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Las claves del repaso del Real Madrid al Atlético para rozar la final de Cardiff
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sin respuesta atlética a un excelente madrid

Las claves del repaso del Real Madrid al Atlético para rozar la final de Cardiff

Desde el primer minuto el equipo de Zidane se mostró superior sobre el Bernabéu. Al entrenador le funcionó a la perfección su planteamiento y Simeone no encontró ni la más mínima respuesta

Hacía más de un lustro desde que el Atlético de Madrid no se sentía tan inferior en un derbi contra el Real Madrid. Desde que llegara Simeone, el club blanco había visto cómo el vecino equilibraba la balanza y se situaba a la altura de los más grandes clubes europeos, hasta el punto de retarle cuatro veces seguidas en la Champions League. Pero este martes, día de la Comunidad de Madrid, se reinstauró el viejo orden. Los de Zidane realizaron un encuentro perfecto de principio a fin sin ninguna fisura y sienten ya en la punta de sus botas la hierba del Millenium de Cardiff, la que sería la tercera final de Champions en cuatro temporadas. Repasamos cuáles han sido las claves para que esto sucediese.

Foto: Segundo hat-trick europeo consecutivo de Cristiano. (Reuters)

Cristiano Ronaldo

Es imposible empezar por otro personaje. Parece increíble que hasta la segunda parte del partido de Múnich, Cristiano llevase únicamente dos goles en esta Champions League. Ahora mismo ya está segundo en la clasificación de máximos realizadores, con diez tantos, a uno de Messi. Ha alcanzado esa posición en la tabla en solo tres partidos. Le hizo cinco al Bayern, le ha hecho tres al Atlético. El portugués está en el mejor momento de la temporada. No solo está volviendo a marcar, sino que ahora juega bien. Ya no es el Cristiano apático que deambulaba por el campo y molestaba más que aportaba. Ni es uno más. Lo es todo en este Madrid otra vez.

La defensa, sólida por primera vez

Solo había, en realidad, una duda razonable en la alineación del Real Madrid, una vez que se daba por hecha la titularidad de Isco Alarcón en el hueco de Bale. Esa incertidumbre era quién iba a acompañar a Ramos. Nacho había jugado los últimos partidos y su nivel había sido muy alto. Pero Zidane tiró por Varane, titular en condiciones normales. Y acertó de pleno. Por primera vez en meses, la defensa blanca estuvo a la altura de lo que corresponde al Madrid. Keylor Navas frenó una racha bochornosa, después de encajar durante 17 partidos consecutivos. Y el Madrid nunca antes en esta Champions había dejado su portería a cero. El resultado es revelador, pero más lo es la incapacidad rojiblanca para crear peligro. La calidad de Griezmann pasó totalmente desapercibida.

Los mejores laterales del mundo


Hay varios futbolistas del Madrid que están reencontrándose ahora en el momento clave con su mejor versión, pero ninguno está a la altura del estado de forma en el que se encuentran Marcelo y Carvajal. Se encontraban, mejor dicho, pues el lateral derecho se tuvo que retirar lesionado. Pero hasta que Nacho le reemplazó, el peligro del Madrid se concentró en sus costados, en los dos mejores laterales del planeta en la actualidad. Otros carrileros juegan bien, defienden bien, pero no son tan determinantes en una plantilla de tantísima calidad como la merengue. Los dos han mejorado notablemente en sus cualidades defensivas y son constantes amenazas para el equipo contrario cuando atacan. Se saben asociar en corto, no se precipitan con los centros, son incansables. La baja de Carvajal es, sin duda, sensible, pues su momento era inmejorable.

Foto: Pepe llegó en 2007 al Real Madrid, que pagó 30 millones de euros al Oporto. (EFE)

Los cambios de Zidane

De una manera o de otra, casi siempre acierta. Partamos de la base de la selección en la alineación. Una vez Varane jugaba por galones por encima de Nacho, tenía que decidir quién hacía de Bale. James completó los 90 minutos contra el Valencia y realizó un partido bastante bueno. También jugó Asensio en el segundo tiempo. El que no compareció fue Isco, por lo que era el elegido para estar ante el Atlético. Hizo una hora a buen nivel y le sustituyó Asensio para revolucionar de nuevo el encuentro. Entró Lucas y dio una asistencia de un gol. El contratiempo de Carvajal lo subsanó con clase y sobriedad Nacho Fernández. Todo aciertos.

La diferencia de profundidad de las plantillas

Este punto tiene relación con el anterior. A Zidane le funcionan los cambios porque elija a quien elija, sabe que va a funcionar a la perfección. El que entra juega tan bien (o a veces mejor) que el titular. El técnico francés ha mantenido a todos contentos, pero porque podía confiar en todos y cada uno de sus jugadores. En cambio, Simeone sufre a la hora de hacer permutas. No tuvo miedo a quedarse sin cambios a falta de casi media hora, pero los refrescos que entraron aportaron tanto o menos como los que ya estaban. ¿En qué mejoraron Gaitán, Torres y Correa a Gameiro, Saúl y Carrasco? En nada, en realidad. No se percibió una variación en el planteamiento y la aplicación, sí en la mera táctica. Y tampoco tenía algo mejor que le hiciera plantearse seleccionar a otros jugadores. Esto va más allá de la desgracia de perder a los tres jugadores que podían jugar en el lateral derecho. Es quizá, la principal diferencia entre los dos clubes de Madrid.

Superioridad en el centro del campo

En otras ocasiones, muchas otras, el Atlético había jugado un derbi como señor del mismo, como jefe. Esa preponderancia rojiblanca se había debido, entre otras cosas, a que había controlado la medular. Simeone jugó varias veces al Madrid con cuatro centrocampistas puros, lo que le generaba una superioridad en el medio que no tenía forma de contrarrestar el equipo contrario. En el Bernabéu, en el partido más importante del año para el Atlético, se encontró con eso mismo, pero al revés. Zidane salió con cuatro centrocampistas, por los tres del Atlético. En los dibujos tácticos a veces se coloca a Carrasco como cuarto centrocampista, pero no lo es, es delantero y juega como tal. Así, estaban Saúl, Koke y Gabi contra Casemiro, Kroos, Modric e Isco, quienes no les dieron a los primeros ni espacio ni tiempo para crear juego, no digamos ya ocasiones. Con la entrada de Lucas y Asensio y la salida de Saúl, se pasó prácticamente a un cinco contra dos que acabó matando al Cholo.

Foto: Panorámica del Santiago Bernabéu. (Foto de El Confidencial)

La psicología

El punto más grave e irreparable. Nadie le puede decir a un jugador atlético que se levante de todos los golpes que ha recibido del Madrid en Europa. Dentro de un tiempo, tal vez unas décadas, se olvidarán, jugarán otros futbolistas diferentes y se podrá afrontar el duelo de manera diferente. Pero dos finales perdidas están muy presentes en la memoria. Los jugadores no son robots, lo piensan, saben que han perdido siempre contra el Madrid en Europa y que lo normal es que vuelvan a hacerlo. Por el contrario, al Madrid lo opuesto. Jugar contra el Atlético en la Champions es sinónimo de victorias, de alegrías y saltan al campo con la convicción de ser mejores y de que, pase lo que pase, el triunfo caerá de su lado.

Hacía más de un lustro desde que el Atlético de Madrid no se sentía tan inferior en un derbi contra el Real Madrid. Desde que llegara Simeone, el club blanco había visto cómo el vecino equilibraba la balanza y se situaba a la altura de los más grandes clubes europeos, hasta el punto de retarle cuatro veces seguidas en la Champions League. Pero este martes, día de la Comunidad de Madrid, se reinstauró el viejo orden. Los de Zidane realizaron un encuentro perfecto de principio a fin sin ninguna fisura y sienten ya en la punta de sus botas la hierba del Millenium de Cardiff, la que sería la tercera final de Champions en cuatro temporadas. Repasamos cuáles han sido las claves para que esto sucediese.

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