Es noticia
Villarejo señala a Grande-Marlaska y al CNI en el juicio: "Era un enemigo al que aniquilar"
  1. España
Primer juicio de Tándem

Villarejo señala a Grande-Marlaska y al CNI en el juicio: "Era un enemigo al que aniquilar"

El abogado del polémico comisario avanza su línea de defensa, centrada en reivindicar que el mando actuaba al servicio del Estado con la autorización de sus superiores

Foto: El comisario jubilado José Villarejo. (EFE/Moya)
El comisario jubilado José Villarejo. (EFE/Moya)

El abogado de José Manuel Villarejo tomó este lunes la palabra en el primer juicio del caso Tándem. Con las cuestiones previas como telón de fondo, no dejó pasar la oportunidad: "Es desde su propio origen una causa viciada, preparada", lanzó el letrado Antonio José García Cabrera. ¿El objetivo? "La expulsión del sistema de una persona que ha servido al sistema, a su país, a la patria". Tras cuatro años de investigación, el comisario jubilado, sentado con toga junto al resto de las defensas, abrió fuego contra un caso que ha sacudido la actualidad política y empresarial a través de su abogado. "El verdadero juicio empieza ahora", sentenció ante la Audiencia Nacional.

El primer golpe de efecto llegó pasada la media hora, cuando Cabrera mostró una fotografía de Villarejo "con toda su familia" recibiendo una medalla. Para entonces, ya había lanzado un dardo contra el ministro de Interior: "¿Cómo es posible que la operación Cataluña la hace Asuntos Internos con Villarejo? (...) ¿Cómo puede permitirse que el propio Estado se investigue a sí mismo? La Unidad de Asuntos Internos es el poder ejecutivo investigando al poder ejecutivo a las órdenes de Marlaska". Este lunes no faltaron las preguntas: "¿120 años al señor Villarejo por esta causa? ¿Es razonable?". Tampoco las respuestas: "Aquí hay una presunción de culpabilidad".

Foto: El comisario Enrique García Castaño, en el primer juicio del caso Tándem. (EFE)

Cabrera cargó contra el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), al que sitúa tras la denuncia anónima que dio origen al caso: "El CNI, con quien durante tantos años había colaborado el señor Villarejo". También contra los fiscales y el magistrado que llevan las riendas de la instrucción. "Vamos a acreditar que este procedimiento nació al margen de toda legalidad procesal, que se utilizaron los aparatos y órganos del Estado para depurar a un supuesto enemigo", "un enemigo al que había que aniquilar".

Para Cabrera, se trata de "derecho penal del enemigo", hasta el punto de que quiso recordar unas palabras de George Bush justificando las prisiones secretas de la CIA como Guantánamo: "Quien no está con nosotros, está contra nosotros y será combatido". "Esto es lo que ha pasado en este caso", argumentó. No es la primera vez que Villarejo se agarra a esta cita. En comunicados anteriores, ya la ha utilizado para ajustar cuentas con Margarita Robles, Dolores Delgado o Jorge Fernández Díaz. Pero esta vez la situación era distinta. Ya no se trata de escritos que prepara desde la cárcel, sino de un discurso ante el que los magistrados solo pueden callar y tomar notas.

Foto: Captura de video de la señal institucional del TSJ.

El derecho de defensa se erige como un altavoz para hacerse escuchar y, durante las cuestiones previas, Villarejo no dudó en aprovecharlo: "Es imposible juzgar estos delitos ordinarios sin atender a lo anterior", advirtió Cabrera. "Quién era el señor Villarejo, qué funciones realizaba, por qué las realizaba y por qué todos los gobiernos confiaban en él". A su lado, el comisario jubilado, con las manos sobre la mesa y la cabeza alta, iba asintiendo al compás del abogado.

Cabrera insistió además en que no se les ha permitido acceder a todo el material incautado en los registros, una denuncia que volvió a relacionar con el hecho de que Villarejo solo seguía órdenes de las más altas instancias: "Si alguien tenía que haber sido perseguido, esos son los dirigentes, las personas que le dieron las instrucciones para hacer lo que hizo en defensa de los intereses del Estado". Según argumentó, ese material "demostraría realmente cuál es su participación y razón de ser en los servicios del Estado", para lo que acompañó una vez más su razonamiento con otra pregunta: "¿Por qué Kitchen sí y Cataluña no? Si son la misma participación".

Pero por mucho que reivindique este material, al mismo tiempo cuestiona la validez de los audios que le han incautado. "Si se fundamenta en su condición policial, dicha prueba es ilícita y no puede en ningún caso considerarse válidamente obtenida", criticó Cabrera. "Lo que no puede ser es que el señor Villarejo esté acusado de cohecho por ser un policía que ha realizado grabaciones (...) y a la vez se considere válido para incriminarlo". En otras palabras: "O son nulos o no son nulos".

Pide expulsar a Podemos

Cabrera se unió además a otros abogados y pidió la expulsión de Podemos, que ejerce como acusación en el procedimiento. Recordó para ello la pieza Dina, en la que se investiga la sustracción de la tarjeta del móvil de la exasesora de Pablo Iglesias Dina Bouselham y cómo el contenido de la misma acabó en manos del comisario: "Esas sospechas de una utilización política del caso Villarejo por parte de Podemos para conseguir ventajas electorales hacen incompatible el mantenimiento de esa acusación".

Foto: La fiscal general del Estado, Dolores Delgado. (EFE)

Tampoco olvidó el caso del fiscal Ignacio Stampa y apuntó a que, a través de una de las abogadas del partido, se habría mantenido una "relación extraprocesal" que considera "incorrecta". Llegados a ese punto, la presidenta del tribunal, Ángela Murillo, le paró los pies —"cíñase a los hechos de autos"—, pero Cabrera quiso tener la última palabra: "Si hay una relación extraprocesal entre la Fiscalía y Podemos, este no es un juicio justo y yo quiero defender eso si me lo permite la sala". "Si eso es así, este proceso está viciado desde el principio por la importancia de la posición del Ministerio Fiscal, que se ha arrastrado hasta límites inabarcables si se consigue probar".

No permite hablar a Villarejo

Tras más de tres horas presentando las cuestiones previas, Cabrera quiso ceder la palabra al propio Villarejo para que hiciera valer su estatus de abogado y presentara el último punto. Aquella hubiese sido la guinda de su intervención, pero Murillo les frenó en seco y el abogado no tuvo más remedio que seguir una vía intermedia: "Con el permiso de la sala, voy a comentar con el señor Villarejo a ver si quiere añadir algo más a través de mí". Tras un minuto de susurros, explicó el último argumento.

Foto: Villarejo (d) y García Castaño (i) se sientan en el banquillo. (EFE/Villar)

"El señor Villarejo pretendía decir que, ya en 2016, él podía conocer quién era el instructor de la causa, con mucha anterioridad a su propia detención, y que en todo ese material intervenido y que se ha sustraído para su posible defensa, consta manifiestamente claro no solo la intervención del CNI en esta causa, (...) sino a la propia preordenación de la causa, incluso con la intervención de un determinado instructor", denunció. De esta manera, volvió a recordar algunas de las ideas ya expuestas y, cuando pidió al tribunal que reconsiderase la posibilidad de que Villarejo hablara, se llevó una nueva negativa por respuesta: "Al alimón, no".

​Triple juicio

El caso Tándem acumula una treintena de piezas, pero, en este primer juicio, se abordan tres: el supuesto espionaje del bufete Herrero y Asociados a otro despacho de abogados (pieza Iron), la batalla de los García Cereceda por la herencia del creador de la urbanización La Finca (pieza Land) y el encargo de los empresarios Juan y Fernando Muñoz para recuperar una deuda (pieza Pintor). La sentencia marcará un antes y un después en el caso y, con él, en el futuro del propio Villarejo.

Foto: El comisario jubilado José Manuel Villarejo frente a la Audiencia Nacional el pasado marzo. (EFE)

La Fiscalía Anticorrupción pide para él 109 años de cárcel en este primer juicio y, desde su puesta en libertad en marzo, el comisario se ha enfrascado en preparar su defensa. Junto a él, una treintena de acusados se sentarán en el banquillo, entre ellos su mujer, Gema Alcalá, su socio Rafael Redondo y el comisario Enrique García Castaño, quienes se enfrentan a 83, 102 y 81 años de cárcel respectivamente. Según la Fiscalía, bajo las órdenes de Villarejo se erigió toda una "organización criminal". Él lo niega y, de la mano de su abogado, se encargó de dejarlo claro este lunes:Tándem es "una causa absolutamente loca" que solo busca destruirle.

El abogado de José Manuel Villarejo tomó este lunes la palabra en el primer juicio del caso Tándem. Con las cuestiones previas como telón de fondo, no dejó pasar la oportunidad: "Es desde su propio origen una causa viciada, preparada", lanzó el letrado Antonio José García Cabrera. ¿El objetivo? "La expulsión del sistema de una persona que ha servido al sistema, a su país, a la patria". Tras cuatro años de investigación, el comisario jubilado, sentado con toga junto al resto de las defensas, abrió fuego contra un caso que ha sacudido la actualidad política y empresarial a través de su abogado. "El verdadero juicio empieza ahora", sentenció ante la Audiencia Nacional.

Audiencia Nacional
El redactor recomienda