Ojo, pagar la tarjeta de crédito con una cantidad fija al mes te puede salir caro

Establecer pagos automáticos es la forma más sencilla de gestionar las facturas de las tarjetas de crédito. Pero a muchos consumidores les cuesta dinero. Al configurar los pagos automáticos, autorizas a las empresas a retirar dinero directamente de tu cuenta corriente para pagar facturas recurrentes. Es una práctica habitual desde hace más de una década para gastos fijos, como la televisión cable, y cada vez más popular para facturas que fluctúan de un mes a otro, como las tarjetas de crédito.

La proporción de cuentas de tarjetas de crédito inscritas en estos pagos automáticos se duplicó aproximadamente entre 2015 y 2020 y sigue aumentando, según datos de la Oficina de Protección Financiera del Consumidor de EEUU, o CFPB, y varios ejecutivos de la industria.

En teoría, una mayor inscripción en el pago automático debería conducir a una reducción de las comisiones de las tarjetas de crédito, ya que los clientes que se suscriben a los pagos automáticos son menos propensos a olvidarse de pagar y, por lo tanto, pueden evitar las comisiones por demora y los cargos por intereses. Sin embargo, las comisiones e intereses totales pagados por los titulares de tarjetas aumentaron un 19% a alrededor de 240.000 millones de dólares de 2015 a 2020, según datos federales.

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Según un estudio de Jialan Wang, profesor asociado de Finanzas de la Universidad de Illinois Urbana-Champaign y antiguo economista del CFPB, los consumidores suelen acabar pagando de menos cuando recurren al pago automático. Según el estudio, los prestatarios que recurren al pago automático amortizan entre un 8% y un 17% menos del saldo mensual de sus tarjetas de crédito que los clientes que efectúan pagos manuales.

Señala que los pagos más pequeños llevan a pagar más en intereses, lo que podría contrarrestar el beneficio de evitar las comisiones por demora, especialmente a medida que suben los tipos de interés.

¿Cómo funciona?

Cuando los clientes de tarjetas de crédito se suscriben al pago automático, suelen tener tres opciones para los pagos mensuales: el mínimo requerido, el saldo total del extracto o una cantidad personalizada. La mayoría de las personas que se inscriben en el pago automático eligen el pago mínimo o el saldo total, explica Wang.

Según su estudio de 2022 para la Oficina Nacional de Investigación Económica, es más probable que los que eligen el "pago total" cuando establecen sus pagos automáticos cambien su configuración en los primeros 10 meses, ya que esta opción es menos asequible a largo plazo. Los que eligen "pago mínimo" tienden a mantener esa opción.

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Los escollos del pago automático

En la actualidad, más de tres cuartas partes de las personas utilizan el pago automático para al menos una factura, afirma Derek Swords, vicepresidente de pagos digitales de Fiserv, una empresa de pagos. Los pagos automáticos son cada vez más populares por su comodidad.

La mayoría de los consumidores se sienten más cómodos estableciendo pagos recurrentes, ya que los modelos de suscripción se utilizan para todo, desde servicios de streaming y suscripciones a gimnasios hasta café y lencería. Se trata de una mentalidad de "configúralo y olvídate", afirma Swords.

A los bancos también les gusta. Según Max Axler, director de crédito de Synchrony Financial, que gestiona más de 70 millones de cuentas de tarjetas de crédito, los clientes que realizan pagos automáticos suponen la mitad de riesgo que los clientes con un crédito similar que no los realizan. "Si por mí fuera, tendría inscrita al 100% de la población", sentencia.

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Las empresas de tarjetas de crédito suelen conceder el beneficio de la duda a los clientes que no pagan ocasionalmente y suponen que simplemente se han olvidado. Los retrasos en los pagos no suelen notificarse a las agencias de crédito hasta pasados 30 días.

Según Axler, las cuentas que se dan de baja del sistema de pago automático antes de haber abonado la totalidad de su saldo o que sufren múltiples devoluciones de pagos automáticos por falta de fondos provocan una alerta inmediata. "No es raro que esa persona entre en mora", afirma. Aunque la inscripción en el sistema de pago automático no afecta directamente a la puntuación crediticia, ser percibido como más arriesgado por el banco puede dificultar la aprobación de más créditos o reducir los límites de crédito, según los asesores financieros.

En Capital Services, una empresa de tarjetas de crédito que gestiona las carteras de tarjetas de varios bancos regionales, el 0,3% de los planes de pago automático se cancelan cada mes por comisiones insuficientes.

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Esta tasa no es lo bastante alta como para alarmarse, pero sí para demostrar que el pago automático no es viable para todo el mundo, según escribe Sherry Tunender, vicepresidenta senior de Capital Services, en una carta a la CFPB consultada por The Wall Street Journal. "Las personas que se han inscrito en [el pago automático] pero cuyos pagos son devueltos no deberían haberse inscrito en primer lugar", afirma.

Elija sus impagos

La única forma segura de evitar comisiones e intereses con el pago automático es pagar el saldo en su totalidad. Pero eso sólo funciona para las personas con ingresos fiables y hábitos de gasto estables. Las comisiones por descubierto pueden contrarrestar cualquier ahorro derivado de las comisiones por demora si gastas más en tu tarjeta de crédito de lo que tienes en tu cuenta corriente.

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Puedes evitar los descubiertos programando los pagos automáticos para los días en que cobras, en lugar de utilizar la fecha de extracto por defecto, explica Wang. Según los asesores financieros, también es útil pagar las facturas a la antigua usanza, manualmente. La gestión activa de la cuenta ayuda a controlar los gastos y a detectar cargos fraudulentos.

"El pago automático no ha cambiado mucho en muchos años, y tanto si los consumidores lo utilizan como si no, no les está sirviendo necesariamente de mucho", afirma Wang.

*Contenido con licencia de "The Wall Street Journal"