Gómez llega a Industria con España a la cola del coche eléctrico en la UE y el veto al diésel en 2035

El nuevo ministro de Industria, Héctor Gómez, que tomará posesión de su cargo este mismo martes, llega al puesto ocupado desde 2018 por Reyes Maroto con España en el vagón de cola del coche eléctrico dentro de Europa, tal y como se ha encargado de destacar Eurostat este mismo lunes. Una circunstancia que se vuelve, si cabe, más importante después de que la Unión Europea haya certificado también este lunes el veto a los coches de combustión a partir de 2035.

Según los datos revelados por la oficina estadística de Bruselas, España fue —junto con la República Checa— el país donde menos creció el número de pasajeros de vehículos eléctricos entre 2020 y 2021. Tan solo se avanzó un 15%, lo que es un crecimiento cinco veces inferior al 76% que aumentaron los pasajeros de eléctricos de media en el resto de la Unión Europea.

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La situación de España con respecto al resto de países europeos tampoco ha mejorado en 2022, tal y como revela un reciente estudio de Anfac con datos de la propia Eurostat, el INE, IDEA y ACEA. El pasado año, España también se situó en el vagón de cola del coche eléctrico.

"Finalizando 2022, se distinguen dos Europas muy diferentes en términos de electromovilidad. España, junto con otros países como Italia, Hungría y República Checa, se agrupa a la cola de Europa. Por el contrario, Noruega, Países Bajos y Alemania continúan liderando el avance hacia la electrificación", señala la patronal de fabricantes.

"Destaca la positiva evolución de Portugal, que mediante medidas enfocadas en favorecer el desarrollo de la electromovilidad en el país ha conseguido intensificar el ritmo de forma muy notable hasta acercarse a la media europea y colocarse entre el grupo de países más electrificados", añade Anfac.

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España es el país donde la penetración del vehículo electrificado es más escasa, junto con Hungría y República Checa. Si se compara respecto al universo de vehículos electrificados, en España es donde menor porcentaje de eléctricos puros circulan

Algo similar ocurre con los cargadores de la batería de estos vehículos eléctricos, fundamentales para su desarrollo. "La media europea mejora en 6,7 puntos en este último año, lo que sigue amplificando la distancia española (7,3) a la media europea (19,7) en términos de infraestructura de recarga". La propia industria se queja recurrentemente de la tardanza en España de poner en marcha un punto de recarga para coches eléctricos, lo que limita la implantación de estos automóviles.

"Los resultados obtenidos en el cierre del barómetro de electromovilidad para 2022 vuelven a poner en relevancia el lento desarrollo de la electrificación en España", concluye Anfac, que duda de que con el ritmo actual se pueda cumplir con los objetivos marcados en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima.

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España se puso la meta de llegar a cinco millones de coches eléctricos en 2030, cuando el año pasado no se había alcanzado ni el 3% de esa cifra. Pese al plan Moves de ayudas a la compra, el elevado precio y la crisis de componentes se han convertido en obstáculos para alcanzar esas cifras.

La falta de madurez en el mercado de coches eléctricos se suma a otro de los grandes retos que tendrá por delante el nuevo ministro de Industria, como es la segunda convocatoria de fondos europeos para el Perte del Vehículo Eléctrico y Conectado. Ante el fracaso de la primera ronda, que solo fue capaz de asignar alrededor de 800 millones del total de casi 3.000 que había disponibles, ahora este será uno de los retos más destacados del nuevo ministro para lo que resta de legislatura, hasta las elecciones de finales de este 2023.

Volkswagen fue el gran beneficiario del primer desembolso del Perte VEC y se espera que otras grandes automovilísticas en España como Stellantis, Ford o Renault obtengan fondos de estas subvenciones para tratar de que el mercado del coche eléctrico se desarrolle en España y alcance niveles similares a los del resto de Europa.