Siete marcas de coches se unen para crear la mayor red de carga rápida en Norteamérica

BMW Group, General Motors, Honda, Hyundai, Kia, Mercedes-Benz y Stellantis han llegado a un acuerdo para constituir una joint venture sin precedentes, que aprovechará fondos públicos y privados para desarrollar una red de recarga eléctrica de alta potencia en Norteamérica y acelerar así la transición a la movilidad eléctrica.

En el caso concreto de Estados Unidos, en el país existen 32.000 puntos de carga rápida de acceso público para 2,3 millones de vehículos eléctricos, una proporción de 72 vehículos por cargador, según los datos del U.S. Department of Energy, correspondientes a julio de 2023. De hecho, el National Renewable Energy Laboratory (NREL), el laboratorio nacional de energías renovables de Estados Unidos, calcula que se necesitarán 182.000 cargadores rápidos de corriente continua para dar servicio a los 30-42 millones de vehículos enchufables que, según las estimaciones, circularán por las carreteras en 2030. En ese año también se espera que las ventas anuales de vehículos eléctricos superen el 50% de las matriculaciones totales del país.

De este modo, el objetivo principal de esta joint venture, constituida por siete grandes grupos automovilísticos, es instalar al menos 30.000 puntos en zonas urbanas y carreteras, con la previsión de inaugurar las primeras estaciones en verano de 2024 en Estados Unidos y, más adelante, en Canadá. Cualquier usuario de vehículo eléctrico podrá acceder a ella con conectores CCS y NACS, este último, el estándar de carga en Norteamérica que, sin ir más lejos, Tesla utiliza en sus coches desde 2012. Además, cada instalación contará con cargadores de corriente continua de alta potencia y la idea es que las estaciones se alimenten únicamente con energías renovables.

Otro de los objetivos es que estas nuevas estaciones ofrezcan comodidades y facilidades de recarga a los usuarios, que estén situadas en lugares de acceso cómodo y ofrezcan servicios complementarios como aseos, locales de restauración y tiendas en las proximidades o en las mismas instalaciones. De hecho, para la implantanción de los puntos se tendrán en cuenta las rutas vacacionales, de cara a garantizar la disponibilidad de recarga en trayectos de largo recorrido.

Dado que cualquier usuario podrá utilizar esta infraestructura de carga, la idea de los siete fabricantes es que las funciones y servicios de la red puedan integrarse en las aplicaciones y funciones a bordo de los vehículos de las distintas marcas, lo que incluye reservas, navegación, planificación inteligente de rutas o aplicaciones de pago, entre otras. Además, también estará disponible la tecnología Plug & Charge, que hace posible la operación de recarga de forma completamente automatizada, pues el proceso se reduciría a enchufar el coche a la red, comenzar la carga y desenchufar al concluir la operación, olvidándose de las tarjetas o las aplicaciones móviles para hacer el pago, pues el gasto se cargará directamente en la cuenta o tarjeta que ya esté dada de alta en el sistema.