en el 28-A, algo que el partido ha decidido celebrar. "Orgullosos del trabajo que estamos haciendo por España. Mil votos más. Mil personas comprometidas con el cambio real de España. Gracias,, Navarra", decían desde su perfil de Twitter al conocer los resultados.

La Rioja, otra bicolor

Lo mismo que ha ocurrido en Galicia ha tenido lugar también en La Rioja, donde los cuatro escaños se han dividido entre los dos partidos históricos, PP y PSOE. A pesar de no haber sacado escaño, en la comunidad autónoma Vox también ha sido tercera fuerza, con 18.772 votos, lo que implica un 11,45% del apoyo del electorado.

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*Este artículo ha sido modificado para corregir los datos ausentes, como los referentes a la comunidad autónoma de La Rioja