A qué se enfrentan Modric y Kroos, por primera vez en el punto de mira del Real Madrid

Carlo Ancelotti avisó a Luka Modric y Toni Kroos, a principio de temporada, que podría llegar este momento. El de perder la titularidad y gestionar sus minutos para tenerlos frescos en lo físico y lo mental. No son dos chavales. La apuesta del entrenador es darle más fuerza al centro del campo. La del club pasa por ir cocinando sus relevos. En una temporada diferente y larga por el parón mundialista, las energías y el vigor son fundamentales para no caerse y el Real Madrid se llevó un buen tortazo en la final de la Supercopa de España contra el Barcelona.

La decisión de dejar a Modric y Kroos en el banquillo contra el Athletic resultó sorprendente por tratarse de los dos mejores centrocampistas que tiene el Real Madrid. Se interpretó como justa por el impacto que tuvo Ceballos en la remontada, con gol incluido, en el partido de Copa del Rey contra el Villarreal y la energía que aporta Camavinga. En San Mamés había que jugar un partido de alta intensidad y realizar un esfuerzo físico importante y Ancelotti, con la opinión de Antonio Pintus, prescindió del croata y el alemán y dijo que Camavinga había hecho un partido "espectacular".

La victoria en Bilbao, con portería a cero, refuerza el mensaje que el entrenador italiano dijo, a modo de toque de atención a la plantilla, sobre la exigencia que tiene el Real Madrid. Lo destacó públicamente tras la dolorosa derrota en la final de la Supercopa de España contra el Barcelona con el "no es un fin de ciclo, es el inicio de un ciclo". Para competir por los títulos no solo vale con tener talento. Hay que subir la intensidad, la energía y la agresividad.

Ganarse el puesto

Modric y Kroos entran en las rotaciones de Ancelotti. Dejan de ser indiscutibles, pese a que el entrenador, los dirigentes y los aficionados los vean como dos futbolistas incomparables por su talento y trayectoria. No son el futuro del Real Madrid, pero tampoco se puede hablar de ellos en pasado. Es pronto para sentarlos en el banquillo y para despacharlos. Al final de la temporada tomarán la decisión con el club, en función del rendimiento individual, los títulos y las sensaciones. Lo que les queda por delante en estos meses es ganarse el puesto de titular y su primera final, por extraño que parezca, es el partido de Copa del Rey contra el Atlético de Madrid.

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Ancelotti ha dado un paso importante con una decisión que tenía riesgo y que marca un antes y después en la revolución que planifica el Real Madrid. Ningún futbolista es eterno. Tampoco Modric y Kroos. Los dos tienen sustitutos dentro de la plantilla y el club trabaja cómo incorporar nuevos fichajes. Con Jude Bellinhgam como prioridad. Ninguno de los que están o los que vengan podrán compararse con el croata y el alemán, pero la alta competición y la exigencia del Real Madrid no espera a nadie por muy bien que lo hayas hecho. El entrenador les pide que tengan comprensión. Han podido tocar techo.

El objetivo de Ancelotti y Pintus es que Modric recupere el ritmo competitivo y la forma física para seguir exprimiendo su talento y liderazgo. Con Kroos hay menos dudas, a pesar de ser un futbolista que no se caracteriza por ser explosivo. Los dos deberían estar descansados y motivados para jugar el derbi de Copa del Rey en el Bernabéu. La suplencia en Bilbao también se explica por el apretado calendario, pero de fondo, en la decisión de Ancelotti hay un reconocimiento: no ve al croata, principalmente, ni al alemán en un buen momento de forma. Modric ni viajó al partido de Copa contra el Villarreal y Kroos fue sustituido en el inicio de la segunda parte. Sin ellos en el campo, ha llegado la reacción del Real Madrid.

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Modric y Kroos se enfrentan a una situación nueva. Por primera vez están en el punto de mira del Real Madrid con el paso que ha dado Ancelotti de dejarlos en el banquillo. Es un asunto que tiene una clara explicación. El entrenador necesita centrocampistas más físicos y a Modric y a Kroos las piernas no les dan para abarcar tantos metros y repetir esfuerzos. Con Casemiro y más jóvenes, vivían mejor. Con Tchouaméni y Camavinga, con menos experiencia y más vértigo, están obligados a hacer más esfuerzos.

Lo que no va a despreciar Ancelotti es el talento y el oficio de Modric y Kroos y lo que está por ver, en el foco de interés, es cómo gestiona sus minutos. Verles en el banquillo, a los dos juntos, es una imagen insólita que se puede repetir si gripa el motor del Real Madrid. Tchouaméni, Camavinga, Fede Valverde y ahora Ceballos aprietan al croata y el alemán. El partido de Copa del Rey contra el Atlético de Madrid sirve para evaluar si el croata y el alemán sufren un frenazo.