Es noticia
Bernanke decidirá este miércoles si empieza a bajar ya el telón de los estímulos 'anticrisis'
  1. Mercados
el 'dinero gratis' cumple hoy un lustro en eeuu

Bernanke decidirá este miércoles si empieza a bajar ya el telón de los estímulos 'anticrisis'

La sensación de deja vù es total. Y es normal, porque la reunión de la Fed es clavada a la de septiembre. Entonces no frenó el 'QE3'. ¿Se atreverá ahora?

Foto: El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke
El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke

La sensación de deja vù es total. Resulta lógico, porque la reunión de política monetaria que la Reserva Federal (Fed) celebrará esta semana es clavada a la que llevó a cabo en septiembre. Primero, por las fechas: ambas coinciden en los días 17 y 18. Y segundo, y principalmente, porque las dos citas acapararon una expectación de dimensiones mundiales con epicentro de una pregunta fundamental: ¿reducirá la entidad presidida por Ben Bernanke el volumen de las compras de deuda de su tercer programa de expansión cuantitativa (QE3)?Si a las 20 horas del miércoles no anuncia ninguna variación, habrá otra semejanza más con respecto a la cita de septiembre; en caso contrario, habrá una diferencia. Y será trascendental.

Por si no bastara con estos ingredientes, la cita cuenta con el morbo adicional de que será la penúltima presidida por Bernanke. Luego sólo le quedará una más, la de los días 28 y 29 de enero, ya que su mandato expirará el 31 de enero de 2014. Por tanto, todo estará envuelto por un tono de despedida que se verá incrementado por otro detalle: como en enero no habrá rueda de prensa al término de la reunión y en la de esta semana sí, la de este miércolesserá su última comparecencia ante los medios.

Y deberá ser claro en ella... decida lo que decida. Si la Fed no redude los estímulos, tendrá que explicar por qué no lo hace. Más aún, después de que a comienzos de diciembre se conociera que la economía creció un 3,6% en el tercer trimestre y que la tasa de paro cayó en noviembre hasta el 7%, el nivel más bajo desde 2008. Juzgará, por tanto, si estos datos aportan las pruebas que exigía antes de retirar los estímulos. Si, por el contrario, entiende que estos síntomas de mejoría bastan para comenzar a frenar el QE3(una maniobra conocida comotapering), deberá argumentar los motivos y, sobre todo, tendrá que dibujar la hoja de ruta que el banco central seguirá en los próximos meses.

En septiembre, el repunte de los intereses hipotecarios por el temor a la reducción de los estímulos disuadió al banco central, que mantuvo el 'QE3' sin cambios

Hace justo un año, en la última reunión de 2012, Bernanke reforzó al QE3, que había sido activado en septiembre. Si en su lanzamiento se le dotó con la capacidad de dedicar 40.000 millones de dólares al mes a la compra de deuda hipotecaria, tres meses después se incrementó su munición con 45.000 millones de dólares adicionales, que se destinarían a la adquisición de deuda pública. Desde entonces, por tanto, la Fed viene inyectando 85.000 millones de dólares mensuales con la compra de ambos tipos de títulos.

En Wall Street, esta extraordinaria dosis de liquidez se ha convertido en mano de santo, y los principales índices norteamericanos aspiran a cerrar su mejor año desde 2003. Al mismo tiempo, la mano visible de la Fed ha permitido que los rendimientos de la deuda pública estadounidense continúen en niveles históricamente bajos. Sin embargo, Bernanke se encuentra con un problema crucial en este terreno. Precisamente porque su estrategia monetaria ha domado los rendimientos, propiciando así que la economía haya gozado de unos bajoscostes financieros e hipotecarios, si esa mano se vuelve invisible los costes volverán a subir, encareciendo de ese modo las condiciones financieras para la economía.

En septiembre, el temor a que el repunte de los costes financieros arruinara la recuperación resultó determinante para que la Fed pospusiera el tapering. En las últimas semanas, los intereses hipotecarios han regresado a los niveles que alcanzaron a comienzos de septiembre, cuando se esperaba que la Fed frenara las compras de deuda. En ese momento, dicho repunte disuadió a Bernanke, que mantuvo el QE3 sin cambios. Habrá que ver qué dedice en esta ocasión.

Los tipos pueden esperar... y mucho

Lo que sí es seguro es que los tipos de interés continuarán entre el 0 y el 0,25% en el que se encuentran desde 2008. De hecho, hoy se cumplen cinco años justos de la cita en la que la Fed sorprendió al mundo con un mordisco al precio del dinero superior al esperado, puesto que lo abarató del 1 al 0-0,25%. Y siguen ahí desde entonces, con lo queEstados Unidos lleva cinco años disfrutando del dinero gratis.

La cita será un '3 en 1': a las 20 horas se conocerá el comunicado con la decisión de la Fed; a esa misma hora se difundirá otro documento con sus nuevas previsiones económicas y sobre los tipos de interés; y a las 20.30 horas comenzará la última rueda de prensa de Bernanke

Y los que vendrán, puesto que Bernanke ha dejado claro que el futuro de las compras de activos y de los tipos de interés camina por vías diferentes. Es más, en los últimos meses ha volcado sus esfuerzos en separar ambos terrenos con el propósito de aclarar que los intereses continuarán en mínimos históricos durante bastante tiempo por mucho que la Fed interrumpa por completo el QE3. Y todo indica que en la cita de esta semana la institución reafirmará esta impresión, puesto que la entidadactualizará sus previsiones sobre los tipos de interés. Hace tres meses, 12 de los 17 miembros de la entidad situaban el inicio de la subida de los tipos en 2015, mientras que sólo tres la ubicaban en 2014 y otros dos, en 2016.

Revisando los pronósticos

El banco central norteamericano también revisará sus previsiones económicas. Hace tres meses situaba el crecimiento entre el 2 y el 2,3% en 2013, entre el 2,9 y el 3,1% en2014 y entre el 3 y el 3,5% en2015. En cuanto al desempleo, lo veía entre el 7,1 y el 7,3% este año, entre el 6,4 y el 6,8% en2014 y entre el 5,9 y el 6,2% en 2015. Las cifras que presente ahorasobre el paro resultarán determinantes para anticipar las futuras intenciones de la Fed, que ha situado la recuperación del empleo en el centro de su estrategia monetaria.

Tampoco se olvidará de los precios. En septiembre, los pronósticos de la entidad cotemplaban una tasa de inflación comprendida entre el 1,1 y el 1,2% en 2013, entre el 1,3 y el 1,8% en 2014 y entre el1,6 y el 2% en 2015.

La sensación de deja vù es total. Resulta lógico, porque la reunión de política monetaria que la Reserva Federal (Fed) celebrará esta semana es clavada a la que llevó a cabo en septiembre. Primero, por las fechas: ambas coinciden en los días 17 y 18. Y segundo, y principalmente, porque las dos citas acapararon una expectación de dimensiones mundiales con epicentro de una pregunta fundamental: ¿reducirá la entidad presidida por Ben Bernanke el volumen de las compras de deuda de su tercer programa de expansión cuantitativa (QE3)?Si a las 20 horas del miércoles no anuncia ninguna variación, habrá otra semejanza más con respecto a la cita de septiembre; en caso contrario, habrá una diferencia. Y será trascendental.

Reserva Federal Política monetaria Tipos de interés Crisis Inflación Paro Wall Street
El redactor recomienda