¿Y el Gobierno con quién va? El apoyo del 'hermano' de Rubiales a Rocha responde a Alsina

Horas después de que Luis Rubiales regresara a España y fuera detenido por la Guardia Civil nada más bajarse del avión, su testaferro, Pedro Rocha, por fin convocó elecciones a la presidencia de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Si bien aún no se ha atrevido a decirlo públicamente, el extremeño dimitió para poder presentarse como candidato oficialista, lo cual tiene sus ventajas, aunque en este caso el hecho de que represente la continuidad del rubialismo le desacredita.

De esta forma, al mismo tiempo que Carlos Herrera denunciaba en la Cope la maniobra de Rocha y confirmaba una vez más que se presentará a estos comicios previstos para el próximo 6 de mayo, en Onda Cero su tocayo Alsina lanzaba la pregunta de con quién va el Gobierno en estas elecciones. Teniendo en cuenta la protección que Pedro Sánchez —o Moncloa, como prefería decir el ahora senador José Manuel Franco— dispensó siempre a Rubiales, la pregunta no es baladí.

"Está como las maracas de Machín". Esta fue la respuesta que "un varón al que Tomás González Cueto identifica como Alejandro", le dijo al que fuera cerebro jurídico de Rubiales, cuando este le contó que había estado recientemente con el expresidente de la RFEF en la República Dominicana, "donde tuvimos un pequeño altercado". Hablando de Cueto, cabe recordar que Rocha no prescindió de sus carísimos servicios hasta que no fue detenido por los agentes de la UCO.

"La verdad es que ahora te diría que no nos hablamos, ¿sabes? Yo le ayudaré en su contencioso y tal", explicó Cueto al tal Alejandro, quien, como puede comprobarse cotejando el número de teléfono, no es otro que Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español (COE). Sin duda, uno de los principales protectores de Rubiales, gracias en gran parte a su estrecha relación con el presidente del Gobierno.

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El motivo de esta vinculación lo revelamos en este diario para enfado del gallego y quedó claro en aquellos mensajes que el que fuera máximo dirigente de la RFEF envió a Sánchez. "Presidente, en el deporte necesitamos que ganes tú. Alejandro Blanco y yo hemos hecho campaña por ti en todo momento", llegó a escribirle en vísperas de las elecciones de noviembre de 2019.

Blanco ya fue el gran defensor de Villar

Al igual que sucediera con su antecesor, Ángel María Villar, a pesar de todas las informaciones y denuncias que poco a poco fueron acorralando al inhabilitado Rubiales, Blanco se erigió en su gran defensor. "Mi hermano Luis", le gustaba decir. Hasta que su bochornoso comportamiento tras la final del Mundial femenino, algo grave, pero menor, comparado con todos los cargos que se le imputan, le llevó a ser uno de los primeros en pedirle que dimitiera. "Era un gesto coherente y el mejor para mostrar arrepentimiento por unas situaciones que van en contra del sentido común", señaló Alejandro en una rueda de prensa celebrada en el COE.

La conversación entre Blanco y el que fuera comisionado de control externo de la RFEF, además de presidente de la Comisión de Arbitraje Deportivo del COE, de ahí también su relación, fue interceptada en el marco de las investigaciones llevadas a cabo por la Fiscalía Especial Contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada de la Guardia Civil. Y, por supuesto, tuteladas por el Juzgado de Primera Instancia n° 4 de Majadahonda, sobre la supuesta comisión de los delitos de corrupción en los negocios, administración desleal y blanqueo de capitales.

Del 'hermano' de Luis a la hija de Cueto

A continuación, como ya está contado en este diario, Cueto le confesó a Blanco que Rubiales "me dijo que hiciera una cosa que era ilegal, yo no podía hacérsela y se lo dije Luis esto además pongo en riesgo al despacho". A lo que el expresidente de la RFEF le respondió echándole en cara la contratación de su hija. "Joder, yo recibí muchas críticas por cosas que he hecho cuando entró tu hija en la Federación", le dijo Rubiales, en referencia a Patricia González, contratada para el departamento jurídico de la RFEF con un contrato indefinido, aunque hasta entonces su experiencia profesional se limitaba a unas simples prácticas.

Según Cueto, su respuesta fue "hasta aquí hemos llegado, Luis", para añadir que "mi hija entró porque seguramente pensaste que me apetecía y tú me lo propusiste, no te lo propuse yo". "En fin, como me echó en cara lo de mi hija, pues ya no quiero saber, ¿sabes? Haz una cosa ilegal y, si no la haces, te echo una cosa en cara porque era una cosa casi delictiva. Últimamente, pide cosas que no se pueden hacer. Pero no a mí solo, a otros compañeros, a los que les dice que yo he hecho por ti", explicó.

"Luis ha hecho cosas por todo el mundo y nadie ha hecho nada por él, ese es el problema. Él se lo ha ganado todo", respondió, no se entiende bien si de manera irónica o ambigua, el que fuera 'hermano' de Rubiales. "Es acojonante, con lo que también nos la hemos jugado todos en su momento, ¿eh?", le respondió Cueto. Una frase esta que llamó la atención de los investigadores. "Asegura habérsela jugado junto con otras personas en un tiempo pasado, entendiéndose que se refiere a la etapa en la que Rubiales fue presidente de la RFEF", apuntan en el documento que forma parte del sumario.

Uribes come en la mano de Blanco

Blanco ya desveló que la última vez que habló con Rubiales fue la víspera de la famosa Asamblea General de la RFEF en la que hasta cinco veces dijo que no iba a dimitir, aunque finalmente se viera obligado a hacerlo tras ser inhabilitado por la FIFA. "¿Por qué no fui a la Asamblea? No voy a todas las asambleas de las federaciones. No era para que yo fuese. No tenía que estar allí, era un tema del mundo del deporte", explicó. El gallego maneja como pocos los hilos del deporte español, de ahí que se haya convertido en asesor directo de Sánchez, quizás el motivo de que en cinco años acumule cinco presidentes del Consejo Superior de Deportes (CSD).

Nada más dimitir Rubiales, Blanco ya expuso que el fútbol debía resolver un problema interno. "Si hay problemas, ellos lo deben resolver. Hay un presidente interino y las decisiones las debemos respetar", explicó el presidente del COE, quien la víspera de que Pedro Rocha fuera a convocar elecciones —aunque la irrupción de la UCO en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas se lo impidió— se reunió con el extremeño en un céntrico hotel de Madrid. Es de suponer que para darle sus sabios consejos y su bendición para presentarse.

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Unos días después, toda vez que Rocha tuvo que mantenerse al frente de la Comisión Gestora de la RFEF, ambos volvieron a coincidir en el palco del Estadio Santiago Bernabéu con motivo del España-Brasil, donde llamó la atención la ausencia de José Manuel Rodríguez Uribes. El actual secretario de Estado para el Deporte con el que mejor se ha llevado Blanco, hasta el punto de que hay quien piensa que el valenciano come en su mano.

A la espera de lo que el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) decida sobre la inhabilitación de Rocha, el apoyo del presidente del COE al candidato rubialista quizás responda la pregunta de Alsina sobre a quién apoya el Gobierno en las elecciones de la RFEF. Blanco y en botella.