Feijóo se mide con Sánchez en Galicia y contraprograma la convención del PSOE

Alberto Núñez Feijóo y Pedro Sánchez coincidirán en Galicia el 20 y el 21 de enero. Uno estará en Ourense y el otro, en A Coruña. Y la presencia de los dos grandes líderes arrancará de forma definitiva la precampaña para las elecciones del 18-F, en que están llamados a las urnas casi 2,7 millones de gallegos. El PSOE anunció hace semanas una convención política del 19 al 21 con la presencia del jefe del Ejecutivo para dar un empuje a su candidato, José Ramón Gómez Besteiro, y apuntalar el rearme ideológico del partido. Mientras, fuentes de Génova avanzan que ese mismo fin de semana se celebrará en Ourense la 26 interparlamentaria del PP, el primer "gran acto" que contará con la presencia de Feijóo para allanar el camino de Alfonso Rueda hacia la mayoría absoluta.

El líder del PP se ha puesto a disposición del PPdeG para no opacar a su predecesor en la Xunta. De hecho, el presidente de los populares tendrá una caravana independiente a la de Rueda. Feijóo no viajó a Galicia para la presentación de la candidatura de su exvicepresidente el pasado 7 de enero y tampoco estará en un acto de barones previsto este domingo en A Coruña.

Sobre el papel, la interparlamentaria de Ourense servirá para engrasar la coordinación del partido entre Congreso y Senado —Génova renovó los equipos de ambas Cámaras el pasado mes de noviembre— y definir la estrategia de oposición de cara a un año marcado por la inestabilidad del Ejecutivo y su dependencia del independentismo. Pero la elección de la ubicación no es casual. El PP no solo pondrá alfombra roja a Alfonso Rueda de cara a los comicios, sino que aprovechará el contexto para medir fuerzas con Sánchez en un acto multitudinario. La campaña arrancará oficialmente el próximo 2 de febrero.

El espacio aún no está cerrado, pero se prevé una localización de grandes dimensiones para competir con la conferencia socialista. En principio, el partido celebrará una suerte de coloquio el sábado 20 de enero por la tarde, y se reserva para el domingo 21 el acto central, con la intervención de Alberto Núñez Feijóo abierta al público. La convocatoria recuerda a la intermunicipal del PP que se celebró en Valencia en febrero de 2023, unas jornadas con gran afluencia en la Ciudad de las Artes y las Ciencias que sirvieron para reunir en un mismo escenario a Mariano Rajoy y José María Aznar y alentar la remontada en las autonómicas y municipales del 28-M, especialmente en uno de los grandes feudos del PP, la Comunidad Valenciana.

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Marisol Hernández

Por su parte, el PSOE prepara desde hace semanas el gran desembarco en Galicia con una convención en A Coruña pensada para rearmar el partido, pero sobre todo para lanzar a José Ramón Gómez Besteiro. El anuncio del PP restará foco al acto de los socialistas, que se extenderá durante todo el fin de semana en Palexco, el palacio de exposiciones de la ciudad, que acogió en 2022 una cumbre hispanoalemana con Olaf Scholz y Pedro Sánchez como protagonistas. El presidente del Gobierno tiene un acto institucional el viernes, pero ya en horario vespertino el partido se volcará en lo orgánico.

El colofón será también el domingo, cuando está prevista la celebración de una reunión de la comisión ejecutiva federal, que sufrirá una leve remodelación durante el fin de semana en Galicia. La intención de Sánchez es contar con un portavoz que sustituya a Pilar Alegría, que dejará de ser la cara visible de Ferraz después de convertirse en la portavoz del Gobierno. No será una portavocía coral, como se planeó inicialmente, ni tampoco será el único cambio previsto, aunque no hay muchos más detalles. Las modificaciones deberán aprobarse en una reunión del comité federal, el máximo órgano entre congresos, que también se celebrará en A Coruña.

Sánchez cerrará con un mitin que también se prevé multitudinario y servirá para insuflar aire a la candidatura de Besteiro. En el PSOE, son optimistas respecto a las posibilidades de cambio, sobre todo después de la crisis provocada por el vertido de pellets que se extiende por las playas del Cantábrico. La respuesta dubitativa de la Xunta de Alfonso Rueda ha dado alas a la izquierda para lanzarse en tromba y revivir un efecto Prestige que sirva para movilizar al bloque que conforman los socialistas con el BNG y Sumar, socios en Madrid, a pesar de la competencia que mantienen las tres fuerzas, sobre todo por el voto dual entre autonómicas y generales.

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Mario Escribano

Pese a restar importancia al impacto de los microplásticos en las costas, la Xunta activó este martes el nivel dos de alarma, que permitirá la intervención del Gobierno central, un escenario que solo 24 horas antes descartaban en el Ejecutivo gallego. En el PP tratan de zanjar cuanto antes la crisis para evitar que la marea de bolitas en la costa gallega contamine también la campaña del candidato popular. Tanto en Génova como en la dirección regional asumen que esa será la intención de la izquierda, pero advierten de que la estrategia se le podría volver en contra al Gobierno, como sucedió con José María Aznar durante el desastre del Prestige. "Lo único que intenta el Gobierno es intoxicar tomando a los gallegos por tontos", cargó Feijóo este martes.

Además del gran acto previsto en Ourense, el líder del PP reunirá también a su núcleo duro en Toledo esta semana, durante una especie de encierro de trabajo en la mencionada ciudad que se extenderá de jueves a sábado. Más allá de la escenografía, el partido pretende perfilar los objetivos del año y abordar temas "que se escapan" durante las pocas horas que duran las reuniones del comité de dirección de los lunes. La cita coincide, además, con el arranque del nuevo ciclo electoral, que tendrá las elecciones gallegas como primer gran test. El PP se juega mucho el próximo 18 de febrero. Las encuestas están a favor, pero también lo estaban el 23-J y Feijóo no conquistó la Moncloa. Perder la mayoría absoluta no solo llenaría de dudas el futuro político de Alfonso Rueda. También podría tambalear los cimientos de Génova.