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Carlos Sainz se presenta a Canadá con nada que perder y mucho que ganar
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Horizonte para el español

Carlos Sainz se presenta a Canadá con nada que perder y mucho que ganar

El circuito canadiense siempre se le ha dado bien al piloto español y a Ferrari. Aunque no hay grandes expectativas en cuanto a resultados, si se espera mejoría sobre Barcelona

Foto: Sainz a su llegada al Circuito Gilles Villeneuve, sede del próximo Gran Premio de Canadá. (EFE/EPA/Andre Pichette)
Sainz a su llegada al Circuito Gilles Villeneuve, sede del próximo Gran Premio de Canadá. (EFE/EPA/Andre Pichette)

Tal y como admitió el propio Carlos Sainz, Barcelona quizá no era el mejor sitio para explotar el potencial del nuevo paquete de mejoras. Canadá es un circuito que se le ha dado bien a Ferrari y aquí quizá si pueda notarse alguna de las ventajas que aporta la nueva configuración. El SF-23 tiene que ir con poca carga aerodinámica en el alerón delantero y sobre todo trasero para no verse penalizado mucho en la velocidad punta, pero los nuevos elementos introducidos al coche si deberían de permitir a los pilotos del equipo italiano ir menos ‘vendidos’ en las frenadas, donde tan clave resulta siempre tener alas con alto grado de inclinación.

Es un circuito (Montreal) que me gusta. -explicaba Carlos- Siempre me ha ido bien aquí en el pasado porque me gusta la sensación de paso a por los bordillos, estará cerca de los muros, es un poco como en Mónaco y espero tener aquí un mejor fin de semana. Creemos que nos irá mejor por el tipo de curva que hay aquí y porque hay una menor degradación. Esperemos que todo mejore y podamos estar más cerca de Mercedes y sobre todo de Red Bull". El ataque a los bordillos es clave en este circuito y Ferrari en esa área no parece tener problemas. Está por ver, si la particular suspensión del Red Bull, (uno de los secretos de su dominio) aquí se encuentra con dificultades o, por el contrario, le va bien como suele ser lo habitual.

Al ser preguntado Sainz sobre las capacidades reales que tiene el paquete de evoluciones introducido en el pasado Gran Premio de España, el madrileño no levanta las campanas al vuelo, pero reconoce que la línea de trabajo que comenzaron es positiva: “Ahora está entendido (el paquete) al cien por cien, porque comprendimos varias cosas durante el fin de semana. En términos de rendimiento, aquí no hay nada nuevo, pero lo que esperamos es que esas evoluciones que trajimos en Barcelona, podamos explotarlas aquí un poco mejor, así como adaptarnos mejor a las características del circuito” subrayó el madrileño, que no obstante reconoció también, que la principal preocupación más allá de un resultado es progresar en el apartado del excesivo desgaste de los neumáticos, que es el principal talón de Aquiles del coche de esta temporada.

El factor Alpine

Respecto a las posibilidades de su equipo en relación con sus rivales en el orden establecido de la parrilla, Carlos avisaba: "Creo que Alpine está a punto o de unirse a nosotros. Sigo pensando que tenemos algo de ventaja, pero les veo cerca de unirse a la batalla. Creo que entre Aston (Martin) y Mercedes la cosa está muy reñida. Normalmente, Aston tiene ventaja, pero vamos a ver si desde lo visto en Barcelona es Mercedes quien ahora está por delante". Recordemos que el año pasado el Alpine pilotado por Fernando Alonso clasificó nada menos que segundo y la mejora que vienen experimentando los coches franceses es notoria, luego hace bien el piloto español en contar con lo que puedan hacer Esteban Ocon y Pierre Gasly en esta carrera.

A partir de Canadá es cuando se empieza a intensificar la rumorología acerca de quién va a pilotar para quien en 2022 y finalizando contrato tanto Sainz como Leclerc a finales de la temporada que viene, el momento para estar delante de Leclerc es en estas próximas cuatro cinco carreras. Por mucha preferencia que pueda tener John Elkann el presidente de Ferrari sobre Charles Leclerc, si el madrileño impone su ley sobre el monegasco del mismo modo o similar al realizado en Barcelona, reforzará mucho su posición negociadora tanto para negociar la extensión de su contrato con Ferrari, como para otro equipo interesado en hacerse con sus servicios.

La comparativa entre compañeros

Leclerc de hecho, afirmaba estar preocupado, porque en Ferrari dicen no haber encontrado nada anormal en su coche que explique las dificultades que experimentó el monegasco en el Gran Premio de España. Hay que conceder el beneficio de la duda al compañero de equipo de Carlos Sainz y efectivamente es posible que haya algo en su coche defectuoso aún por descubrir. Pero no hay que descartar, que simplemente el coche crítico de por sí que ya era el SF-23 antes de la carrera de Barcelona, con el nuevo paquete aerodinámico, se haya convertido aún menos predecible y contra intuitivo.

Si Ferrari insiste en que no ha cambiado nada del coche y Leclerc continúa con sus problemas en Canadá, si que es posible que verdaderamente tenga un problema que aún no está por descubrir, porque la naturaleza del circuito de Gilles Villeneuve es completamente distinta al de Barcelona. En la pista catalana, Leclerc se quejaba de un problema en las curvas a derechas y no en las de izquierdas. Pero no es un dato concluyente porque casi todas las curvas en Montmeló son de derechas y son de radio amplio, con mucha carga lateral sobre el neumático, mientras que en Montreal todo es un puro acelerar y frenar, con continuos cambios de peso en el coche.

Al final en Fórmula 1 se te acaba midiendo por tu última carrera y por las diferencias respecto a tu compañero de equipo. Si finalmente Sainz consigue superar a Leclerc, por su mayor capacidad de adaptación a un coche problemático, es lo mejor que podría pasarle a su reputación y como consecuencia su posición en el mercado. En cuanto al presente mundial de pilotos hay poco que ganar, pero en Canadá en lo personal si es importante lo que hay en juego.

Tal y como admitió el propio Carlos Sainz, Barcelona quizá no era el mejor sitio para explotar el potencial del nuevo paquete de mejoras. Canadá es un circuito que se le ha dado bien a Ferrari y aquí quizá si pueda notarse alguna de las ventajas que aporta la nueva configuración. El SF-23 tiene que ir con poca carga aerodinámica en el alerón delantero y sobre todo trasero para no verse penalizado mucho en la velocidad punta, pero los nuevos elementos introducidos al coche si deberían de permitir a los pilotos del equipo italiano ir menos ‘vendidos’ en las frenadas, donde tan clave resulta siempre tener alas con alto grado de inclinación.

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