Las ventas de El Corte Inglés se estancan pese a la campaña de descuentos
La facturación de la cadena de grandes almacenes, que se juega el año fiscal en las rebajas de enero, se sitúa en 10.263 millones pese al crecimiento del 2,4% de la economía
El Corte Inglés empieza a notar el miedo de los consumidores a un nuevo resfriado económico. Según las cifras provisionales de los 10 primeros meses del ejercicio, las ventas del grupo de grandes almacenes se han estancado, pese al crecimiento del 2,4% interanual del producto interior bruto (PIB) y de la subida del 1,2% de la inflación. Un comportamiento por debajo de lo presupuestado por parte de la compañía presidida por Jesús Nuño de la Rosa, que ha lanzado grandes campañas de descuentos para incentivar las compras a cambio de sacrificar los márgenes.
Según datos internos, la facturación de El Corte Inglés entre el 1 de marzo y el 31 de diciembre se situó en 10.262,23 millones de euros, una cifra ligeramente inferior a la registrada en el mismo periodo de 2017. Hogar y electrodomésticos han sido los departamentos con mejores resultados, con incrementos de más de dos dígitos. No obstante, no pudieron compensar la caída del área de alimentación, la segunda rúbrica más importante de la cuenta de resultados —1.974 millones—, y la cifra casi plana de moda (2.621 millones).
Este dato se corresponde con las ventas en los centros comerciales y en las tiendas físicas, pero no las obtenidas a través de internet, cantidades que, en todo caso, no son muy representativas todavía en la cuenta de resultados del grupo de distribución.
En diciembre, El Corte Inglés registró una cifra de negocio de 1.687,49 millones de euros, un 0,58% menos que en el último mes de 2017. Las ventas llegaron a caer hasta un 3% hacia mediados del mes, pero la dirección comercial puso en marcha varias campañas agresivas con ofertas por las que los clientes recibían hasta el 15% del importe de las compras —especialmente en los departamentos de juguetes y moda— para futuras adquisiciones. Es decir, fuertes descuentos en un periodo de tiempo que suele ser de los más óptimos para la demanda.
Fuentes internas de El Corte Inglés argumentan que este comportamiento tan poco usual del consumo es consecuencia del Black Friday, el día de mayor venta del grupo en todo el año. Según explican, el público suele aprovechar las fuertes rebajas de ese fin de semana copiado de Estados Unidos para anticipar las compras navideñas, por lo que las ventas de diciembre se resienten, especialmente en las dos primeras semanas.
El problema para El Corte Inglés y el resto de empresas ‘retail’ es que la facturación del Black Friday va acompañada de unos descuentos muy drásticos que erosionan el margen de las ventas, reducción que el grupo controlado por las hermanas Álvarez Guil ha intentado compensar con una nueva política de compras con los proveedores y un plan de ajuste de costes.
Hasta la fecha, en los 10 primeros meses del ejercicio fiscal, que El Corte Inglés inicia el 1 de marzo, la compañía ha tenido momentos muy dispares. El primer semestre, periodo en el que la facturación —incluidos el negocio de seguros, informática y el de otras filiales— creció apenas un 0,4%, el incremento más bajo en cuatro años, hasta los 7.585 millones. La climatología condicionó las ventas ‘retail’, que cayeron un 0,6%, hasta los 6.017 millones. Pero la llegada del frío y las precipitaciones permitieron un repunte en septiembre y un gran dato de octubre, lo que ha facilitado que lo que la empresa llama la campaña otoño/invierno —del 1 de septiembre al 28 de febrero— refleje una mejoría del 1,7%.
En conjunto, las ventas han bajado un 0,01%, comportamiento que El Corte Inglés confía en remontar en los dos últimos meses de su ejercicio fiscal. Las cifras de la primera semana de enero, hasta el día de Reyes, los cinco días más intensos en los centros comerciales, mejoraron un 0,39%, hasta los 464,34 millones. Las áreas que mejor comportamiento han tenido han sido moda, con una subida del 4,57%, hasta los 108,40 millones, y alimentación (44 millones), con un alza de casi el 10%. Por el contrario, las de entretenimiento bajaron un 3,70%, hasta los 119,95 millones, y las de complementos se contrajeron un 0,51%, hasta los 111,8 millones.
El Corte Inglés empieza a notar el miedo de los consumidores a un nuevo resfriado económico. Según las cifras provisionales de los 10 primeros meses del ejercicio, las ventas del grupo de grandes almacenes se han estancado, pese al crecimiento del 2,4% interanual del producto interior bruto (PIB) y de la subida del 1,2% de la inflación. Un comportamiento por debajo de lo presupuestado por parte de la compañía presidida por Jesús Nuño de la Rosa, que ha lanzado grandes campañas de descuentos para incentivar las compras a cambio de sacrificar los márgenes.