Aguirre no volverá a molestar a doña Carla: el último golpe de la villana lo cambia todo en 'La Moderna'

• Avance del capítulo 130 de La Moderna de este lunes, 1 de abril
• Avance semanal de La Moderna: un amor no correspondido, un anónimo amenazante y la readmisión de Matilde

Aguirre se prepara para dar el golpe de gracia en el Salón de té La Moderna. Su principal objetivo es doña Carla, a la que no teme en enfrentarse durante el capítulo que este lunes emite la serie de sobremesa de la Corporación Pública. Además, la frialdad de Lázara es inaguantable para sus compañeros, al igual que Bernabé para César Morel. El nuevo encargado del Madrid Cabaret le da una lección al contrabandista.

En el episodio anterior, Pietro ha descubierto el secreto mejor guardado de Antonia. El italiano se ha dado cuenta de que su amiga lleva tiempo escondiendo a Marta. La joven es la principal sospechosa del misterioso asesinato de su tío Higinio. Por otro lado, Matilde le ha plantado cara a doña Carla y esta vez parece que a la empresaria le ha molestado más que de costumbre.

Íñigo comienza a recordar. El joven ha tenido una pesadilla y cuando se miró al espejo todos los recuerdos volvieron a su mente de golpe. "Ya sé quién intentó matarte, fue cosa de Aguirre", dice convencido el empresario. El prometido de Matilde está seguro de que el personaje interpretado por Óscar Rabadán contrató a alguien para hacerlo. Íñigo recuerda perfectamente cómo el exsoldado le amenazó unos días antes de su boda con Matilde.

Íñigo sospecha de Aguirre

Después del disparo, no recuerda nada: solo gritos. Íñigo asegura que el suicidio del supuesto responsable fue un montaje de Aguirre y que fue él quien mató al anarquista para no dejar ningún cabo suelto. Si es así, Matilde cree que Carla tampoco puede librarse de las sospechas. La pareja no se cansará hasta que Aguirre pague por lo que ha hecho.

Por otro lado, doña Carla comienza a organizar la reunión con la élite de empresarios que puede impulsar la carrera política del incondicional de doña Bárbara. Fabio del Moral le transmite la preocupación de su madre. Lo cierto es que hay una presencia que le mantiene alerta, pero no es algo que pueda solucionar el amor maternal.

Por su lado, Pietro insiste en que Marta debe acudir a la policía cuando se recupere, pero Antonia se niega a echar a su niña a los leones. El italiano cree que es mejor que la joven se explique para que zanjar las sospechas. Parece que el pastelero no es consciente de la gravedad de la situación y los amigos de la corrala acaban enfrentados. "Qué desagradable", expresa Esperanza sobre la primera impertinencia de Lázara. La nueva dependienta se imagina cómo sería vestir el traje de encargada.

Pietro se disculpa ante Antonia. La veterana dependienta le hace ver que acudir a la policía es pecar de ingenuidad. "Con la verdad por delante, se llega a todas partes", explica el pastelero. Mientras, la empleada de La Moderna no opina lo mismo. Según ella, lo único que importa es el dinero.

Los agentes solo desean en encontrar a alguien para meter en la cárcel. Su vecino cree que si alguien descubre que tiene escondida a Marta, puede generarle problemas. Antonia no comparte la visión del italiano y le pide que se marche de su casa. Por otro lado, Inés le cuenta a Laurita que Bernabé le ha ordenado que cometa un robo muy peligroso en el Madrid Cabaret.

Íñigo le hace saber a doña Carla que ya ha recobrado la memoria. El hombre le cuenta que el joven que les disparó era un sicario contratado por Aguirre y le pide ayuda para que encuentren a su antiguo socio. Inés ya ha pensado una estrategia para destruir a Bernabé. La joven quiere pedir ayuda a César, cometer el robo, y de paso, denunciar que Bernabé es el responsable.

"Hay un hombre que me está amenazando para que haga una cosa que no quiero hacer", le explica Inés. La camarera le pide a César que avise a Íñigo. César asegura que en su primer día de trabajo también le amenazó. El médico da permiso a Íñigo para que salga a la calle y haga pequeños paseos. Por su lado, Cañete aprovecha un descanso para pasar un rato con Teresa, a la que echa de menos. El camarero le ofrece salir al Madrid Cabaret, pero la encargada necesita tiempo. Mario es el culpable de esa duda que ahora se deposita en su gran ilusión.

El fin de Aguirre

Teresa confiesa que está demasiado incómoda con la presencia de Mario, y que no quiere verle las caras en todo los lugares que frecuenta. La encargada le pide a Cañete que no se ponga celoso. Por su lado, Jacobo se ha cansado de acatar órdenes y ha salido a la calle, sin ningún temor. Las amenazas de Aguirre ya no le impresionan. El hombre no quiere arriesgar su plan: conseguir la fortuna de doña Carla.

Íñigo le explica a Matilde que doña Carla ya no tiene contacto con Aguirre. El empresario no parará hasta encontrar a su gran enemigo. Por su parte, doña Bárbara sabe que a su hija le pasa algo, mientras un misterioso fotógrafo les apunta con su objetivo. César Morel acude al anticuario de Bernabé y le propina un golpe por la espalda. Por su parte, Teresa recibe un ramo de flores de Mario. El joven se arrepiente de haber roto su compromiso.

César ha atado a Bernabé a una silla. "Eres tan listo que le mandas a la camarera que vaya a robar para ti", le dice el encargado, con ganas de darle su merecido. El delincuente se ofrece para colaborar con el gerente y quitar clientes a la competencia. El encargado de gestionar el Madrid Cabaret le pone contra las cuerdas. El pánico inunda el rostro del contrabandista.

A punto de ser reducido a cenizas, Bernabé suplica a César para que no acabe con su vida. Solo ha sido un aviso. A ver si ha servido de algo e Inés se ha librado definitivamente de Bernabé gracias a la jugada del gerente. Finalmente, Aguirre se presenta en el despacho de doña Carla y le deja claro que él será quien tome las decisiones en su sociedad. El empresario le pide la titularidad de los hoteles. "No sirve de nada". Nuevo golpe de la villana de La Moderna. La asesina de don Jaime no duda en coger su pistola y le propina varios disparos a sangre fría. Doña Bárbara es testigo de todo lo sucedido. Parece que ha llegado el final de Aguirre.