La Junta estudia ya qué capitales andaluzas conectar por tren ante la falta de frecuencias

Hubo un tiempo en que la Junta quiso replicar el éxito de la A-92, la autovía que conecta Huelva con Almería, pero sobre las vías de un tren. Se llamó el Eje Ferroviario Transversal. La gran recesión de 2008 dio al traste con la idea, pero más de una década después, el Gobierno de Juanma Moreno retoma parte de ese espíritu en un momento en que el ferrocarril gana peso en medio de una crisis energética y de precios que aconseja dejar aparcado el vehículo privado. El Ejecutivo andaluz mostró sus intenciones en febrero, pero en la Consejería de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda ya están enfrascados en el estudio de viabilidad de una conexión novedosa entre varias capitales.

Se trata de una fórmula que imita las conexiones interurbanas de autobús o los catamaranes que ya funcionan en la bahía de Cádiz para unir la capital gaditana con Rota y El Puerto de Santa María. La apuesta del departamento que dirige Marifrán Carazo es la de la concesión, una vez que el Ministerio de Transportes dé luz verde a la solicitud que la Junta ya remitió hace meses.

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La propuesta andaluza es distinta a la de Cataluña, que gestiona directamente los trenes con sus Rodalies en las cercanías y media distancia. Tampoco es la fórmula tradicional, que pasa por pagar a Renfe para que aumente los servicios regionales. Esto se hace actualmente en Extremadura, y en Andalucía se aplicó entre 2003 y 2014 sin demasiado éxito. Esta fue la primera respuesta del Gobierno central a esta nueva solicitud de la Junta, que intentará aplicar su fórmula intermedia.

Los técnicos de la consejería que dirige Carazo están ya analizando las posibilidades. La política vallisoletana, aunque afincada en Granada, es una de las dos únicas componentes del nuevo Gobierno de Juanma Moreno que mantienen sus competencias en este segundo mandato, lo que facilita que los proyectos que están en marcha puedan agilizarse. A esto hay que añadir que el propio presidente de la Junta aludió a este plan de ampliar la frecuencia de trenes entre capitales en su discurso de investidura.

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El primer paso es decidir qué conexiones son más rentables para adelantar su puesta en marcha, aunque desde Fomento admiten que todavía no se pueden desvelar los plazos. Tampoco el coste que tendría la puesta en uso de las competencias en materia de transporte por ferrocarril que reconoce el Estatuto andaluz reformado en 2007.

El objetivo inicial de la Consejería de Fomento es aumentar en ocho frecuencias diarias la conexión Sevilla-Córdoba y Córdoba-Jaén, mientras que serían cuatro las frecuencias a sumar en Sevilla-Cádiz y Sevilla-Huelva. La ventaja de este plan es que no es necesaria la inversión en obra pública, ya que el planteamiento pasa por aprovechar los huecos que deja libre la actual circulación de trenes de Renfe para ampliar la oferta.

Hay que tener en cuenta que en un futuro próximo habrá que sumar otros operadores, puesto que al AVE de bajo coste, Avlo, habrá que sumar la francesa Ouigo a finales de 2023 y la alianza italoespañola Iryo, que espera empezar a funcionar en el último tramo del año. La duda es si estos mismos operadores, que entran en la alta velocidad gracias a una normativa europea, son los que la Junta quiere captar para su plan de ampliación de frecuencias.

"Andalucía está dispuesta a mejorar los servicios de ferrocarriles y acabar con el déficit y las carencias", dijo Carazo en el desayuno donde desveló el plan de la Junta. La intención del Ejecutivo andaluz es avanzar en la vertebración de la comunidad a través del tren, más sostenible, por lo que encaja en la actual situación de crisis energética.

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Los avances del plan del Gobierno andaluz coinciden con un momento de auge del transporte por ferrocarril, ya que el Ejecutivo central ha apostado por abaratar temporalmente su coste para fomentar el transporte público. Pero, al mismo tiempo, Andalucía acumula una serie de retrasos en proyectos clave como la conexión ferroviaria del puerto de Algeciras.

El Campo de Gibraltar viene sufriendo problemas en su conexión por tren desde hace años y ahora tiene que sumar un nuevo problema, ya que desde hace semanas Algeciras ha perdido la conexión directa con Madrid. Renfe facilita el transporte desde la ciudad gaditana, la décima más poblada de Andalucía, a Málaga, con la consiguiente queja de las autoridades locales.

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Este lunes, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, visitó Algeciras y pidió que no se ponga a competir el Campo de Gibraltar con Extremadura tras ser cuestionada por el trato que reciben uno y otro territorio en materia ferroviaria. Por otro lado, este martes, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, visita las obras del AVE entre Pulpí y Vera, en la conexión de la alta velocidad de Almería con Murcia y el resto de la red hasta la frontera francesa.

Es precisamente la zona oriental de la comunidad, que tiene una orografía más compleja para la instalación de vías de tren, la que ha sufrido más problemas de conexión. Granada pasó más de tres años y medio desconectada de la red ferroviaria, aunque ya funciona el servicio de alta velocidad hacia la capital nazarí, tanto con conexión con Madrid como con Sevilla.