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El cabo de Gata no quiere ser el Campo de Gibraltar: el narco abre otro frente al Gobierno
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GRUPOS DE NARCOLANCHAS

El cabo de Gata no quiere ser el Campo de Gibraltar: el narco abre otro frente al Gobierno

Las calas del parque natural almeriense se han convertido en 'áreas de servicio' de las narcolanchas. El alcalde de Níjar, principal municipio, pide medios para los cuerpos policiales y denuncia la "inseguridad e impunidad" de los traficantes

Foto: Narcolanchas en el Cabo de Gata en Almería. (EFE/AUGC)
Narcolanchas en el Cabo de Gata en Almería. (EFE/AUGC)

La instantánea se registró poco después del asesinato de dos guardias civiles en el puerto de Barbate (Cádiz) y alimentó esa sensación de fragilidad de las costas españolas que denuncian los sindicatos policiales. Siete narcolanchas, tranquilamente, refugiadas del temporal en la playa de Genoveses, en pleno Cabo de Gata almeriense. Sin que la Guardia Civil pudiese actuar porque sus embarcaciones no podían zarpar por el estado del mar.

Esta situación se produjo el primer fin de semana de marzo. Y las fotografías y videos captados por los ciudadanos mostraban el desahogo con el que se desenvuelve el narco. Una sensación que parecía reservada al Campo de Gibraltar y que este pasado fin de semana se revivió en Níjar. Su alcalde, José Francisco Garrido, ha alzado la voz para reclamar al Gobierno de España que "actúe de una vez" para hacer frente a "una situación inédita de inseguridad e impunidad".

"Vemos a los narcotraficantes pasearse por nuestras playas sin que las fuerzas de seguridad puedan hacer absolutamente nada", lamentó el regidor, que volvió a poner el foco sobre el Ejecutivo central al sostener que los agentes carecen de medios para atajar esta problemática.

"Nada más llegar a la alcaldía, solicitamos una reunión con el subdelegado del Gobierno en Almería —José María Martín— porque teníamos constancia de la entrada masiva de pateras por nuestra costa, sin que se hiciera nada al respecto", explicó Garrido sobre el primer movimiento del consistorio, en verano. "Le pedimos que se aumentara la presencia de la Guardia Civil en Níjar, pero se nos dijo que no había ningún motivo para ello", añadió.

Foto: Imagen de archivo de la colisión de una narcolancha con una embarcación de la Guardia Civil. (Jucil)

El alcalde, después de que el pasado sábado se repitiese la presencia de narcolanchas en el parque natural del Cabo de Gata —esta vez, en Cala Grande, según avanzó Diario de Almería—, anunció que va a solicitar "formalmente" que se reúna la Junta Local de Seguridad "para conocer cómo se va a hacer frente al aumento de inseguridad ciudadana".

Lo cierto es que el litoral almeriense ha sido punto de entrada habitual de embarcaciones que transportaban inmigrantes irregulares o fardos de droga. Pero en los últimos tiempos los traficantes hacen gala de un "descaro", precisa un agente, que "no se cortan" en arribar en céntricas playas de municipios como "Roquetas, Adra, El Ejido, Carboneras, Garrucha" o la propia capital.

Víctor Vega, portavoz de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) en Almería, lo tiene claro: "Nos están viniendo por todos lados". Vega lo define como "pateras kamikaze".

"Nuestra mejor embarcación, en un día sin temporal, plato, como solemos decir, no puede interceptar a estas gomas. Se ríen de nosotros"

"Estas mafias de la inmigración y el narcotráfico cada vez tienen más poder" y "su lema es no parar". Una situación ante la que los agentes del Instituto Armado se tienen que enfrentar con "chatarra flotante", denunció Vega, que en declaraciones a este periódico explicó que la "interceptadora" con la que cuentan en la provincia "ha sobrepasado sus horas de mar".

El resto de la flota del Servicio Marítimo está igual o averiada. Pero no solo eso: "Nos enfrentamos a narcolanchas que alcanzan los 60 nudos de velocidad cuando nuestros barcos difícilmente llegan a los 30".

"Nuestra mejor embarcación, en un día sin temporal, plato, como solemos decir, no puede interceptar a estas gomas. Se ríen de nosotros", remarcó el portavoz de la AUGC, que se remite a un video difundido en sus redes sociales en el que se observa la incapacidad de una lancha de la Guardia Civil para atrapar a una patera que acababa de dejar a decenas de inmigrantes.

"¿Qué van a hacer el Ministerio del Interior? ¿Se van a reunir con representantes del Ministerio de Defensa para pedir apoyo inminente de la Armada? ¿O se va a hacer lo que hasta ahora? Que ha sido esperar a que el problema se calme por sí solo. Porque eso no va a ocurrir. La presencia de estas organizaciones será cada vez más habitual", avisó este representante de los guardias civiles.

Foto: Puerto de Barbate, donde seis agentes fueron arrollados por una narcolancha que era jaleada por numerosas personas. (EFE/David Arjona)

Fuentes de la Delegación del Gobierno en Andalucía, a preguntas de El Confidencial, negaron cualquier atisbo de dejadez y aseguraron que "la vigilancia sobre estas narcolanchas es continua".

"El operativo se decide en función de las circunstancias de cada momento. Si las condiciones del mar son adversas, no es seguro realizar una aproximación", pero "esto no significa que estas embarcaciones no estén permanentemente vigiladas por las fuerzas y cuerpos de seguridad".

La instantánea se registró poco después del asesinato de dos guardias civiles en el puerto de Barbate (Cádiz) y alimentó esa sensación de fragilidad de las costas españolas que denuncian los sindicatos policiales. Siete narcolanchas, tranquilamente, refugiadas del temporal en la playa de Genoveses, en pleno Cabo de Gata almeriense. Sin que la Guardia Civil pudiese actuar porque sus embarcaciones no podían zarpar por el estado del mar.

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