Los alcistas toman las riendas del mercado: "Hay miedo a perderse las subidas"

Los inversores alcistas han agarrado las riendas del mercado, pero están a punto de entrar en un tramo complicado, que incluye datos económicos clave y la próxima decisión de la Reserva Federal sobre los tipos de interés. El S&P 500 entró en un nuevo mercado alcista la semana pasada, tras subir más de un 20% desde su mínimo de octubre. El mercado bajista, que duró 248 sesiones bursátiles, fue el más largo del índice desde 1948, según Dow Jones Market Data. En 2023 ha subido un 13%.

Bajo la superficie, hay señales alentadoras de que el rally tiene recorrido, aunque hasta hace poco no eran muchos los inversores que confiaban en él. La confianza de los inversores aumentó la semana pasada hasta alcanzar el nivel más alto en año y medio. La amplitud del mercado, o el número de valores que participan en el repunte, se ha ampliado finalmente más allá de las acciones de las grandes empresas tecnológicas.

Mientras tanto, los inversores particulares han vuelto a entrar en el mercado después de haberse mantenido al margen durante los últimos tres meses, y los inversores institucionales también están volviendo a entrar, según los últimos datos de flujos de fondos.

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"Ha sido una agradable sorpresa", afirma Kristina Hooper, estratega jefa de Mercados Globales de Invesco. "Lo que estamos viendo es miedo a perderse las subidas. Ha habido una parte significativa de inversores que se han mantenido al margen desde el otoño pasado, y han visto cómo la bolsa subía y subía". Los datos del índice de precios al consumo del martes, que proporcionarán información sobre la dirección de la inflación, marcarán la próxima prueba para las acciones. La inflación sigue estando muy por encima del objetivo anual del 2% fijado por la Reserva Federal, y los mercados se han mostrado especialmente volátiles en los últimos meses en torno a la publicación del informe.

Por su parte, se espera que la Fed mantenga los tipos de interés estables el miércoles, pero podría indicar que se producirán nuevas subidas de tipos en el futuro. La conferencia de prensa del presidente de la Fed, Jerome Powell, será analizada con lupa por los inversores en busca de cualquier pista sobre su opinión acerca de la resistencia del mercado laboral y la economía. A continuación, el jueves, se publicarán los datos de ventas al por menor en Estados Unidos, que en general han sido sólidos.

La esperanza de que el banco central se acerque al final de su campaña de subidas de tipos de interés ha impulsado el rally de 2023. El índice Dow Jones ha ganado un 2,8%, mientras que el auge de la inteligencia artificial ha contribuido a la subida de los valores tecnológicos, con el Nasdaq Composite subiendo casi un 30%.

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La preocupación por una posible recesión también ha disminuido últimamente. Los empresarios siguen contratando agresivamente, los consumidores gastan libremente y el mercado inmobiliario parece estabilizarse, al igual que el sector bancario.

"La gente está empezando a ser más positiva respecto a los mercados de renta variable como lugar al que acudir", afirma Brett Bernstein, director ejecutivo de XML Financial Group. Bernstein explica que está tratando de aumentar la exposición a la renta variable frente a la renta fija, señalando también que los ingresos obtenidos en los fondos del mercado monetario bajarán si la Reserva Federal recorta los tipos.

Wall Street parece pensar que las acciones tienen más margen de maniobra. El viernes, Goldman Sachs Group elevó su objetivo de precio de fin de año para el S&P 500 de 4.000 a 4.500, lo que representaría una ganancia del 3,7% desde el cierre del lunes. El banco basó su valoración en la disminución de las probabilidades de recesión y en la mejora de los beneficios empresariales.

Mientras tanto, la historia sugiere que las acciones tienden a seguir subiendo tras el inicio de un nuevo mercado alcista. En tales casos, desde la década de 1950, el S&P 500 subió el 92% de las veces durante los 12 meses siguientes, con una rentabilidad media del 19%, según Bank of America Global Research.

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El sentimiento de los inversores ha cambiado a su vez. El sentimiento alcista, o las expectativas de que los precios de las acciones suban en los próximos seis meses, aumentó la semana pasada hasta el 44,5%, el nivel más alto desde noviembre de 2021, cuando los valores tecnológicos y otros valores de crecimiento alcanzaron su máximo, según la Asociación Americana de Inversores Individuales. Esto puso fin a una racha de 16 semanas en las que la lectura estuvo por debajo de la media a largo plazo del 37,5%.

Algunas señales de amplitud del mercado también han mejorado en los últimos días. Hasta el miércoles, 20 valores eran responsables de la rentabilidad positiva del S&P 500 este año, frente a ocho a finales de mayo, según Howard Silverblatt, analista principal de índices de S&P Dow Jones Índices. A Apple, Microsoft y Nvidia se unieron Eli Lilly, General Electric y Berkshire Hathaway.

Incluso las acciones de pequeña capitalización, que a menudo se perciben como arriesgadas y sensibles a los factores económicos, están subiendo. El Russell 2000 ha ganado un 7,1% en junio, su mejor comienzo de mes desde febrero de 2021, según Dow Jones Market Data. Las pequeñas capitalizaciones empezaron el año con fuerza, pero el repunte no duró mucho.

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Sin duda, la amplitud del mercado sigue siendo bastante estrecha, y dado que solo un puñado de acciones están impulsando sus ganancias, los inversores temen que se vuelva vulnerable a un retroceso si incluso una o dos grandes empresas dan un paso en falso.

En cuanto a los inversores particulares, compraron una media diaria neta de 1.360 millones de dólares en renta variable estadounidense en la semana que terminó el miércoles, según Vanda Research. Esto supone aproximadamente el doble de las entradas diarias registradas en mayo. Algunas de sus compras más populares fueron Tesla, Apple, Advanced Micro Devices, Nvidia y Amazon.com, todos ellos valores que figuran en la tabla de líderes de 2023.

Los gestores de dinero profesionales están siguiendo su ejemplo. Los fondos de inversión y cotizados centrados en acciones registraron las mayores entradas semanales del año durante la semana finalizada el 31 de mayo, según una nota de Deutsche Bank. En cambio, las entradas netas en fondos de renta fija se han ralentizado. A principios de año, los gestores de fondos tenían su exposición más baja a las acciones en relación con los bonos desde 2009.

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Por supuesto, a muchos inversores les preocupa que el repunte siga siendo frágil. Un mercado laboral caliente y una inflación persistente podrían impulsar a la Reserva Federal a subir los tipos de interés más de lo previsto, lo que probablemente ejercería más presión sobre las acciones.

Matt Miskin, codirector de Estrategia de Inversión de John Hancock Investment Management, afirma que está buscando valores tecnológicos de calidad de gran capitalización porque sus balances saneados pueden ayudarles a resistir los vientos en contra de la economía mejor que las pequeñas capitalizaciones.

"El rally acabará perdiendo fuerza a medida que el efecto retardado del endurecimiento de la Reserva Federal se convierta en un mayor lastre para la economía en el segundo semestre", opina Miskin.

-Con la contribución de Gunjan Banerji, Hannah Miao y Akane Otani.

*Contenido con licencia de The Wall Street Journal.