El zasca de Ancelotti al Barça por desprestigiar su Supercopa de España

Lo más difícil que hay en el deporte es ganar. Se puede hacer con diferentes estilos, ser más o menos vistoso, dar espectáculo o quedar como un rácano. Pero lo que realmente cuenta al final es la victoria. Y, si ha sido con justicia y deportividad, mejor todavía. Lo que ha hecho Carlo Ancelotti es ganar el primer título de la temporada a dos equipos históricos del fútbol español. Primero al Barcelona y después al Athletic. Ha ganado con dos estilos diferentes y, por supuesto, con merecimiento. Al Barça de Xavi le hizo daño con los contraataques y al Athletic de Marcelino García Toral con la posesión. Lo que no va a hacer Ancelotti es pedir perdón por ganar al contragolpe.

La imagen que se trasladó, tras el Clásico de Riad, es que el Real Madrid jugó como un equipo pequeño ante un Barcelona que todavía está tierno. Era un día para hacer sangre y el Madrid necesitó una prórroga. Tras el triunfo hubo más festejos en las filas del Barcelona que en las del Real Madrid. Algo insólito. Aceptable porque el Barcelona mejoró las sensaciones y, como dice Xavi, necesitan un punto de inflexión para volver a ser un equipo fiable y competitivo. Pero el que ganó fue el Real Madrid y lo hizo arrollando al rival con la contundencia de los contraataques. El estilo, la forma, el planteamiento de Ancelotti quedó como poco estético y hasta cobarde. Así que el entrenador italiano se rebeló en la sala de prensa y soltó: "Estoy encantado de que el Real Madrid juegue a la contra porque jugar a la contra no es tan sencillo. No es simple y tienes que tener a jugadores que te dan los pases en el tiempo justo y delanteros que puedan atacar en el tiempo justo... El tercer gol no lo hemos marcado con un balón largo para la carrera de Vinícius. Eran tres, cuatro pases muy cortos y con seis jugadores dentro del área del Barcelona. Esto es una contra bien hecha".

Con la Supercopa de España recién ganada, siendo superior al Athletic con la posesión del balón y con el juego directo, Carlo Ancelotti no sacó pecho, pero tiró de ironía. El periodista le pregunta: "¿Cuál te ha gustado más de los dos partidos?". Ancelotti rompe a reír y contesta: "Para mí hoy, demasiada posesión". Un zasca burlesco. Dicho con sorna y guasa. Los rivales del Real Madrid han celebrado perder o caer con dignidad en esta Supercopa y Ancelotti no permite que se desprestigie el estilo del contragolpe con el que gana su equipo. Cada equipo gana con sus armas y Ancelotti ni olvida ni perdona.

Lo mejor | El Real Madrid ha vuelto

En Barcelona están buscando ese punto de inflexión para poder tener certezas de que el equipo puede volver a ser competitivo sin Messi. Laporta tiene prisas y se precipita cuando dice que el Barcelona ha vuelto. Xavi todavía es un poco más prudente, aunque también se vino arriba por llevar al Real Madrid a la prórroga y dijo que estaba orgulloso pese a la derrota. Las imágenes de Laporta en el vestuario, arengando al equipo, incluso haciendo ver que esta derrota en el Clásico era como una victoria, fue otra manera más del presidente de desviar la atención.

El Real Madrid es el campeón de la Supercopa de España. Gana el primer título de la temporada. El considerado como el de menor importancia porque lo gordo llega a partir de ahora con la Champions, la Liga y la Copa del Rey. Pero el Real Madrid llevaba 18 meses sin ganar un título y con esta Supercopa, más la buena dinámica de resultados que lleva en la Liga, lo justo es decir que el que ha vuelto es el Real Madrid.

Lo bueno | El león de la final fue Modric

Los buenos aparecen en los partidos importantes y Luka Modric fue el mejor futbolista en la final disputada contra el Athletic. El croata dio otro recital de cómo llevar el peso del partido, marcar el ritmo con pases y profundidad. Hizo el primer gol en un preciso disparo tras un centro atrás de Rodrygo. El golpeo parece sencillo, pero la maniobra hay que ejecutarla a la primera y darle la dirección al balón para sorprender a Unai Simón. Lo de Modric es magistral. No juega andando un tipo que disputó la final con 36 años y 129 días. Al final del partido se llevó todos los honores. De Florentino Pérez, que insinuó que hay que darle otro Balón de Oro; de Carlo Ancelotti, que bromeó cuando le dieron el trofeo al mejor jugador y le dijo que había fallado un pase, y también de Luis Enrique, el seleccionador nacional que estaba en Riad y se rinde a la calidad del croata. Modric, un león.

Lo normal | Courtois, la red del Real Madrid

En un partido cómodo para el Real Madrid, una de las imágenes más espectaculares fue el paradón de Thibaut Courtois en el lanzamiento del penalti de Raúl García. Lo desvió con el pie cuando se había lanzado a su derecha. El tiro iba al centro, pero el belga (al que sus compañeros llaman 'jirafa') es tan grande y hábil que puso rígida la pierna izquierda y tensó el pie para rechazar la pelota.

Courtois es la red del Real Madrid. Evitó que el Athletic se metiera en el partido y hubiera final. Eran los minutos de asedio del equipo de Marcelino García Toral, colgando balones al área, exigiendo a la defensa, con Militao expulsado. Courtois se volvió a hacer gigante. Es un portero que está ganando partidos y que hace que el Real Madrid sea más sólido. Es una pesadilla para el Athletic, equipo con el que se ha enfrentado en tres ocasiones en poco más de un mes y ha tenido intervenciones decisivas en el Bernabéu, San Mamés y el estadio Rey Fahd.

Lo malo | Otra pifia de Militao

Eder Militao acaba la Supercopa de España con la sensación de que puede darte una alegría y producir una catástrofe. En la final fue expulsado por tener las manos desplazadas del cuerpo en el salto y tocar el balón dentro del área. Penalti y expulsión. En la semifinal contra el Barcelona estuvo despistado y flojo en el despeje del balón que costó el gol del empate a uno de Luuk de Jong. En el de Ansu Fati no llegó a incomodar el remate de cabeza del delantero azulgrana. Son las desconexiones de un central que tiene unas excelentes condiciones físicas, pero al que todavía le falta el oficio de su compañero David Alaba.

Ha empezado el año peor que lo acabó. En Getafe se relajó, perdió un balón en la acción del gol de Enes Ünal y le costó la derrota. Militao entra en la fase de la temporada en la que un error, un despiste y un exceso de confianza te puede costar una eliminatoria y, por lo tanto, un título. Tiene que mejorar la concentración.

Lo peor | Hazard, el invisible

Lo peor que le puede pasar a Eden Hazard es que se convierta en un futbolista irrelevante en el Real Madrid, y en la Supercopa de España no ha disputado ningún minuto. Mal asunto para el belga. Desde el partido contra el Alcoyano no ha vuelto a jugar. Cero minutos en la goleada al Valencia en el Bernabéu en la Liga e invisible para Ancelotti en el Clásico de Riad y la final contra el Athletic. No hay manera de que una de las estrellas del equipo remonte el vuelo. Queda claro que en los planes del entrenador están por delante Marco Asensio y Rodrygo e, incluso, cuando hay que buscar un revulsivo prefiere a Fede Valverde. Eden Hazard necesita jugar para coger ritmo de competición, pero Ancelotti solo ha confiado en él cuando se produjo el brote por coronavirus y había pocos efectivos en la plantilla.