Ayuso reivindica el legado de Aguirre en plena polémica por los audios de Villarejo

Llegó el día. La coronación de Isabel Díaz Ayuso como nueva presidenta del PP de Madrid cerrará definitivamente las heridas internas tras meses de guerra civil con la cúpula nacional. La celebración del cónclave y la operación orquestada desde Génova para frenar la trayectoria de la presidenta madrileña fueron letales para Pablo Casado y acabaron con una era en el partido. Ayuso se desliza ahora por una alfombra roja colocada por el nuevo líder nacional, Alberto Núñez Feijóo, y la práctica totalidad de los populares respaldará a la dirigente en los dos días que durará su entronización. Pero entre los asientos reservados destaca el de la expresidenta de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre. Y no porque no sea una habitual de este tipo de foros, sino porque será su primera aparición pública en plena polémica por los audios con el comisario Villarejo.

No es un asunto que quite el sueño a Ayuso, que reivindicará el legado de Aguirre, reservándole un lugar de honor en uno de los días más importantes de su carrera política desde que alcanzó la Puerta del Sol en 2019. La expresidenta regional ha vuelto al ojo del huracán mediático por la publicación de unos audios en el diario 'El País' que desvelan que, entre otras cuestiones, pidió ayuda a José Manuel Villarejo para que archivase la causa abierta contra ella por darse a la 'fuga' tras aparcar de forma indebida en la Gran Vía madrileña en marzo de 2014. Además, reconoció ante el comisario de Policía que varios miembros de su Gobierno en la Comunidad de Madrid eran corruptos.

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Como hizo Casado antes que él, Feijóo trata de desligar su mandato al frente del 'nuevo PP' de toda mancha de corrupción de anteriores etapas. Lo tiene más fácil que su predecesor, ya que puede alegar que, literalmente, hace solo unas semanas que aterrizó en Génova. Pero la fotografía con Aguirre, cuando la polémica de los audios con Villarejo sigue a la orden del día, puede provocar más de una mirada incómoda. El líder del PP no estará este viernes en Ifema, pero sí arropará a la próxima baronesa del PP regional el sábado, cuando clausurará el congreso del PP de Madrid. Esperanza Aguirre asistirá los dos días, según aseguran fuentes organizadoras del cónclave.

Hace días, además, que el Gobierno agita la corrupción del PP como vía para intentar debilitar a los populares cuando resta menos de un mes para que se abran las urnas en Andalucía. Esperanza Aguirre no ha sido la única exdirigente del PP señalada por los audios de Villarejo, en los que también aparece la ex secretaria general del partido María Dolores de Cospedal, que había coincidido recientemente con Feijóo en algún acto del líder nacional en la capital. En su caso, los audios revelan los esfuerzos para tapar el escándalo de la caja B que manejaba Luis Bárcenas. "Pese a los Villarejos y la destrucción de ordenadores, fueron condenados por la Audiencia Nacional", martilleó Pedro Sánchez el pasado miércoles, durante la última sesión de control.

Aguirre coincidirá con la nueva cúpula del PP en un momento en que el Gobierno agita la corrupción contra Feijóo

"Si se quieren traer a colación grabaciones de hace una década, cada uno está en su derecho", se limitó a valorar Feijóo hace unos días, deslizando que el asunto de la corrupción es cosa del pasado. "Es un tema muy antiguo", apuntó el actual número tres de Génova, Elías Bendodo, que sugirió que el pasado corrupto del PP "aparece y desaparece" por intereses políticos. Precisamente, el PP de Casado achacó a la reactivación de la caja B de Bárcenas sus pésimos resultados electorales en las últimas autonómicas catalanas, que motivaron el anuncio de la salida de la sede de Génova como vía para romper con el pasado.

Invitados de honor... sin Casado

Esperanza Aguirre fue la primera que confirmó su asistencia al cónclave popular, pero la presidenta de la Comunidad de Madrid envió también una invitación a Alberto Ruiz-Gallardón y a Cristina Cifuentes. Tal y como ha podido confirmar este medio, el exalcalde de Madrid ha declinado asistir tras años alejado de la política. Ayuso no renuncia al carácter nacional de su liderazgo, y tuvo la cortesía de invitar a su puesta de largo a los dos expresidentes del Gobierno. No obstante, Mariano Rajoy no asistirá por "motivos de agenda", según fuentes organizadoras, que no confirman si José María Aznar asistirá a Ifema en algún momento de los dos días de congreso.

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Con quien no ha tenido esa deferencia es con Pablo Casado. El expresidente del PP rompió definitivamente toda relación con Isabel Díaz Ayuso tras la crisis que acabó con su carrera política. De hecho, la madrileña no le incluye en el vídeo promocional del congreso regional, en el que aparecen todos los 'pesos pesados' del PP nacional y regional del pasado y presente... pero no Casado. La última aparición pública del exdirigente fue en el congreso nacional de Sevilla que coronó a Feijóo, en el que pronunció su discurso de despedida.

Ayuso sí contará con el respaldo de la nueva dirección nacional del PP. Alberto Núñez Feijóo la acompañará el sábado, antes de poner rumbo a Galicia para asistir a su propia sucesión por Alfonso Rueda. Miembros de la cúpula de Génova, como Cuca Gamarra o Pedro Rollán, tendrán un papel destacado. Este último, de hecho, será el moderador de una mesa de presidentes autonómicos, que también arroparán a Ayuso en su día grande. Martínez-Almeida tendrá oportunidad de resarcirse con un espacio reservado para su discurso. Ayuso 'indultó' al alcalde pese a su implicación, directa o indirecta, en el intento de espionaje de Génova, y aspira a deshacerse definitivamente del desgaste antes de las próximas municipales, en las que repetirá como candidato.

Nueva ejecutiva

Ayuso cierra los últimos flecos de la nueva ejecutiva del PP de Madrid, cuyos nombres dará a conocer este sábado, tras su proclamación como presidenta. El órgano ha estado presidido desde 2018 por una gestora liderada por Pío García Escudero y Ana Camins, de los que se da por descontado que no repetirán en los puestos de mando del PP de Madrid. Ayuso ratificó ayer un secreto a voces desde hace semanas: que su mano derecha en la Asamblea, Alfonso Serrano, ocuparía el puesto de número dos en la nueva dirección.

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El equipo de la presidenta podría prescindir de Serrano al frente de la portavocía en la Cámara regional —o diluir su presencia impulsando a otra figura de refuerzo— para que pueda dedicarse a tiempo completo a sus funciones como secretario general del PP de Madrid. "No está decidido", aseguran. Para encarar la nueva etapa, la dirigente se ha marcado como máxima evitar duplicidades entre "partido" y "gestión" de gobierno, que sí existían en la anterior etapa. Por ese motivo, tal y como publicó El Confidencial, Ayuso ha decidido dejar fuera a sus consejeros de la ejecutiva del PP de Madrid. Hasta la fecha, tenían asiento en el órgano David Pérez, consejero de Transporte, y Carlos Izquierdo, responsable de Administración Local y Digitalización.

Ayuso ha garantizado a Almeida un espacio reservado en su equipo para terminar de engrasar su relación tras la guerra que partió en dos el partido, y en la que Almeida jugaba como número tres de la anterior cúpula de Génova. Según ha podido saber este medio, la dirigente mantendrá en la ejecutiva a dos 'pesos pesados' del regidor en el Ayuntamiento de Madrid: la portavoz del Gobierno, Inmaculada Sanz, y el delegado de Medio Ambiente, Borja Carabante, ambos de la máxima confianza del regidor.