Moreno replica a Ayuso y acusa a la izquierda de "infundir miedo" con una campaña por la sanidad

"No vamos a privatizar na-da". La consejera de Salud de la Junta de Andalucía, Lina García, repitió esta idea hasta en seis ocasiones, de forma muy enfática, en un debate en el Parlamento andaluz celebrado el miércoles sobre la orden del Gobierno autonómico que abre la puerta a externalizar la atención primaria con operadores privados. García ha entonado el mensaje habitual del Ejecutivo de Juanma Moreno en materia sanitaria, que consiste en ensalzar las mejoras puestas en marcha desde la llegada del PP a la Junta. Pero no ha aclarado si tiene intención de modificar la polémica norma, todavía en proceso de elaboración, pese a las críticas de toda la oposición, desde la extrema derecha de Vox hasta los anticapitalistas de Adelante Andalucía.

García está convencida de que el objetivo de "la izquierda" es "confundir a la opinión pública con acusaciones infundadas" para erosionar al PP a pocos meses de las elecciones municipales del próximo 28 de mayo. "Hay líneas que no se deben cruzar", espetó la titular de Salud, que cree que las fuerzas de izquierdas hacen una "crítica destructora" que "falsea la realidad a sabiendas y atenta contra la inteligencia". La diatriba de la dirigente popular desde la tribuna de la Cámara regional recuerda a la que viene lanzando Isabel Díaz Ayuso, que ve una campaña electoralista de la izquierda en las movilizaciones que han sacado a la calle a decenas de miles de personas en Madrid en los últimos meses.

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Carlos Rocha. Sevilla

La situación en Andalucía no es comparable con la de Madrid, al menos en lo que respecta a la contestación social. Pero la denuncia de Por Andalucía, a principios de la semana pasada, relacionada con la polémica orden, tensionó al Ejecutivo de Juanma Moreno por primera vez desde que el malagueño ganó las elecciones autonómicas por mayoría absoluta, el pasado 19 de junio. La reacción airada de Lina García en la tribuna del Parlamento es el último capítulo de la respuesta del Gobierno autonómico a este temblor.

Desde Salud insisten, como dijo García este miércoles, en que la norma se trata de un "marco regulador", no "un programa de intenciones". Su objetivo es unificar las tarifas máximas para los conciertos y evitar que una ecografía concertada con la privada cueste 18 euros en una provincia y 56 en otra. Pero cuando estalló la polémica utilizaron otros argumentos, como que la orden previa, de 1998, ya incluía la posibilidad de concertar la atención primaria. O que solo se activaría en caso de "catástrofe o emergencia", algo que no figura en el texto que se puede consultar en la web de la normativa en elaboración de la Junta.

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"Esto es para Godzilla en el Guadalquivir", ironizó Inma Nieto, portavoz de la coalición de izquierdas, que también ha cargado contra García porque admitió, hace unos días, que entre las situaciones excepcionales está la falta de profesionales sanitarios. La tesis de Nieto es que el Gobierno andaluz tiene intención de dotar con médicos privados los nuevos equipamientos que construye, como el Hospital Militar de Sevilla, que en realidad depende del Virgen del Rocío de la capital, de donde procede su personal.

Fue la dirigente de Por Andalucía quien sacó a la luz la orden después de denunciar el aumento del gasto en conciertos del Gobierno de Juanma Moreno. No obstante, hay que tener en cuenta que el PSOE ya denunció el contenido del texto de la orden el pasado agosto e incluso lo mencionó en el primer pleno ordinario de la legislatura, el pasado 14 de septiembre. "Yo no sé si están ustedes compitiendo a ver quién se carga antes la sanidad pública, pero lo parece", apuntó la diputada socialista María Ángeles Prieto, en referencia al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso.

García se defendió acusando al PSOE de ser precisamente quien impulsó los conciertos con clínicas privadas, pero también fueron los socialistas los que elaboraron órdenes que abrieron la puerta a privatizaciones de servicios como la diálisis. En esta idea abundó la portavoz del PP en sanidad, Beatriz Jurado, que ha insistido en que el origen de las críticas de la izquierda es electoralista y que sirve para "tapar" los "escándalos" del Gobierno central, como los efectos de la ley del solo sí es sí. "De eso es de lo que se habla en las casas", espetó la diputada cordobesa.

La consejera complementó esta idea con los datos de inversión y de crecimiento en el número de profesionales que ha registrado el Servicio Andaluz de Salud (SAS) en los últimos cuatro años. La consejera también se refirió a las mejoras salariales de los médicos y la apuesta de la Junta por mantener a los profesionales que se forman en el sistema público andaluz. "El 70% de los que acaban se queda", detalló García, que ha recordado que en la próxima década habrá 6.800 jubilaciones, por lo que han solicitado al Gobierno central una convocatoria extraordinaria de plazas de médico interno residente (MIR).