García Castaño intenta tumbar los audios de Villarejo y apunta a "la guerra de comisarios"
Su abogado Aitor Martínez se refiere así a la enemistad entre Villarejo y el que fuera responsable de la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional, Marcelino Martín Blas
La Audiencia Nacional retomó este lunes el primer juicio del caso Tándem con José Manuel Villarejo en el banquillo. El tribunal dio paso a las defensas para que expusieran sus argumentos durante las cuestiones previas y, al poco de arrancar la sesión, tomó la palabra el abogado de uno de los principales acusados, el comisario Enrique García Castaño. Frente a los 81 años que la Fiscalía pide para él, su letrado insistió en que los audios de Villarejo deben ser apartados del juicio y apuntó para ello a "la guerra de comisarios".
El abogado Aitor Martínez se refirió así a la enemistad entre Villarejo y el que fuera responsable de la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional, Marcelino Martín Blas. Destacó su "evidente animadversión" y que "abiertamente despotricaba contra Villarejo", tras lo que puso el foco en que fue su unidad la que se hizo cargo del material incautado al comisario jubilado en 2017, incluidas sus grabaciones con distintas personas. "La unidad que él dirigía, con los policías que él dirigía, tiene durante 17 días todo el material incriminatorio de su enemigo", criticó. Su conclusión fue tajante: "Rompieron de manera irreparable la cadena de custodia de todo ese material".
Martínez tampoco olvidó que Martín Blas se encuentra imputado en otra pieza del caso Tándem. En concreto, en la que indaga en la bautizada como operación Kitchen, el dispositivo que se puso en marcha en 2013 para robar documentación sensible al extesorero del PP Luis Bárcenas. Considera, por tanto, que el material que pasó por sus manos no debe tenerse en cuenta, pues "contraviene las normas más elementales del proceso penal" y, al ser digital, resulta "altamente mutable".
Para reforzar esta petición, insistió también en que los registros del domicilio Villarejo y su entorno "quebrantaron el auto habilitante", por lo que el material se obtuvo de manera ilegal. Su razonamiento abordó a su vez que Villarejo se presentaba a sus interlocutores como comisario o como abogado, por lo que debe tenerse en cuenta que sus conversaciones se producían "en un marco de clara provocación delictiva" para empujar a los otros a cometer o reconocer delitos.
Cuestiona la competencia del tribunal
Más allá de cuestionar la validez de estas pruebas, el abogado alegó que la Audiencia Nacional no es competente para enjuiciar estos hechos. Martínez apoyó esta idea en que, por mucho que la Fiscalía apunte a la existencia de una supuesta organización criminal para justificar la autoridad del tribunal, este delito se incluye en la pieza principal del caso Tándem, pero no en las que se examinan en el actual juicio. "Ni siquiera existe una acusación formal de una organización criminal", criticó. "Es un malabarismo jurídico", pues supone "anticipar la existencia de una organización criminal" y es "una manifiesta temeridad el intento del Ministerio Público de enjuiciar estos hechos".
El caso Tándem acumula una treintena de piezas, pero, en este primer juicio, se abordan tres: el supuesto espionaje del bufete Herrero y Asociados a otro despacho de abogados (pieza Iron), la batalla de los García-Cereceda por la herencia del creador de la urbanización La Finca (pieza Land) y el encargo de los empresarios Juan y Fernando Muñoz para recuperar una deuda (pieza Pintor). La sentencia marcará un antes y un después en el caso y, por ahora, el juicio se centra en las cuestiones previas.
Villarejo asegura que trabajó con Elizo
El abogado de García Castaño tomó este lunes la palabra después de que el que representa a Villarejo, Antonio José García Cabrera, pidiera presentar sus alegaciones en último lugar. En cualquier caso, el comisario volvió a atender a los medios frente a la Audiencia Nacional y dio nuevos titulares: según aseguró, "en otro tiempo" trabajó con la actual vicepresidenta tercera del Congreso, la dirigente de Podemos Gloria Elizo, quien supuestamente utilizó su despacho de abogados como un "buzón".
También argumentó que, mientras se fijan en él, la gente "se olvida de que un terrorista entró con pasaporte falso", en alusión al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, o que una "furgoneta que llevaba material" de la familia Pujol fue atracada por "cuatro señores armados", "como si estuviéramos en México". "No es importante que no salga nada de mis relaciones con Santander y Telefónica. Claro, como tienen de jefe de Seguridad a dos altos mandos del CNI... Yo confío en la independencia judicial y que poco a poco, si hay deseo de que haya una catarsis y de si debe haber una inteligencia civil, además de la militar que nos quieren imponer con el CNI", advirtió.
La Audiencia Nacional retomó este lunes el primer juicio del caso Tándem con José Manuel Villarejo en el banquillo. El tribunal dio paso a las defensas para que expusieran sus argumentos durante las cuestiones previas y, al poco de arrancar la sesión, tomó la palabra el abogado de uno de los principales acusados, el comisario Enrique García Castaño. Frente a los 81 años que la Fiscalía pide para él, su letrado insistió en que los audios de Villarejo deben ser apartados del juicio y apuntó para ello a "la guerra de comisarios".