"Cobran tanto que hay árbitros que pasan por lo que sea con tal de quedar bien ante sus jefes"

Los errores arbitrales y las polémicas que generan forman parte del fútbol. Del mismo modo que un portero puede tragarse un gol y un delantero fallarlo a puerta vacía, los árbitros también pueden equivocarse, en ocasiones de manera flagrante. Para evitar los llamados errores de apreciación que cometen los colegiados, se introdujo el videoarbitraje, conocido popularmente como VAR, aunque este no solo no ha solucionado, sino que incluso ha incrementado estos y otro tipo de errores que son tan o más decisivos como son los de interpretación.

En España, la nueva temporada ha empezado con la misma dinámica que terminó la pasada. Es decir, con protagonismo para los árbitros, no solo por decisiones más o menos discutibles, sino, sobre todo, por la disparidad de criterios a la hora de pitar o no un penalti o aplicar los tiempos de prolongación. Unas decisiones que descolocan e indignan a futbolistas, técnicos, directivos, periodistas y aficionados, de manera que se da la paradoja de que el colectivo arbitral mejor pagado de Europa cada vez ofrece menos confianza.

Opinión

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Kike Marín

En la Premier League, el árbitro Simon Hooper, el de VAR Michael Salisbury y su asistente en la sala VOR Richard West no volverán a pitar durante un tiempo tras no señalar un penalti cometido por el guardameta del Manchester United, André Onana, en el tiempo de prolongación del partido contra el Wolverhampton y que podría haber supuesto el empate. Jon Moss, jefe de los árbitros de la Premier, pidió perdón al técnico afectado, Gary O'Neil, quien dijo entender la presión del colegiado en un campo como Old Trafford, pero no que el VAR no le avisara para que al menos revisara la jugada.

"Al principio pensé que el árbitro venía a ver la pantalla, pero desafortunadamente me amonestó a mí y no a Onana, que casi arranca la cabeza a nuestro delantero centro", comentó O'Neil para añadir que "agradezco que Moss haya venido a disculparse y admitido que era el penalti claro y que no se podía creer que el árbitro no lo viera y que el VAR tampoco". Aunque no sirva de consuelo, que el colectivo arbitral inglés reconozca y castigue los errores es una prueba de que ellos son los primeros que quieren mejorar y no influir en los resultados, como pudo suceder en este caso.

Un organismo arbitral independiente

A diferencia de lo que sucede en LaLiga, donde los árbitros dependen única y exclusivamente de la Federación Española de Fútbol (RFEF) a través del Comité Técnico de Árbitros (CTA) que preside Medina Cantalejo, en Inglaterra el arbitraje lo dirige desde 2001 el Professional Game Match Officials Limited (PGMOL), un organismo independiente financiado por la propia Premier, además de la English Football League (EFL), que engloba a Championship, League One y League Two, y la Federación Inglesa de Fútbol (FA). Este modelo ha sido propuesto en España por LaLiga, aunque sin éxito.

La PGMOL nació con las máximas de ser transparente y autocrítica, de ahí que un árbitro sénior revise los partidos, se admitan los errores y estos tengan consecuencias para quienes los cometen. Como dijo el técnico del Wolves, "no creo que los árbitros intenten favorecer a un bando, creo que solo es naturaleza humana. Si hay que tomar una decisión y no está seguro, siente la presión del público de Old Trafford y el hecho de que sea el Manchester United". "Por eso pienso que el VAR debería ayudar más en estas situaciones", sentenció O'Neil para poner el dedo en la llaga.

En Francia, La Ligue1 ha hecho público el audio de la conversación del colegiado Clement Turpin con la sala de videoarbitraje y los jugadores después de señalar un penalti en el Nantes-Angers de la última jornada de la pasada temporada. "Te invito a que vengas a ver las imágenes porque el contacto es muy ligero", se escucha que le dicen desde la sala VOR, mientras un jugador del Angers también le pide al árbitro que vaya a ver la acción. Tras revisarlo, el árbitro anuló el penalti. En una encuesta realizada por LaLiga, los clubes españoles se mostraron a favor de este tipo de iniciativas, aunque en el CTA no las debieron de ver oportunas.

El análisis de un experto en la materia

"Hemos comenzado la temporada con la aplicación de los iluminados inventos del CTA para justificar sus jugosos emolumentos", denuncia José Luis Díez, expresidente de la Federación Navarra de Fútbol (FNF) y exdirectivo de la propia RFEF, donde formó parte del mencionado CTA, de ahí que sepa muy bien de lo que habla. "Descuento de un minuto por gol, nuevo criterio para las manos e intensidad de acciones o empujones en las áreas y menos intervención del VAR", enumera el también entrenador navarro, para a continuación comentar cada uno de estos inventos.

"Supongo que lo del descuento solo será para la liga profesional, pues no me imagino un partido de categoría territorial en el que pueda ampliar 20 minutos, sobre todo en pleno invierno, cuando muchos encuentros de la tarde casi se acaban de jugar sin luz solar", comenta Díez, para acabar preguntándose: "¿Y el tiempo que se pierde en lanzamiento de penalti o en una protesta o tángana?". Efectivamente, todo queda a criterio del árbitro, para añadir más o menos minutos y alargar o acortar los partidos aparentemente a su antojo.

"Con el tema de las manos ya no sé qué pensar. Se ha perdido el concepto del juego, el espíritu de su Reglamento y la regla XVIII", dice Díez

"En cuanto a las manos, sinceramente ya no sé qué pensar. Se ha perdido el concepto del juego, el espíritu de su Reglamento y la regla XVIII, no escrita, pero que todos conocemos como el sentido común. Es decir, la aplicación con un buen equilibrio e inteligencia de las 17 reglas anteriores. Además, la autoridad del árbitro principal a veces brilla por su ausencia", asegura el expresidente de la Federación navarra. "Y, respecto a la intensidad, habrá que inventar algún dinamómetro o similar para cada jugador y medir cuál es la fuerza de su acción...", sentencia irónicamente.

Por último, sobre la intervención del VAR, José Luis explica que "desde el principio yo he sido contrario a cómo se utiliza el videoarbitraje. Mantengo que sirve para aclarar una duda al árbitro y su equipo, ayudarles en su labor, pero con el objetivo de seguir mejor el juego y poder olvidarse así de los banquillos y los entrenadores". Precisamente esto último no sucedió en el reciente Getafe-FC Barcelona, de ahí que Díez no dude en decir que "le doy la razón a Xavi en sus opiniones".

"El VAR sirve para aclarar una duda al árbitro y su equipo, ayudarles con el objetivo de seguir mejor el juego y olvidarse de los banquillos"

"Menos mal que todo esto solo se aplica en un 10% del fútbol, aproximadamente, y el resto sigue con el auténtico espíritu del Reglamento y criterio arbitral", sigue analizando el que fuera directivo de la RFEF. "Aunque esto crea inseguridad y falta de credibilidad a los árbitros no profesionales en sus escenarios tan próximos a la afición y directivas, sin apenas protección". "Hemos creado un grupo corporativo tan excesivamente retribuido para árbitros y exárbitros que algunos pasan por lo que sea con tal de quedar bien ante sus jefes y su índice corruptor, perdón, corrector...", sentencia sin morderse la lengua.

"O damos un giro o este continuo cambio de normas, apreciaciones y decisiones del VAR puede llevarnos a una situación caótica"

"O damos un giro a este sistema y estructura arbitral o este continuo cambio de normas, apreciaciones y decisiones del VAR puede llevarnos a una situación caótica", concluye José Luis Díez con la claridad que tanta falta hace cuando de verdad quiere mejorarse algo, con la transparencia y la autocrítica que al menos la Premier ha demostrado y que tanta falta haría en el fútbol español.