María Guardiola: la otra baronesa del PP que planta cara a Vox

Segundo acto. PP y Vox encaraban este martes una nueva fase de sus negociaciones. Los escenarios eran Extremadura y Baleares para constituir los Parlamentos autonómicos. En cuanto a los protagonistas, la candidata popular, María Guardiola, está llamada a convertirse en la baronesa que marcará un antes y un después en las relaciones con los de Santiago Abascal. Saltó a los titulares tras dar la sorpresa el 28-M y empatar en escaños con el histórico socialista Guillermo Fernández Vara. Desde esa misma noche, ha trabajado para lograr ser la presidenta de Extremadura con una única “línea roja”: gobernar en solitario. “María no va a cambiar su palabra. Ha prometido un Gobierno sin Vox y no puede traicionar a la gente que le prestó su voto por esa claridad”, insistían a última hora de este lunes en su equipo.

El PP envió un documento a Vox con las bases de un posible acuerdo en el que se les ofrecía la presidencia de la Asamblea. En el texto de siete puntos, se detalla el compromiso de “votar al candidato presentado por Vox a la presidencia de la Asamblea de Extremadura en la sesión constitutiva que tendrá lugar el 20 de junio de 2023. En relación con una de las vicepresidencias y una de las secretarías de la Cámara, votar al candidato que presente el PP a cada una de ellas, renunciando Vox a la presentación de candidatura a las mismas”. Hasta aquí, la formación de ultraderecha estaba dispuesta a aceptar, pero con la salvedad de que, al igual que se hizo en Castilla y León y la Comunidad Valenciana, se vinculase a un acuerdo para una coalición de gobierno.

TE PUEDE INTERESAR

La candidata del PP en Extremadura irá a repetición electoral antes de que gobierne Vara

P. Gómez A. B. Ramos

El apartado quinto de la nota remitida por los populares no dejaba margen a esta posibilidad, ya que explicitaba que Vox apoyaría en la investidura a Guardiola, pero que esta “ostentará libertad para la confección del Gobierno de la Junta de Extremadura”. Es decir, no hubiera habido reparto de sillones con los de Abascal, que a última hora de la tarde de ayer estaban dispuestos a forzar una repetición electoral si no se les ofrecían puestos en el Ejecutivo.

La dirección de la formación de Abascal quiere exportar el modelo de acuerdo con el valenciano Carlos Mazón a todos los territorios. El argumento oficial es el deber ante sus electores, el que reconocen en privado es que, por un lado, se sintieron “traicionados” por el PP en los pactos cerrados en 2019, donde suscribieron acuerdos programáticos, pero se quedaron fuera de las instituciones, y, por otro, está la urgencia de adquirir experiencia de gestión. No les preocupa que se les acuse de bloqueo por no ceder sus diputados a los candidatos populares, porque tienen testado que sus fieles entenderán que no permitan que se les “trate con desprecio”.

TE PUEDE INTERESAR

Vox rechaza presidir la Asamblea extremeña a cambio de no entrar en el Gobierno

EFE

En el otro bando, el del PP, apelaban a que había tiempo hasta las 10 de la mañana de hoy para que, minutos antes de que arrancase la sesión para constituir la Cámara, se acercasen posturas. Estaban dispuestos a introducir nuevas medidas entre las ya consensuadas a petición de Vox, pero no ir más allá. Había cuórum para una rebaja integral de impuestos, defensa del campo extremeño y de la rentabilidad de agricultores y ganaderos, finalización de infraestructuras estratégicas, por una educación de calidad y libre de sesgo ideológico y el fomento de la natalidad, entre otras.

Finalmente, antes de que comenzase esta sesión, Vox rechazó de nuevo el acuerdo planteado por Guardiola. La falta de consenso entre los populares y la formación liderada por Santiago Abascal en Extremadura ha dado la Asamblea a Blanca Martín Delgado, del Grupo Socialista, que volverá a ocupar este cargo en esta XI legislatura. María Guardiola, la presidenta del PP extremeño, ha lamentado que Vox haya antepuesto "sus ansias de poder y esa soberbia al cambio", una postura que, según la líder popular en esta comunidad autónoma, "obliga a ir a elecciones". Según fuentes consultadas por El Confidencial, Génova ya asume los comicios ante este desentendimiento y abre la vía a la repetición electoral, como ya había avisado la líder del PP en esta autonomía.

En cuanto a volver a las urnas, la extremeña asume el reto desde la convicción de que ganaría con claridad. Cimenta su seguridad desde el ejemplo de Juanma Moreno en Andalucía, donde en la derecha se movilizó por el voto útil. Los trackings que se han ido haciendo desde las municipales y autonómicas muestran que hay opciones de una victoria, incluso con Guillermo Fernández Vara de rival. El PSOE vive su particular viacrucis. El socialista amagó con dejar la política. La noche electoral lo anunció y tras una conversación con Pedro Sánchez reconsideró su posición. Los socialistas se mueven en clave sucesoria ante una previsible derrota en las parlamentarias.

TE PUEDE INTERESAR

Los barones del PP se resisten a gobernar con Vox y evitan seguir el ejemplo de Mazón

Ana Belén Ramos

Guardiola no ha tenido fácil la negociación. En un primer momento, soliviantó a Génova, al reconocer en una entrevista que estaba hablando con Vox. Habían pasado apenas 24 horas de las elecciones y la consigna de la dirección nacional era dilatar los tiempos. Días después, fue el propio Alberto Núñez Feijóo el que ponía una nueva piedra en su camino al declarar que estaría dispuesto a dejar que gobernase la lista más votada, el PSOE, en Extremadura. La nueva baronesa del PP ignoró los “malentendidos” con Génova y siguió su rumbo. Ahora está perfectamente alineada con los deseos de la planta noble de Génova.

En Baleares, se llegó a un principio de acuerdo a última hora de la tarde para la constitución de la Mesa del Parlamento. La presidencia recaerá en Vox y la vicepresidencia y la secretaria primera serán para el PP. Desde la formación de ultraderecha, señalan que es un “primer paso” y dejan abierto el apoyo para la investidura de Marga Prohens. “Paso a paso”, señalan, mientras desde el PP se da por hecho que Vox quedará fuera del Ejecutivo balear.

Feijóo trasladó el pasado domingo a sus líderes regionales que hay que evitar coaliciones “a la valenciana”. No quiere que se visualice la imagen de que Abascal será su vicepresidente. Pedro Sánchez ya lo verbalizó este lunes a primera hora con Carlos Alsina. Es una baza, que tras la “rendición”, reconocen fuentes populares, el presidente del Gobierno va a “retorcer” hasta el final.