El Ibex se salva de otro día negro 'in extremis' por el despegue de Wall Street

La semana comenzaba con los inversores lamiéndose las heridas después de que el pánico provocara en las cinco sesiones previas una de las peores oleadas vendedoras desde la crisis financiera. Tanto es así que el Ibex 35 se dejó un 11,76% en su semana más difícil desde octubre de 2010 en plena crisis del euro. Una sangría que obligaba a los bancos centrales a salir al paso para calmar al mercado recordando que están ahí para enchufar la medicación necesaria en el caso de que la epidemia del coronavirus ponga en riesgo la estabilidad de la economía mundial.

De hecho, el pasado viernes el primero en salir al rescate fue el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powel, asegurando que seguían de cerca los posibles efectos de la crisis sanitaria mundial y que la institución estaba dispuesta a actuar en el caso de que fuera necesario, lo que inmediatamente templó los nervios de Wall Street permitiendo el rebote para terminar con caídas moderadas o, incluso, con tono positivo en el caso del Nasdaq. Mismo mensaje que ha lanzado esta madrugada el Banco de Japón, lo que ha empezado a alimentar la esperanza de que lleven a cabo una acción conjunta.

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C. R.

"Se especula que la mencionada actuación conjunta, que puede consistir en nuevas rebajas de tipos, podría anunciarse tan pronto como el próximo miércoles, pero es algo que está por ver que ocurra", aseguran desde Link Securities. "De momento los mercados financieros siguen descontando una crisis económica profunda, que puede llevar a la recesión a las economías más débiles. Habrá que esperar a comprobar si este escenario se cumple o no. Lo que sí estamos seguros es que, al menos por un tiempo, la volatilidad va a continuar siendo muy elevada en las bolsas, para bien y para mal", afirman.

Con esta premisa los mercados trataban de rebotar, aunque el optimismo se ha ido desinflando a medida que avanzaban las primeras horas y en la media sesión el rebote ya se había esfumado. El Ibex 35 que se anotaba en los primeros compases subidas que rozaban el 2% para darse la vuelta totalmente hasta cer un 1,7%. Con la buena apertura en verde de Wall Street las caídas de los mercados europeos se han moderado bastante hasta subir un 0,2% al cierre en el caso del español.

Los inversores de los mercados americanos sí se han ilusionado ante la posibilidad de un recortes de de tipos e inyecciones de liquidez de la Fed. Aunque sus futuros eran rojos y así han abierto, han subido con fuerza a lo largo de su apertura hasta marcar alzas superiores al 2,3%. Avances que han aupado al resto de mercados del mundo, que, contagiados de ese optimismo, han abandonado el rojo o, al menos, han moderado de forma drástica sus caídas.

Dow Jones sube un 2,4%, el S&P lo hace un 2,2% y Nasdaq acanza un 2,37%, Parece que los mercados americanos sí que celebran la posibilidad de un recorte de tipos de la Fed para tratar el coronavirus.

Los índices europeos tras esto, se debaten entre el verde y el rojo. El Cac 40 francés avanzaba un 0,44% mientras el Dax alemán cedía un 0,27%. Por su parte En Italia, el epicentro del foco de contagio en el Viejo Continente, las compras llevaban al MIB a avanzar un 1,5% cuando no se había cumplido la primera media hora de negociación. Sin embargo, vuelve a llevarse la peor parte del castigo desplomándose más de un 1,82% al cierre. El índice eurpeo Eutostoxx 50 subió un 0,33%.

Ha sido la rebaja de previsiones del crecimiento mundial de la OCDE la que ha cortado cualquier amago de rebote. Y es que se trata del primer organismo que se ha atrevido a cuantificar el impacto económico del coronavirus: medio punto de crecimiento hasta el 2,4%, el menor avance desde 2009.

De vuelta a la bolsa española IAG vuelve a ser de largo el peor valor del selectivo. La aerolínea se desploma otro 10% hasta los 4,91 euros, con lo que acumula una caída superior al 35% en las últimas siete sesiones.

También el sector financiero cae con fuerza ante la posibilidad de que los bancos centrales implementen mayores medidas de estímulo económico y que rebajen aún más los tipos de interés. De esta manera, Bankia retrocedía casi un 5%, Sabadell más del 4% y el resto de entidades españolas entorno al 3%.