El problema de Mbappé: por qué no tiene la sartén por el mango si escoge el Real Madrid

Por extraño que parezca, al Real Madrid y al Paris Saint-Germain les une la misma inquietud. Están a la espera de conocer cuál es la decisión de Kylian Mbappé en 2024 y, cuanto antes la conozcan, más margen de maniobra tendrán para planificar sus proyectos. Florentino Pérez y Nasser Al Khelaïfi han agotado sus estrategias negociadoras y de seducción con la familia Mbappé. Entre los clubes no hay comunicación ni puentes con los que llegar a un entendimiento ni a una solución que beneficie a las tres partes.

Mbappé consigue salirse con la suya. Es libre de negociar con cualquier club en enero, de elegir dónde y cómo quiere enfocar su carrera. Pero no tiene la sartén por el mango si escoge el Real Madrid. Ha cambiado el escenario del Real Madrid de agosto a diciembre. Florentino también se ha salido con la suya con el fichaje de Bellingham y la ilusión que genera la llegada de Endrick a partir de junio de 2024.

El presidente del Real Madrid tiene abierta la puerta al fichaje de Mbappé si se pone a tiro. Ha decidido que no lo hará a cualquier precio. A Mbappé le toca adaptarse a las condiciones económicas del Real Madrid si da el paso de cambiar París por Madrid.

El plan del Real Madrid con Mbappé pasa por respetar sus derechos de imagen como gesto hacia un jugador cuidadoso con asociar sus valores a las marcas comerciales. Ha tenido conflictos con la federación de su país por este asunto. Mbappé factura cerca de 20 millones de euros al año con sus diferentes acuerdos comerciales y el Real Madrid está dispuesto a renunciar al reparto de esta tarta a cambio de un salario inferior a los casi 50 millones de euros netos al año que le paga el PSG.

Los derechos de imagen son claves en la negociación entre el Real Madrid y Mbappé. Si Florentino cede en este apartado, muy importante en la estrategia comercial del club, con una estrella que podría reportar mucho dinero, el francés tiene que corresponder. No hay nada más que negociar entre el Real Madrid y Mbappé.

Queda que el jugador tome la decisión y esté convencido de que en el Real Madrid se le presentan nuevas oportunidades para dar un salto todavía más grande en su carrera.

Razones para la decisión

Hay que recordar el semblante serio y hasta celoso que mostró en la gala del Balón de Oro cuando vio a Messi como el ganador del trofeo y a Haaland como segundo y campeón de la Champions. Él quedó tercero en el podio y le entraron más dudas sobre su futuro. Con Vinícius sexto, por detrás de De Bruyne y Rodri. La cara de Mbappé era de funeral.

Hay razones económicas por las que Mbappé tiene que pensar y valorar dónde está su sitio, pero también las hay deportivas (títulos y prestigio) y de orgullo (ganar el Balón de Oro). En la balanza tiene que poner si a sus 25 años es el momento de un cambio en su vida y profesión y de renunciar a la lluvia de millones con los que le baña el PSG.

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Con Luis Enrique ha empezado un nuevo proyecto y, en el poco tiempo que llevan juntos, han chocado las dos personalidades. De Luis Enrique le decepcionó que no diera la cara por él en verano cuando fue castigado y apartado por el club de la gira asiática. No ocultó su disgusto con la gestión del tramo final del partido contra el Borussia de Dortmund, con un plan conservador para asegurar el empate y el segundo puesto del grupo en la Champions.

El desgaste de Mbappé en el PSG es evidente desde el mes de junio, en el momento en que decidió que no activaba la cláusula de renovación hasta 2025. Ha probado de todo. Jugar con Messi y Neymar y no funcionar como un equipo. Hay una nueva estrella en el PSG, a ojos del club, que se llama Luis Enrique y que tiene plenos poderes para hacer un equipo de autor e imponer disciplina. El asturiano también le genera dudas al francés.

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La problemática de Mbappé es compleja por la edad en la que se encuentra, el contrato millonario que tiene en el PSG y el hecho de acertar con un proyecto deportivo que tenga éxito. Esto último no se lo puede garantizar nadie, pero la realidad sigue diciendo que al Real Madrid le va bien sin Mbappé. Líder en el campeonato español y clasificado para los octavos de final de la Champions con pleno de seis victorias.

Un Real Madrid con Mbappé sería mucho más fuerte. Un Real Madrid sin él y con una racha de lesiones importante no se ha debilitado. Lo que queda por delante en la temporada son los meses decisivos, pero Florentino no se va a volver loco con el fichaje del francés y los socios y aficionados están hartos de vivir un culebrón repetitivo y sumamente largo. ¿Con qué nos sorprenderá Mbappé? Ni en el Real Madrid ni en el PSG son capaces de descifrarlo.