Lancia Pu+Ra Zero, avance casi indescifrable de los tres futuros coches de la firma italiana

Cuando a comienzos de 2021 se creó el nuevo gigante automovilístico Stellantis, fruto de unir los grupos PSA y FCA, una de las primeras decisiones anunciadas por sus responsables, con el portugués Carlos Tavares al frente, fue mantener Lancia y potenciarla. La marca turinesa seguía activa, pero exclusivamente en el mercado italiano, donde su único vehículo en producción, el Ypsilon, continuaba siendo uno de los favoritos de la hinchada local, siempre en el podio de los coches más vendidos en ese país y liderando incluso el segmento B.

Con Luca Napolitano confirmado como CEO de Lancia para poner en marcha el plan de renacimiento, pronto se supo que la estrategia de la marca en esta nueva era pasaría por lanzar tres coches hasta 2028, y siempre apostando con fuerza por la electrificación, aunque el primero de esos tres productos, que llegará en 2024 y será el nuevo Ypsilon, contará no solo con versiones eléctricas puras, sino también con mecánicas híbridas de gasolina. Es lo que tiene ser una marca con tantos intereses comerciales en Italia, un mercado donde el proceso hacia la electromovilidad está siendo más o menos igual de lento que en España.

De hecho, para esta nueva era Lancia se centrará inicialmente en unos pocos países europeos, lo que incluye lógicamente a Italia, pero también a España, Francia, Alemania, Países Bajos, Bélgica y Luxemburgo, mercados donde según sus encuestas internas la marca sigue estando bien valorada. Y tras ese nuevo Ypsilon, para cuya fabricación suenan rumores en torno a la planta zaragozana de Figueruelas, llegaría un coche de tamaño algo más grande que recuperará el popular nombre Delta, así como el nuevo buque insignia de la casa, aún sin bautizar y que será heredero de modelos como el Thema, el Kappa o el Thesis, aunque no está muy claro si será una berlina de tipo sedán u otro tipo de carrocería.

Y esos tres nuevos modelos de Lancia que aparecerán de 2024 a 2028 no solo supondrán un cambio radical en términos tecnológicos, sino también en cuestión de diseño, donde la casa italiana apuesta por el borrón y cuenta nueva; aunque sin perder de vista nunca las líneas de los coches míticos de la casa. Y esa ruptura estilística tomará como base el concepto Lancia Pu+Ra Zero, con ‘pu’ de puro, ‘ra’ de radical y ‘zero’ en referencia a la movilidad eléctrica sin emisiones, y que no es realmente un prototipo, sino una especie de manifiesto tridimensional que, ahí es nada, quiere definir el diseño de la marca “para los próximos cien años”. Aunque el Pu+Ra Zero, como propuesta de diseño para transmitir al público que Lancia vuelve por sus fueros, resulta un poco indescifrable: difícil saber qué prepara Lancia observando sus líneas.

Según los diseñadores, capitaneados por el francés Jean-Pierre Ploué, el futurista lenguaje del Lancia Pu+Ra toma ideas de las formas suaves, puras y sensuales de modelos clásicos como el Aurelia o el Flaminia, pero también de otros ámbitos del diseño ajenos al automóvil, como el mobiliario, la arquitectura y la moda, o la propia historia deportiva de la marca, materializada en el Stratos o los sucesivos Delta.

En cuanto a los interiores, el concepto Lancia Pu+RA Design se inspira en el diseño italiano de muebles italiano, en el cuidado del detalle y en la investigación de nuevos materiales nobles, pero a la vez sostenibles.

Los rasgos frontales del Lancia Pu+Ra Zero, todavía muy esquemáticos, son una reinterpretación de la histórica parrilla de la marca, el ‘calice’, ahora doseñada como tres rayos de luz que estarán presentes en los tres nuevos vehículos de Lancia para que sean muy reconocibles de día y de noche. Y sobre el ‘calice’ se dispondrán siempre las nuevas letras de Lancia.

En cuanto a la zaga, el Lancia Pu+Ra Zero deja claro que se apostará por luces traseras redondas que recuerdan a las del Stratos, y esta solución será aplicada ya al nuevo Ypsilon, que mostrará las actualizadas letras de Lancia entre las ópticas.

En palabras de Luca Napolitano, CEO de la marca, “la nueva era de Lancia comienza hoy con un nuevo logotipo y una clara visión de diseño. Como anticipo del nuevo Ypsilon, el primer vehículo de la nueva Lancia, presentamos Lancia Pu+Ra Zero, una escultura, un manifiesto tridimensional que inspira los vehículos que se lanzarán entre 2024 y 2028. Hoy es el comienzo de nuestro renacer, que sorprenderá a los fans de Lancia de todo el mundo. Lancia volverá a ser una marca deseable, respetada y fiable en el mercado premium europeo. Hoy es el comienzo de la nueva Lancia”.

El programa ‘Lancia Renaissance’ aprobado por Stellantis es un plan estratégico a diez años que incluye una gama con tres eficientes modelos, uno cada dos años a partir de 2024, y con la que esperan cubrir el 50% del mercado. Además, la marca aspira a vender únicamente vehículos 100% eléctricos a partir de 2028. Y otro pilar básico de Lancia en esta nueva fase será la sostenibilidad, para lo cual sus responsables ponen un ejemplo: en el habitáculo del futuro Ypsilon, al menos un 50% de las superficies a la vista serán ecológicas. Asimismo, está en marcha la creación de un modelo de distribución innovador, basado en un centenar de nuevos salones de exposición exclusivos en nuestro continente y una selección de socios en Italia, lo que se complementará con el aprovechamiento máximo de las ventas online.

También estrenarán escudo

Como explicaba Napolitano en la presentación del nuevo lenguaje de diseño en Turín ante decenas de periodistas de todo el continente, el logotipo de Lancia también cambia, un nuevo escudo que ilustrará a partir del nuevo Ypsilon la entrada en la era de la movilidad eléctrica.

Inspirado principalmente en el escudo de 1957, que se introdujo por primera vez en el Lancia Flaminia, será el octavo emblema de Lancia en sus 116 años de historia, y los concesionarios de la marca serán renovados para que luzcan la nueva identidad corporativa desde comienzos de 2024, coincidiendo con la llegada del primero de los tres nuevos modelos.

Pero para crear el nuevo logotipo, el equipo de diseñadores de Lancia estudió las siete versiones anteriores, comenzando por el sencillo y minimalista emblema de 1907, con el nombre Lancia en cursiva y de color dorado. Después llegó el logotipo de 1911, diseñado por el conde Carlo Biscaretti di Ruffia y que tenía ya algunos elementos que permanecerían a lo largo del tiempo, como el volante de cuatro radios, el mando del acelerador manual, la bandera rectangular y el asta en forma de lanza. Después llegó la versión de 1929, con su escudo triangular enmarcando el círculo del volante y que se mantuvo hasta 1957, cuando apareció uno de aspecto minimalista. La historia se completa con la versión simplificada y refinada de 1974, el emblema de 1981 creado por el diseñador Massimo Vignelli, que estilizó el escudo, la lanza, la dirección y la bandera, y, por último, el logotipo usado hasta ahora, aplicado desde 2007.