Las malas artes de Rocha para librarse de Gomar y la presión Carlos Herrera para tener un debate

"Lo tengo claro, me presentaré a las elecciones a la presidencia de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF)", aseguró en noviembre del año pasado Salvador Gomar. Cierto es que el presidente de la Federación de Fútbol de la Comunidad Valenciana (FFCV) no se refería a las elecciones que, con más de seis meses de retraso, la Comisión Gestora de la RFEF que preside Pedro Rocha convocará, incluso este mismo miércoles, "para la finalización de la legislatura 2020-2024". Antes, en la mañana de este miércoles, la UCO entraba en la RFEF en una investigación contra los supuestos contratos irregulares de los últimos cinco años.

Es decir, unos comicios para sustituir al inhabilitado y dimitido Luis Rubiales que, según el informe de Tomás González Cueto, asesor jurídico de la RFEF, no eran necesarios porque "no sería ejemplo de buena gestión, ni de democracia real". Si bien, tanto el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) como la Comisión Directiva del Consejo Superior de Deportes (CSD), han confirmado que deben celebrarse, de manera que, como pretendían Rocha y Cueto o Cueto y Rocha, las cuatrienales se irán a finales de año.

Además, unas elecciones a la presidencia con el nuevo Reglamento Electoral de la RFEF, pero con la Asamblea actual, en la que ocho futbolistas profesionales, ocho entrenadores, 12 jugadores no profesionales, tres árbitros, tres miembros del fútbol sala y siete clubes no profesionales, es decir, un total de 37 personas físicas o jurídicas, han perdido su condición de asambleístas. De ahí que, tal y como adelantamos en este diario, la convocatoria vaya a ser impugnada ante el TAD por Miguel Galán, entrenador nacional y presidente de CENAFE

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Como es sabido, Pedro Rocha lleva más de seis meses 'okupando' un cargo que no le corresponde, sin atreverse a desvelar su aspiración a sustituir a Rubiales, pero haciendo campaña para asegurarse los votos necesarios. No ha sido hasta el pasado lunes cuando el testaferro del inhabilitado presidente de la RFEF dio el primer paso al dimitir como presidente de la Federación Extremeña de Fútbol (FEF), puesto que ostentaba desde 2013, y condición sine qua non para poder ser candidato. De momento, su único rival es Carlos Herrera, quien, además de buscar los avales necesarios para presentarse, le va a seguir apretando con mantener un cara a cara.

El único barón que se ha rebelado

Y es que, de los llamados barones, el mencionado Gomar es el único que se ha rebelado contra lo que está haciendo Pedro Rocha. Junto al madrileño Paco Díez, ya en septiembre levantó la voz y se mostró a favor de convocar elecciones. Más que nada porque, aunque Cueto cometiera una flagrante mala praxis, asi lo dictan los estatutos de la RFEF. Pero, que nadie se engañe, el valenciano no está contra Rocha por principios, sino porque su aspiración es la misma que la del extremeño.

Aunque el elegido por Rubiales para ponerse al frente de la RFEF fuera su versión con piel de cordero, quizá porque, como dijo un barón de la época de Villar, "es el que menos muertos tiene en el armario", Gomar no solo es considerado el Rubiales valenciano, sino que sigue manteniendo una estrecha relación con él. De hecho, en la ciudad del Turia aseguran haberles visto juntos recientemente, algo impensable que suceda con Rocha, quien considera que le ha traicionado.

En la Ciudad del Fútbol de Las Rozas tienen cosas del valenciano para 'convencerle' de que desista de rivalizar con el candidato oficialista

Según ha podido saber este diario de fuentes bien informadas, desde la Ciudad del Fútbol de Las Rozas enviaron un emisario, hombre de máxima confianza de la cúpula actual y conocedor del terreno, para convencer a Salvador Gomar de que desistiera de su intención de presentarse a las elecciones a la RFEF. Al menos de las primeras que se van a celebrar, para de este modo no rivalizar con Rocha. Ya se sabe, aquello de que entre bomberos, no nos pisemos la manguera. Así, al valenciano se le hizo saber que en Madrid, de donde llega el 55% del presupuesto de la FFCV, tienen cierta información que podría comprometerle.

Por ejemplo, sobre algo que aquí ya fue denunciado, como es que el cobro indebido durante junio de 2022 del salario correspondiente a los días que cesó en su cargo de presidente de su territorial, hasta su reelección como tal, además de mantenerse dado de alta en la Seguridad Social y continuar haciendo uso de la tarjeta de la FFCV. Gomar reconoció dicho pago indebido, aunque se justificó diciendo que había devuelto mediante transferencia, con fecha 1 de diciembre de 2022 y a favor de la FFCV, 1.646, 61 euros, una cantidad que para nada se corresponde con un sueldo anual de 152.000 euros.

La reprochan lo que ha hecho Rocha

El emisario también le hizo saber a Gomar que en Las Rozas tienen conocimiento de un delicado asunto interno de su federación que tarde o temprano puede ver la luz, además de reprocharle que se haya costeado sus visitas al resto de territoriales con dinero de la FFCV. Es decir, exactamente lo que lleva haciendo Rocha como presidente de la Comisión Gestora de la RFEF desde hace seis meses, en muchas ocasiones con la excusa de la candidatura para el Mundial 2030 y otra serie de actos en los que resultó evidente que aprovechó para hacer campaña. Además, claro está, de cobrar el suculento sueldo de Rubiales, con aumento incluido.

El presidente de la Comisión Gestora lleva seis meses haciendo campaña con recursos de la RFEF, además de cobrando el sueldo de Rubiales

Volviendo a Gomar, a quien desde Madrid también han insinuado que le pueden hacer caer de la presidencia de su territorial, está publicado que un grupo de exdirectivos de la FFCV, encabezados por el ex tesorero, Enrique Ortolá, ya le denunció ante la Fiscalía Especial Anticorrupción de Valencia por la presunta comisión de los delitos de malversación, prevaricación y apropiación indebida. En una denuncia calificada por Gomar como "vendetta cutre", se le acusó de "haber percibido, durante los ejercicios económicos 2019, 2020 y 2021, sueldos superiores a los acordados en asamblea general".

Como indica la página web de la propia territorial valenciana, "el presidente de la FFCV es profesional. Su sueldo, aprobado por la asamblea general, es de 152.942,22 euros". Sin embargo, Ortolá tiene una prueba documental de un testigo que niega que este sueldo fuera aprobado por la asamblea. Por si esto fuera poco, en julio de 2019, coincidiendo con la boda de Gomar en Valencia, a la que asistió Rubiales, desde la administración de la FFCV se envió un e-mail a la comisión económica para dar el visto bueno y autorizar el abono de 70.000 euros para el presidente.

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Aun siendo cierto que, según decretó la fiscal, los hechos denunciados por Enrique Ortolá no son constitutivos de ilícito penal, por lo que las diligencias fueron archivadas y son irrecurribles, que las presuntas irregularidades cometidas por el Rubiales valenciano no hayan sido tipificadas como delito no quiere decir que no sean vergonzosas e impropias de alguien que preside una territorial y aspira a presidir la RFEF.

Por más que Gomar diga —y quizás hasta se lo crea— que Rubiales no le destituyó de su cargo de vicepresidente, sino que fue él quien dimitió, lo cierto es que su candidatura representaría el continuismo tanto como la de Rocha. De ahí que solo podía quedar uno para enfrentarse a Carlos Herrera, a la espera, claro está, de que pueda lograr los 21 avales necesarios, además de que el extremeño acepte un cara a cara con él.