El miedo que el Real Madrid ha superado o cómo se habla ya de triplete en el vestuario

Han cambiado muchas cosas en el Real Madrid en el último mes. Lo principal y lo que más se destaca dentro del club es que las sensaciones acompañan a los resultados. Es lo mejor que le podía suceder al proyecto de Solari en el punto de la temporada en el que se reanuda la Champions. Llega la eliminatoria contra el Ajax de Ámsterdam y los miedos han desaparecido entre los dirigentes y en el vestuario. Buen síntoma para un equipo al que se le acumulaban los problemas físicos, anímicos y futbolísticos. Con Solari, el Real Madrid ha superado una gravísima crisis y un amago de una segunda en el inicio de año, cuando empató en Villarreal y perdió contra la Real Sociedad en el Bernabéu —6 de enero—.

Si nos quedamos solo con los números, parece escasa la remontada. Cuando Florentino despidió a Lopetegui, el Real Madrid estaba a siete puntos del Barcelona en la Liga. Hoy solo ha recortado uno. Está a seis puntos. Pero en el segundo lugar de la clasificación —Lopetegui lo dejó en el noveno puesto—. Con lo que sí hay diferencias en lo numérico que son destacables. Pero lo que realmente quita el miedo son las buenas sensaciones que trasmiten el juego colectivo y las individualidades de un equipo que se ha contagiado, entre otras cosas, de la alegría y el atrevimiento de Vinícius.

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El gran cambio —según señalan en el Madrid— es que ahora defienden y atacan todos. El rendimiento físico es la clave. El Real Madrid vuelve a ser un equipo compacto que ha superado dos buenos test: el Clásico copero en el Camp Nou y el derbi en el Wanda Metropolitano. Es más seguro y sólido, y tiene recursos para hacer goles. La confianza que han cogido los jugadores la demuestran en esta racha ganadora con la que han llegado al partido de ida de los octavos de final contra el Ajax. El que más lo celebra es Florentino Pérez.

No estaban muertos

Es un Real Madrid con tres claves en lo táctico: las líneas más juntas, presión alta y profundidad. Las tres instrucciones que da Solari han calado en la plantilla y se ejecutan con efectividad. El plan empieza a dar buenos resultados y estos producen optimismo. “Decían que estábamos muertos y ahora vamos a pelear por los tres títulos”, aseguran en el vestuario del Real Madrid. De verse fuera de la Liga a principios de año a pensar que darán guerra hasta el final, tener un resultado favorable en la Copa del Rey contra el Barcelona y volver a soñar con otra Champions.

Lo peor ha pasado en el Real Madrid. La desconfianza y la cantidad de lesiones quedan atrás. Solari tiene donde elegir y fomenta la competencia. Va a seguir poniendo difícil entrar en el once. Bale se esperaba jugar alguno de los dos últimos partidos —Barcelona y Atlético de Madrid— y fue suplente. Reguilón está por delante de Marcelo. Marco Asensio espera impaciente su oportunidad. Ha vuelto Mariano.

La otra clave que se destaca para ayudar a subir el nivel es la mejoría de Modric. El entrenador sigue decidido a fomentar la competencia y apostar por los que mejor estén en cada momento. El grueso de la plantilla —con Sergio Ramos a la cabeza— acepta la ley de Solari. Lo que quieren y necesitaban los futbolistas era ganar para subir su autoestima y sentirse competitivos. Hay un avance importante y experiencia como para no volver a cometer errores de bulto que les lleven a una nueva crisis.