Auditar la RFEF: el último intento de Pedro Rocha por desvincularse de Rubiales
La cabeza visible de Las Rozas, y aspirante a la presidencia, trata de romper con el pasado en un duro comunicado que arremete contra la gestión de Rubiales y anuncia una auditoria
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En mitad del desgobierno y el caos que impera en todo lo relativo a la Real Federación Española de Fútbol, la actual cúpula reacciona con el anuncio de una auditoria interna de "cualquier tipo de contrato que pueda estar bajo sospecha por la actuación" de su expresidente, Luis Rubiales. Pedro Rocha, cabeza visible de la actual RFEF y candidato oficialista, pero no oficial, a la presidencia, trata así de desvincularse de la anterior gestión.
Su imagen está dañada tanto por la incapacidad estructural de convocar elecciones a la presidencia hasta los continuos escándalos judicializados que implican a Rubiales, quien en el 2020 le nombró su vicepresidente económico. Esta misma semana, el Consejo Superior de Deportes elevó al TAD (Tribunal Administrativo del Deporte) la denuncia de Miguel Galán que solicitaba la inhabilitación de Rocha.
En un duro comunicado, la RFEF asegura "su total desvinculación con las conductas y actuaciones irregulares de su expresidente y de todos aquellos que pudieran estar involucrados, así como incidir en que esta institución está muy por encima de sus dirigentes".
Hay que recordar que no sería hasta la actuación de la Guardia Civil de la pasada semana cuando la Federación dejó de contar en su equipo con González Cueto, abogado encargado de los asuntos legales de Las Rozas, e impulsor de la campaña de burofaxes incesantes contra los medios de comunicación durante el 'Rubialismo'. Es decir, ha continuado siendo un peso pesado de la RFEF meses después de la salida de Rubiales.
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El organismo asegura que "exigirá responsabilidades a los encargados de enviar la documentación requerida por los juzgados, si se confirma que incumplieron su obligación" y "depurará cualquier otra responsabilidad que pudiera derivarse ante conductas y decisiones irregulares".
La nota incluye declaraciones del propio Pedro Rocha, quien a título personal como presidente de la Gestora afirma que es "imprescindible separar y desvincular a institución de las conductas presuntamente delictivas” y asegura que "se llegará hasta el final en depurar cualquier responsabilidad existente".
"Desde la RFEF se es consciente de la importancia del momento actual, a meses de una Eurocopa, unos Juegos Olímpicos y de la presentación de la candidatura del Mundial. Por ello, se garantiza ante FIFA, UEFA, el CSD y todos los aficionados y aficionadas la estabilidad de esta institución. El fútbol español es mucho más que sus expresidentes o dirigentes y así se quiere trasmitir a la opinión pública", finaliza el comunicado.
En mitad del desgobierno y el caos que impera en todo lo relativo a la Real Federación Española de Fútbol, la actual cúpula reacciona con el anuncio de una auditoria interna de "cualquier tipo de contrato que pueda estar bajo sospecha por la actuación" de su expresidente, Luis Rubiales. Pedro Rocha, cabeza visible de la actual RFEF y candidato oficialista, pero no oficial, a la presidencia, trata así de desvincularse de la anterior gestión.