Verstappen espera "algunas sorpresas": Sainz y Alonso pueden formar parte de ellas

Una sesión de entrenamientos libres por el precio de dos. Así debieron pensar los aficionados presentes en el Gilles Villeneuve cuando la primera jornada del Gran Premio de Canadá tuvo que comprimirse ante el extraño incidente que interrumpió prematuramente la primera tanda. Al final, la segunda duró hora y media de tiempo para compensar. Afortunadamente, la esperada lluvia llegó a cinco minutos para terminar la jornada y regaló un tiempo en pista seca que los equipos no esperaban inicialmente a tenor de los pronósticos.

Aunque no todos pudieron llevar a cabo el trabajo completo, Aston Martin, por ejemplo, tan solo un segundo separó a los catorce primeros monoplazas, con cinco equipos diferentes en medio segundo. Quizás Max Verstappen no lo vaya a tener tan fácil en esta ocasión, a tenor de su inicio y de la posibilidad de lluvia en los clasificatorios. "Creo que todavía tenemos un poco de trabajo por hacer, el coche no es fantástico con los baches, sobre los pianos. No es que esté mal, pero necesitamos afinar algunas cosas", se lamentaba el neerlandés, que espera "algunas sorpresas" en los clasificatorios si finalmente llueve, como parece probable.

Carlos Sainz y Fernando Alonso terminaron en tercera y cuarta posición, con los dos Mercedes de Hamilton y Russell con un sorprendente doblete inicial. Aunque a juzgar por ambos pilotos, no las tienen todas consigo en asfalto seco.

Sainz, muy suelto con el SF23

Los primeros libres recibieron bandera roja a los pocos minutos de iniciada la sesión, cuando el Alpine de Pierre Gasly se paró en los minutos iniciales. Sin embargo, cuando ondeó nuevamente bandera verde, la sesión tuvo que ser suspendida por los problemas con las cámaras del sistema interno del circuito, lo que por razones de seguridad demoró la reanudación hasta que ya no pudo retomarse. De aquí que se anticipara en media hora el comienzo de la segunda sesión de libres, que al final duraría hora y media.

Los equipos tuvieron que trabajar a marchas forzadas para intentar completar su programa en tan comprimido margen. Ferrari fue el equipo más activo en los primeros compases y Sainz y Leclerc fueron particularmente activos durante la primera media hora, alternándose en lo alto de la tabla en un particular toma y daca rojo. El madrileño se mostraba particularmente cómodo desde los primeros giros, y terminó dos décimas por delante del monegasco, que no pudo completar su segundo intento con los blandos por la bandera roja provocada por el Alpine de Esteban Ocon. La cancelación de la primera sesión permitió que los juegos blandos pasaran a la segunda y hubo dos oportunidades para la simulación clasificatoria.

El equipo italiano pudo incluso utilizar los tres compuestos de neumáticos mientras las nubes se acercaban al Gilles Villeneuve, que descargaron más tarde de lo esperado. El equipo italiano pudo rodar con depósitos cargados con los compuestos medios y duros. El SF23 parece nuevamente rápido a una vuelta en seco, aunque sin conocer el nivel comparativo de sus mapas de motor en lo que se refiere a sus rivales, particularmente Red Bull.

"Al final, la segunda sesión estuvo muy ocupada, pero al menos pudimos probar los tres compuestos para seco, así como varias configuraciones en el coche para mejorar el rendimiento", explicaba Sainz al terminar, "logramos un buen progreso en el transcurso del día. El resultado es bastante positivo, incluso aun teniendo que encontrar algo de ritmo y rendimiento para mañana". Vamos, lo habitual de un viernes.

"No tuvimos mucho tiempo"

Fernando Alonso y Aston Martin no tuvieron una sesión tan fluida. Aston Martin buscaba recoger información de su nuevo paquete aerodinámico, la evolución de mayor hasta el momento en 2023, en especial el nuevo fondo plano. En la primera parte de la tanda, el español paró en boxes varias veces para perfilar la puesta a punto del AMR23. Primero, con el esquema de refrigeración de los frenos, particularmente exigidos en el trazado canadiense. Alonso también se quejaba de un coche nervioso en los primeros compases, por lo que se fueron modificando las alturas y ablandando las suspensiones. Al final, el español se mostraba mucho más cómodo, aunque el equipo no pudo completar el programa previsto para la jornada, y parece que llegará a la carrera con algunas incógnitas por resolver.

"No tuvimos mucho tiempo para comprender completamente las nuevas actualizaciones, por lo que tendremos que analizar todo durante la noche y aprender más mañana. Estaremos atentos al radar meteorológico nuevamente, ya que podría ser otro día mixto", explicaba Alonso al terminar. "Cuando introduces nuevas actualizaciones, se trata de aprender sus efectos en el equilibrio del coche y garantizar que estén funcionando de la manera esperada", añadía Lance Stroll. "Estaba contento con el coche, parece que se sentía bien, pero nos tomaremos tiempo para revisar los datos esta noche y asegurarnos de que estamos listos para la clasificación de mañana".

Los dos pilotos de Mercedes, en primera y segunda posición, relativizaron su posición en la tabla de tiempos. El circuito Gilles Villeneuve mantiene su trazado especialmente bacheado y, para Russell, de no haber sido por la evolución introducida en Barcelona, el gran premio canadiense habría sido otra historia. "No creo que podamos leer demasiado en los tiempos, obviamente hicimos nuestra preparación de clasificación con poco combustible hacia el final de la sesión, cuando la pista era más rápida. Pero sí creo que las mejoras que introdujimos en el coche en Barcelona ayudaron a superar las limitaciones que probablemente hubiéramos tenido con la especificación anterior del coche".