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El Barça arrasa al Athletic y amarga el regreso de Ernesto Valverde al Camp Nou (4-0)
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Repaso azulgrana absoluto

El Barça arrasa al Athletic y amarga el regreso de Ernesto Valverde al Camp Nou (4-0)

El conjunto azulgrana voló por los aires el sistema defensivo de un frágil y desconcentrado Athletic. Dembélé, autor del primer gol y de tres asistencias, fue el mejor jugador del partido

Foto: El futbolista francés anotó el primer tanto del partido. (Reuters/Albert Gea)
El futbolista francés anotó el primer tanto del partido. (Reuters/Albert Gea)

El FC Barcelona borró de la faz del Camp Nou al Athletic Club en el regreso de Ernesto Valverde a la que fue su casa. El conjunto de Xavi Hernández, a lomos de un inspirado Ousmane Dembélé, finiquitó el encuentro en 22 minutos de dominio total y absoluto que se cuelan en el podio de los mejores partidos del Barça con el técnico catalán al mando. El extremo francés, autor del primer tanto del encuentro y de tres asistencias (Sergi Roberto, Robert Lewandowski y Ferran Torres), fue un elemento incontrolable para un frágil Athletic Club que no presentó batalla en ningún momento y encajó una goleada dolorosa (4-0).

Los azulgranas salieron en tromba, con la necesidad de reivindicarse en un mes muy difícil y de dar continuidad a lo visto contra el Villarreal. A pesar del baile de nombres en los extremos (Ansu Fati y Ferran Torres volvieron a ser suplentes frente a Ousmane Dembélé y Pedri) y en el lateral izquierdo (Alejandro Balde por Jordi Alba), el Barça exhibió muchas de las virtudes que sufrió el Villarreal en sus propias carnes. Presión alta efectiva para ahogar al rival, superioridad en los duelos individuales, intensidad en todas las fases del juego, amplitud y profundidad por banda, pases filtrados por dentro y contundencia en las dos áreas. Fue un baño con De Jong y Busquets en el doble pivote.

placeholder Ousmane Dembélé celebra con su compañero, Robert Lewandowski. (EFE/Quique García)
Ousmane Dembélé celebra con su compañero, Robert Lewandowski. (EFE/Quique García)

Sin apenas tiempo para recuperarse de las embestidas culés, Ousmane Dembélé abrió la lata con un gol de cabeza que radiografió la fragilidad defensiva de los leones tras el centro de Robert Lewandowski. La zaga vasca, que se caracteriza por defender el área sin contemplaciones, dejó rematar al extremo francés a placer. Unai Simón no llegó y el Barça se adelantó en la primera ocasión clara. Con todo de cara y Pedri danzando entre líneas como un falso extremo por la banda izquierda, el Athletic Club estaba desajustado en la presión.

Imparable Dembélé

Poco después, Sergi Roberto volvió a la carga por la banda derecha, quebradero de cabeza irresoluble para el cuadro bilbaíno. El canterano entró como un cuchillo en mantequilla, combinó con Dembélé, que lo dejó en una posición privilegiada dentro del área y remató con violencia. Su envío, desviado por Íñigo Martínez, superó a Unai Simón. El partido se le puso cuesta arriba a un Athletic Club indolente y frágil. Solo cuatro minutos después, Dembélé frotaría la lámpara para dibujar el centro del 3-1 y Lewandowski castigó al Athletic con dureza en un gol fantástico. A los 22 minutos, el partido ya había acabado para disgusto de Ernesto Valverde.

placeholder El Txingurri volvió al Camp Nou. (Reuters/Albert Gea)
El Txingurri volvió al Camp Nou. (Reuters/Albert Gea)

En el minuto 30, una falta de Dani García mandó a Gavi a la lona y el andaluz no pudo seguir. Entró Franck Kessié en su lugar, aunque solo pareció un golpe fuerte. Al descanso, el repaso táctico de Xavi Hernández a Ernesto Valverde era muy doloroso para el Athletic Club, superado en todas las facetas del juego y sin reacción a lo largo y ancho de la primera parte. Para el Barça las mejores noticias las protagonizaban Dembélé, eléctrico, regular y certero, y el lateral izquierdo, Alejandro Balde. El canterano frenó en seco a Nico Williams y ganó todos los duelos que disputó con él (seis de seis).

La segunda parte empezó con los mismos nombres... y el mismo guion. El Athletic Club se libró del cuarto tanto de la noche sobre la línea, cuando una pérdida de balón en la construcción del juego acabó con Sergi Roberto plantándose solo ante la meta defendida por Unai Simón. Por fortuna para los visitantes, Dani García envió la pelota al palo para salvar el gol. No era el día del Athletic y lo demostró Dani García. El centrocampista, que había entrado por el lesionado Ander Herrera, cayó también y Oihan Sancet entró en su lugar.

placeholder Gavi, lesionado. (EFE/Quique García)
Gavi, lesionado. (EFE/Quique García)

Con el Athletic Club rotó en 1.000 pedazos, Xavi oxigenó a su equipo ya pensando en el providencial partido ante el Bayern de Múnich en la Champions League este miércoles. Entraron Marcos Alonso, Ansu Fati y Ferran Torres por Lewandowski, Pedri y Koundé. Ansu, de los mejores jugadores contra el Villarreal, acarició el 4-0 y acto seguido lo hizo Ferran Torres. Cuando parecía que el partido se anestesiaba, una jugada sencilla y directa del Barça, que empezó De Jong y en la que asistió Dembelé con un centro cruzado, terminó con Ferran Torres coronando la actuación del mosquito en un buen gol del español.

En los últimos minutos, el ex racinguista Pablo Torre saltó al terreno de juego por un Dembélé que se llevó una potente ovación del Camp Nou. El Athletic Club, con un pésimo bagaje ofensivo (cero disparos a puerta en toda la segunda parte y solo uno en todo el encuentro), agotó el tramo final del partido colgando balones al área culé... sin encontrar rematador. Sergi Roberto se lesionó del hombro y el Barça se quedó sin cambios. Un fallo de ter Stegen pudo propiciar el gol de Sancet, pero ni aun así, porque Eric García la sacó bajo palos. El partido supone un grave correctivo para un equipo cuyas aspiraciones pasan por Europa y que, por primera vez en esta Liga, se dejó ir hasta llevarse una goleada impropia de los de Ernesto Valverde.

El FC Barcelona borró de la faz del Camp Nou al Athletic Club en el regreso de Ernesto Valverde a la que fue su casa. El conjunto de Xavi Hernández, a lomos de un inspirado Ousmane Dembélé, finiquitó el encuentro en 22 minutos de dominio total y absoluto que se cuelan en el podio de los mejores partidos del Barça con el técnico catalán al mando. El extremo francés, autor del primer tanto del encuentro y de tres asistencias (Sergi Roberto, Robert Lewandowski y Ferran Torres), fue un elemento incontrolable para un frágil Athletic Club que no presentó batalla en ningún momento y encajó una goleada dolorosa (4-0).

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