Sánchez apela a los moderados catalanes y vascos a crear una nueva España autonómica

PSOE y PSC están a la caza del votante moderado. Del que cree que hay que cambiar las cosas, reformar la piel de España, pero sin hacer estallar las cosas y sin "imposiciones". Por eso los dos partidos hermanos inciden en que encarnan esa "transversalidad", la centralidad del tablero político. Lo dice Miquel Iceta en Cataluña y Pedro Sánchez refuerza ese discurso allá donde va. Como este lunes en Bilbao, en un desayuno informativo en el que presentaba a la líder del PSE, Idoia Mendia, y en el que también aprovechó para deslegitimar a Ciudadanos por no ser un "partido de gobierno" en Cataluña.

El secretario general del PSOE recordó que los socialistas fueron los "arquitectos" de la España autonómica. "Y lo vamos a volver a ser en esa nueva España autonómica que debe salir adelante, avanzar, perfeccionar su ser federal, que no cuestiona la diversidad territorial, y que garantice también la diversidad con la igualdad social y económica de todos los ciudadanos vivan donde vivan". Pero para que esa España autonómica "gane", dijo, hace falta algo: "Necesitaremos en Cataluña y en el conjunto de España, también en el País Vasco, a moderados y progresistas que creen en un cambio seguro, que es necesario en nuestro país, a los que defienden el diálogo y la palabra para resolver conflictos políticos y que tienen la experiencia y la credibilidad contrastada de saber impulsarlos, a los que creen en la búsqueda de acuerdos, no para imponerte sobre el adversario, sino para implicarte en un mismo proyecto compartido".

Los grandes retrocesos de la España autonómica han llevado la rúbrica del PP y ahora también la firma entusiasta de Cs

Eso ocurrió, señaló Sánchez, en 1978, cuando se consensuó el pacto constitucional y estatutario. Y por este procedimiento ha de vehicularse en 2017 las reformas respectivas. Por medio de "acuerdos transversales, plurales, y no por vías unilaterales", puesto que se trata de poner el autogobierno "al servicio de las personas, de sus necesidades sociales, y no de partidos y de cálculos electoralistas". El secretario general estaba también lanzando un guiño de complicidad hacia el PNV, con quien el PSE cogobierna Euskadi, para que se implique en ese proceso de reforma. El gesto hacia el nacionalismo moderado en Cataluña lo ha trenzado el PSC sumando en sus listas a representantes de la extinta Unió. Entre ellos, al 'exconseller' Ramon Espadaler como número tres de la lista por Barcelona. La apelación al "cambio seguro" ya estaba presente en la primera etapa del madrileño como jefe del PSOE.

Sánchez quiere hacer mucho hincapié en esta campaña hasta el 21-D en que la socialdemocracia en Cataluña representa la "concordia, la convivencia y el autogobierno". Pero "habrá que hacer mucha pedagogía por los pueblos de España sobre este modelo de concordia y autogobierno", porque "las derechas" de PP y Ciudadanos —ese es el rótulo favorito que está patrocinando la dirección del PSOE desde la semana pasada para agrupar a ambas formaciones— "aspiran a repetir muchos de los errores" del pasado, como son el "centralismo y la regresión autonómica", el "tratar de uniformar una España diversa". "Los grandes retrocesos de la España autonómica siempre han llevado la rúbrica del PP y ahora también llevan la firma entusiasta de Ciudadanos", sostuvo.

TE PUEDE INTERESAR

La apuesta de PSOE y PSC: elección de Iceta como 'president' aunque quede detrás de Cs

Juanma Romero

Gobernar la diversidad

La carga de Sánchez contra "las derechas españolas" que "nos gobiernan" fue total. "Se desenvuelven mucho mejor en la confrontación que en el diálogo, en la imposición que en el entendimiento". El PP y Cs "no son partidos de gobierno en Cataluña", resaltó, puesto que apenas controlan un ayuntamiento del millar que hay en la comunidad —Pontons, en Barcelona, de 453 habitantes, en manos de los populares, no hay ninguno que piloten los naranjas—. Y esa circunstancia demuestra, para el secretario general, que "no tienen un modelo de país, sino que tienen un modelo de confrontación territorial", y esa es la "diferencia" entre "las derechas" y los socialistas.

"Solo aquellos partidos que entiendan la diversidad podrán gobernar España", reiteró Sánchez, una frase recurrente en sus discursos y que suele hilar con el recordatorio de que el PSOE ha gobernado todas las comunidades a lo largo de estos 40 años de democracia, cosa que no ha conseguido ninguna otra fuerza. Y añadió que los ciudadanos reclaman "estar a la altura de quienes con su voto piden soluciones y censuran la cerrazón, el autoritarismo y las vías unilaterales, ignorando a una parte de la sociedad".

El líder socialista subraya que PP y Ciudadanos "no tienen un modelo de país, sino un modelo de confrontación territorial"

Aunque Sánchez disparaba este lunes contra PP y Ciudadanos, su objetivo prioritario es la formación de Albert Rivera, su directa competidora en Cataluña, según las encuestas. Si bien hasta ahora la mayoría de los sondeos colocan a Inés Arrimadas en segunda posición, tras ERC, seguida del PSC, también es cierto que los estudios demoscópicos apuntan a un crecimiento notable de Iceta. El de Gesop para 'El Periódico de Catalunya', publicado hoy, señala de hecho un triple empate entre Cs, PSC y Junts per Catalunya, la lista de Carles Puigdemont. Los socialistas, por tanto, quieren arañar voto moderado, recuperar a los electores que emigraron hacia el partido de Rivera. Y a ese objetivo se ha dirigido la confección de las listas —con el pacto con Units per Avançar, los herederos de Unió, pero también con la incorporación de referentes de la izquierda— y los primeros mensajes de precampaña.

El secretario general, que censuró el "retroceso y el daño social, político y económico" que los independentistas han provocado en una sociedad "abierta y cosmopolita" como la catalana, elogió el "pragmatismo" de los socialistas vascos. Y es que el PSE de Idoia Mendia, con un discurso "transformador y cargado de sentido común" está ahora mismo cogobernando Euskadi con el PNV de Iñigo Urkullu. Un Ejecutivo de coalición que "no significa que sea incoherente" con los postulados del partido.

Complicidad del PNV

La buena sintonía de socialistas y nacionalistas vascos se manifestó en el desayuno informativo de este lunes: acudieron el presidente del partido, Andoni Ortuzar; el portavoz del Gabinete autonómico, Josu Erkoreka, y el consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu, además el diputado general vizcaíno, Unai Rementeria, y la presidenta de las Juntas de Bizkaia, Ana Otadui.

Mendia también se hallaba arropada por su antecesor al frente del PSE, el exlendakari Patxi López, actual secretario de Política Federal de la ejecutiva de Sánchez, los tres consejeros socialistas en el Gobierno vasco —Iñaki Arriola (Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda), Alfredo Retortillo (Turismo, Comercio y Consumo) y María Jesús San José (Trabajo y Justicia)—, los tres secretarios territoriales —Mikel Torres (Bizkaia), Eneko Andueza (Gipuzkoa) y Cristina González (Álava)—; su número dos en el PSE, Miguel Ángel Morales, y dirigentes como Alfonso Gil, Txarli Prieto o Begoña Gil.

Mendia apuesta por una reforma del Estatuto vasco en esta legilslatura, porque "hacen falta nuevas herramientas que permitan gobernar mejor"

La secretaria general de los socialistas vascos aseguró que "Euskadi se merece tener un Estatuto reformado, renovado, del siglo XXI" en esta legislatura, porque "hacen falta nuevas herramientas que permitan gobernar mejor, de manera más ágil, y ver blindados los derechos conquistados en estos 38 años de historia de autogobierno", informa EFE. El PSE acordó con el PNV hace un año cómo abordar esa modificación estatutaria "desde la libertad de cada partido para sugerir los debates que cada cuál considere", alegó Mendia, que espera que se llegue a un acuerdo aunque no comparta la salida de consulta habilitante que plantean los nacionalistas, porque los socialistas no apoyan el derecho a decidir.

El PSOE exige al Gobierno que ponga sobre la mesa un sistema de financiación antes de fin de año

Tras la presentación de Idoia Mendia en Bilbao, Pedro Sánchez viajó hasta Valencia para la reunión de miembros de su ejecutiva federal y del secretariado del PSPV —el núcleo duro del líder socialista valenciano—, con el propósito expreso de prestar apoyo desde Ferraz a la reivindicación histórica del 'president' Ximo Puig de reformar con urgencia el modelo de financiación autonómica. Sánchez quiso que la cita tuviera lugar dos días después de la manifestación celebrada en Valencia con ese mismo fin. 

El secretario general del PSOE exigió al Gobierno de Mariano Rajoy que ponga sobre la mesa, antes del 31 de diciembre de este 2017, una propuesta de modificación del sistema de financiación, tal y como había prometido. Esa reclamación se plasmó por escrito en la resolución aprobada por las dos direcciones en Valencia [aquí en PDF]. 

El PSOE se abre a discutir y "abrir un proceso de negociación", al que también apremia, por su parte, el Ejecutivo del PP. Sánchez, que compareció al lado del líder del PSPV y 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, recordó que Rajoy debe "cumplir" los compromisos que adquirió en la Conferencia de Presidentes que tuvo lugar en el Senado en enero, compromisos que, lamentó, han sido "postergados", y es una cuestión de "justicia" que se ponga al día un nuevo modelo. 

El líder socialista comentó que está abierto a escuchar la propuesta del Gobierno en la comisión de modelo territorial constituida en el Congreso la semana pasada, pero sí advirtió de que si finalmente se activa la negociación, esta debe conducirse entre el Gobierno y el PSOE, "como ha ocurrido en otras ocasiones", "y no en la comisión parlamentaria", a la vez que los Ejecutivos autonómicos dialogan con Hacienda en su espacio específico, el Consejo de Política Fiscal y Financiera. Los socialistas se marcan dos objetivos: la igualdad y la garantía de suficiencia económica.

"El modelo debe garantizar el acceso universal a cada ciudadano a unos servicios públicos de calidad con independencia del territorio en el que viva", dice el texto, que añade que "es necesario aprender del pasado y establecer las salvaguardas adecuadas de modo que los derechos sociales adquiridos no se vean sujetos a los vaivenes de la coyuntura económica", por lo que la suficiencia financiera ha de ser "una de las características centrales del modelo de financiación futuro para todas y cada una de las comunidades autónomas".