El Balón de Oro de Benzema corona la evolución de un futbolista único en la historia del Madrid

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Hubo un tiempo no muy lejano en el que Karim Benzema era un futbolista incomprendido, visto como apático y discutido hasta el límite. No se entendía cómo un delantero con tanta sensibilidad técnica era incapaz de equiparar su interpretación del juego con un botín goleador digno de los atacantes más letales del continente. "Si no tienes un perro para ir a cazar y tienes un gato, pues vas con el gato", explicaba José Mourinho al principio de su carrera. Escudero sin igual de Cristiano Ronaldo, delantero con una movilidad permanente, nexo de unión entre centro del campo y la delantera y cerebro ofensivo y creativo del Real Madrid, nadie desarrolló una química tan profunda con el astro portugués como el francés de Lyon. Benzema era el '9' menos '9' del planeta porque ponía su extraordinario talento individual al servicio del colectivo y, en menor grado, al servicio de Cristiano Ronaldo. Así fue cómo el Real Madrid se hizo eterno en Europa y Karim siempre apareció en las fotos.

Después de sacrificar parte de su legado personal para engordar las cifras del luso, la marcha de Cristiano Ronaldo forzó la versión más jerárquica, voraz y del delantero, ahora sí, centro del Real Madrid. Con la responsabilidad histórica de exhibir todo el talento que albergaba, el galo dio un paso al frente cuando otros se escondían. Fue él quien asumiría todo el peso goleador mientras futbolistas como Gareth Bale, Isco Alarcón o Marco Asensio eran incapaces de mitigar el adiós del goleador más temible que haya visto el madridismo moderno. Todos fallaron menos el '9'. Llegó Santiago Solari para recuperar a los extremos y emergió Vinícius Júnior. Volvieron el desborde y la profundidad, pero el gol seguía siendo un territorio únicamente explorado por Karim Benzema en una temporada para el olvido.

"Creo que hay gente que no entiende lo que hago sobre el campo, yo ayudo a mis compañeros. Yo juego al fútbol para hacer historia. A veces la gente no entiende lo que hago en el campo, pero estoy aquí para ayudar a mis compañeros. A veces marco goles y otras veces no". La mejor frase sobre Karim Benzema es de Karim Benzema. En una etapa que podría haber llegado a ser traumática, el galo tiraría del carro. El Real Madrid siempre vuelve. Siempre. Incluso cuando el fichaje escogido por Florentino Pérez para acompañar a Karim fue el peor de la historia del Real Madrid hasta la fecha, Eden Hazard. Con Benzema al mando de operaciones de la nave madridista, el Madrid volvió por la puerta grande. El francés llevaba años siendo un genio, pero nunca jamás había jugado esa aura de líder que desarrollaría en las siguientes temporadas... con el premio de la Champions 2021/22 como guinda.

Una Champions League épica

"Haces bien en preguntarme por él porque es la hostia. Para la gente que le gusta el fútbol ver a Karim es un lujo porque disfrutamos de él y sus compañeros también. Hay que seguir porque Karim hace la diferencia y él sabe que sus compañeros son importantes", afirmó rotundamente Zinédine Zidane cuando le preguntaron por la evolución del punta galo en su segunda etapa en el Madrid. "Ahora os fijáis más porque marca goles, pero el mejor Benzema ha estado sobre el terreno de juego muchas más veces de lo que pensáis. Para la mayoría de la gente no es así, pero están equivocados", añadía el preparador francés.

Delantero único en su especie, el Balón de Oro corona un tramo final de carrera donde ha combinado las grandes portadas y los focos que aportan las cifras goleadoras con esos pequeños momentos de sensibilidad única para desactivar presiones y florecer a la espalda de centrocampistas rivales. Karim Benzema siempre fue mucho más que el gol sin dejar de marcar goles. Tampoco debe pasar desapercibida su influencia para apoyar a los jóvenes valores del Real Madrid, tal y como demostraría Rodrygo Goes en su primer hat-trick con la camiseta blanca: "Estoy muy contento por el hat-trick, con Karim Benzema es todo más fácil. Es un crack. Es un '10' que juega de '9'. Me ayuda mucho".

La excelsa temporada 2021/22 que protagonizó merece este trofeo. En el año en que nadie daba un duro por el Real Madrid como campeón de Europa, el club blanco ganó la Champions League más épica de la historia para cargarse a Inter de Milán (2º en Serie A), PSG (1º en la Ligue1), Chelsea (tercero en la Premier League y anterior campeón de la Champions), Manchester City (1º en la Premier League) y Liverpool (2º en la Premier League). Los tres goles al Paris Saint-Germain en el Santiago Bernabéu, otros tres al Chelsea en Stamford Bridge, los dos al Manchester City en el Etihad Stadium, el penalti marcado para acceder a la final... Benzema marcó 42 goles y 15 fueron en la Champions League.

Preguntado por el Balón de Oro, el mejor jugador de la final ante el Liverpool, Casemiro, fue claro: "En los años anteriores no nos fijábamos mucho en Karim porque teníamos un bicho que marcaba 50 goles al año. Pero él no ha cambiado en nada. Solo que se ha echado el equipo a la espalda y ha dado un paso adelante con los goles. Está claro que se va a llevar el Balón de Oro, porque no hay otro".

Tampoco dudó Carlo Ancelotti en agosto: "Nadie duda de que es el jugador más importante, el más eficiente del mundo en este momento. Karim fue muy importante para ganar la Champions. No marcó en la final, pero gracias a sus goles la jugamos". Florentino Pérez, que siempre protegió al francés, también tenía clara su elección: "El Balón de Oro es indiscutible para él". Y así ha sido. Un Balón de Oro ganado a pulso que refuerza una trayectoria increíble a la altura de unos pocos elegidos. El segundo máximo goleador en la historia del Real Madrid con 327 goles ya es un poco más eterno.