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Muerte, droga e incautaciones en el Campo de Gibraltar: "Esto nunca acabará"
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LA GUERRA CONTRA LA DROGA EN EL ESTRECHO

Muerte, droga e incautaciones en el Campo de Gibraltar: "Esto nunca acabará"

Guardia Civil y Policía Nacional admiten que se ha restaurado el principio de autoridad en el Campo de Gibraltar y que las nuevas rutas de la droga han ayudado a reducir la lacra

Foto: Miembros de la Guardia Civil en La Línea. (EFE)
Miembros de la Guardia Civil en La Línea. (EFE)

Fue un golpe durísimo en esta guerra que continúa en el sur de España. Un guardia civil murió en acto de servicio mientras perseguía a un narcotraficante. Se llamaba Fermín, tenía 45 años, estaba casado y tenía una hija.

Sí, más detenciones de "los malos", más kilos de droga incautadas, más vigilancia… "Vamos ganando el partido. Ellos cada vez se ponen más nerviosos, pero esto nunca acabará", lamenta a este diario un experimentado miembro de la Policía Nacional destacado en la zona.

Foto: Un niño pasea con su bicicleta junto a la cola de coches para entrar a Gibraltar, en La Línea de la Concepción (Cádiz). (EFE)

La memoria de la Fiscalía Antidroga de la provincia de Cádiz no deja lugar a dudas: en 2018 se intervinieron 274,5 toneladas de hachís y 15,5 toneladas de cocaína. El precio en el mercado de lo aprehendido asciende a 442 millones de euros. Más datos; el año pasado se produjo "un nuevo aumento" (24 toneladas más) de las aprehensiones respecto a 2017.

"La verdad es que sí se ha potenciado la zona en efectivos y medios. Han subido las detenciones y las incautaciones de droga y tabaco, ya que por la noche se paran todo tipo de embarcaciones que van cargadas de una u otra cosa", detalla un agente.

Principio de autoridad

El aumento de efectivos en la zona está provocando una debilidad en su infraestructura. "Eso les está haciendo daño. Por ejemplo, antes compraban garrafas de gasolina por furgonetas y ahora van y llenan de dos en dos por miedo a perder furgones enteros de gasolina". "Lo que está pasando", añade un miembro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, "es que están intentando intimidar, pero la verdad no creo que lleguen hacer algo porque nosotros hemos recuperado el principio de autoridad. Prefieren abrir nuevas rutas o, mejor dicho, usar alguna en desuso, antes que pelear".

El 'decreto Marlaska' aportó una partida especial de seis millones de euros para la lucha contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar. Para 2019 la partida se amplió a 20 millones en el que se incluía el pago de comisiones de servicios para completar las plantillas. Hay resultados: desde septiembre de 2019 a la actualidad se han detenido a 3.000 personas y se ha dañado el entramado de organizaciones criminales que operaban en la zona con conexiones a las provincias de Málaga y Sevilla y en el extranjero.

"Urge juzgar pronto y aplicar la ley para que no puedan salir absueltos. Los depósitos judiciales están desbordados"

Francisco Mena, coordinador de la Federación de asociaciones antidroga Nexos, es la persona que se sabe más al detalle cómo ha cambiado la situación. "Nos queda todavía un largo camino por andar. Sobre todo, se está produciendo un cuello de botella en la judicatura. Hay abiertas muchas operaciones judiciales, pero los juzgados de instrucción, a pesar del aumento de fiscales, que es algo muy positivo, no tienen capacidad para absorber todo el trabajo que tienen".

¿Cuál es el problema? Se han creado tres juzgados: Algeciras, La Línea y San Roque, pero hay que acondicionar estas infraestructuras. Los jueces decanos han puesto el grito en el cielo y alertan de una dilación indebida. Urge juzgar pronto y aplicar la ley para que no puedan salir absueltos. Los depósitos judiciales están desbordados y se necesitan partidas presupuestarias extra para poder destruir todo el material de narcotráfico incautado.

Foto: Narcolanchas amontonadas en el puerto de Algeciras.


Las narcolanchas ya no salen a subasta, pero hay que cumplir con la normativa ambiental para transportarla a un punto limpio. Esta tramitación es lenta y hace falta más agilidad para que se puedan desmantelar. Estas narcolanchas, que pueden contar entre 3 y 5 motores, pueden llegar a valer hasta 300.000 euros.

"Estamos en una situación de calma tensa como se ha demostrado con la muerte del guardia civil la semana pasada. La situación es complicada y esperamos el plan integral", recuerda Mena. Los presupuestos que propuso el PSOE (y que no aprobó el Congreso de los Diputados) contemplaban una inversión de 800 millones en cuatro años para el Campo de Gibraltar en materia de seguridad, formación y empleo. También incluía la mejora de la infraestructura viaria entre Bobadilla (Málaga) y Algeciras.

El responsable de la coordinadora echa de menos en el borrador de Presupuesto de la Junta de Andalucía presentado esta semana "partidas específicas más generosas con la zona, sobre todo en La Línea, que es donde la situación está peor". La plataforma 'Por tu seguridad, por la de todos' se reunirá este viernes para valorar la situación existente y ver "hacia dónde vamos". "Aquí", explica, "no se ha acabado con la impunidad, pero tienen que empezar a salir los juicios y sentencias ejemplares; la gente tiene que saber que no se puede hacer lo que le dé la gana".

Un futuro sin narco

También cree que el plan integral para la zona "no debe ser flor de un día", porque cree que cuando afloje la presión pueden volver a actuar con la virulencia de hace un año. "Tiene que haber perspectiva y que en la comarca se tenga muy claro que en el narco no hay futuro".

Un guardia civil de la comarca admite a El Confidencial que ahora "los malos" están trabajando menos. "Están ampliando horizontes a las provincias limítrofes así como por el Guadalquivir. Pero en el mismo momento que falten en esta zona, los agentes que ahora mismo tenemos de forma eventual, volverá todo a su cauce. Tendrían que aumentar los medios de modo permanente".

Otro compañero no ve la situación tan clara: "El epicentro del narco sigue estando aquí…".

Fue un golpe durísimo en esta guerra que continúa en el sur de España. Un guardia civil murió en acto de servicio mientras perseguía a un narcotraficante. Se llamaba Fermín, tenía 45 años, estaba casado y tenía una hija.

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