Es noticia
El terror búlgaro de FG: espió al compañero de celda de Pineda por miedo a ser asesinado
  1. España
ORDENÓ A VILLAREJO INVESTIGAR AL RECLUSO

El terror búlgaro de FG: espió al compañero de celda de Pineda por miedo a ser asesinado

Corrochano ordenó a Villarejo que investigara al compañero de celda de Pineda en la cárcel de Estremera por si el presidente de Ausbanc lo utilizaba para matar a Francisco González

Foto: Montaje: E. Villarino.
Montaje: E. Villarino.

El sumario de la pieza de BBVA en el caso Tándem esconde un episodio profundamente sórdido que no había trascendido hasta ahora. A finales de 2016, el entonces presidente del segundo banco más importante de España, Francisco González (FG), llegó a la convicción de que Luis Pineda iba a matarle, y recurrió al comisario Villarejo para tratar de neutralizar esa amenaza, según han confirmado a este diario fuentes próximas a las pesquisas. La Unidad de Asuntos Internos ha descubierto documentos relacionados con ese encargo que ya están incluidos en las diligencias que instruye el Juzgado número 6 de la Audiencia Nacional.

El miedo se apoderó de FG en noviembre de 2016. Poco antes, en abril de ese año, la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional había detenido al presidente de la falsa asociación de usuarios de banca por utilizar presuntamente la plataforma para extorsionar a bancos, organismos públicos y otras empresas privadas, y apropiarse de las cuotas que pagaban sus asociados. El instructor del caso, el juez Santiago Pedraz, le tomó declaración y lo envió a prisión provisional al apreciar riesgo de fuga y de destrucción de pruebas.

placeholder [Pinche aquí para ver el documento completo]
[Pinche aquí para ver el documento completo]

Uno de los principales responsables de que Pineda acabara en la cárcel de Estremera fue González, que reforzó las acusaciones que existían contra él declarando como perjudicado por las supuestas prácticas mafiosas de Ausbanc. No fue el único que lo hizo -también testificaron en su contra Miguel Blesa, de Caja Madrid, y José María Castellanos, de Nova Caixa Galicia- pero nadie impulsó tanto la causa como el primer ejecutivo de BBVA, que tenía a Pineda en su punto de mira desde hacía años por los ataques que dirigía contra él desde los medios de comunicación de su plataforma de usuarios.

Esta semana se ha confirmado que BBVA utilizó a Villarejo para presentar la denuncia anónima que provocó la apertura de la investigación contra Pineda y se ha descubierto que González llegó a comer con la cúpula de la Policía en el complejo de Canillas en enero de 2015 para diseñar la operación. Pero, en realidad, la participación del banquero en el caso se intuyó desde el principio. Y todo salió como él había soñado. En abril de 2016, vio cómo el juez Pedraz metía entre rejas a su enemigo público número uno y todas las asociaciones y empresas que había utilizado para amenazarle eran desmanteladas.

placeholder Fotografía tamaño carné y ficha de prisión del recluso. [Haz clic aquí para ver el documento completo]
Fotografía tamaño carné y ficha de prisión del recluso. [Haz clic aquí para ver el documento completo]

Pese a todo, según han explicado a El Confidencial fuentes próximas al caso, la tranquilidad le duró poco a González. A las plantas nobles de BBVA llegó la información de que Pineda había trabado relación con su compañero de celda en Estremera, un búlgaro condenado por tráfico de heroína. El presidente del banco temió que el líder de Ausbanc recurriera a su nuevo amigo para vengarse de su detención. En noviembre de 2016, el jefe de Seguridad de la entidad, Julio Corrochano, contactó con Villarejo para pedirle que investigara al preso búlgaro y a los posibles contactos que éste tenía en el exterior, ante el riesgo de que asesinaran a González por encargo de Pineda. Asuntos Internos encontró una anotación sobre este asunto en unos papeles del comisario. “KOL [nombre en clave de Corrochano] tema BULGARO”, escribió, junto a la fecha “23.11.16”, consta en el sumario.

El director de Seguridad de González entregó a Villarejo información precisa sobre el objetivo, que respondía a las iniciales M.I.P. y tenía 43 años. Corrochano descubrió en la base de datos de BBVA que el compañero de Pineda había acudido años antes a una oficina del banco situada en el número 202 de la avenida Ciudad de Barcelona de Madrid para solicitar un préstamo de 18.000 euros. Para ese trámite, la entidad había comprobado sus antecedentes, las propiedades que tenía su nombre y su vida laboral, y todo los datos quedaron almacenados.

placeholder El exjefe de Seguridad de BBVA Julio Corrochano. (EFE)
El exjefe de Seguridad de BBVA Julio Corrochano. (EFE)

Villarejo utilizó esa información como punto de partida, pero fue más allá. Consiguió la ficha de M.I.P. en prisión y las diligencias policiales por las que había sido detenido. Descubrió que había sido arrestado en 2014 en una operación antidroga de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) coordinada por el Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo tras comprobar que formaba parte de un grupo dedicado al tráfico de heroína. Su organización había entregado un cargamento de dos kilos de ese estupefaciente a narcotraficantes gallegos y estaba presionándolos para que pagaran la mercancía. La Policía interceptó la operación y envió al banquillo a todos los implicados.

El presunto cerebro de Tándem rastreó los movimientos, propiedades, coches y empresas del recluso. También los de sus familiares (incluidos su mujer y un hermano) y otras personas de su círculo de confianza. Para ello, habría accedido a bases de datos policiales, según la Unidad de Asuntos Internos. Parte de esas gestiones figura en el sumario. Los investigadores han hallado las pruebas en varios soportes informáticos. También han encontrado correos electrónicos en los que Corrochano habla de la operación con Villarejo.

En uno de esos correos, el jefe de Seguridad recordaba que un antiguo delegado de Ausbanc en Islas Baleares había denunciado que Pineda le amenazó con consecuencias "físicas" y de estar “jugándose la vida” por un disputa entre ambos. Corrochano también recordó que el líder de la falsa asociación de usuarios de banca fue detenido en 1982, cuando formaba parte del Frente de la Juventud, una escisión de Fuerza Nueva, por participar en un ataque con cócteles molotov, botes de humo y piedras para celebrar el primer aniversario del 23-F. “Algo aporta de su perfil mafioso y de su venganza así como de sus modos”, escribó Corrochano junto a esos datos, en un correo del 28 de diciembre de 2016.

placeholder Ficha de BBVA con los datos del compañero de celda de Pineda. [Haz clic aquí para ver el documento completo]
Ficha de BBVA con los datos del compañero de celda de Pineda. [Haz clic aquí para ver el documento completo]

Con todo, el espionaje de BBVA al preso búlgaro concluyó en enero de 2017 sin detectar ningún motivo para la preocupación de FG, aunque éste tomó medidas para reforzar su protección. Así lo aseguró él mismo en la Audiencia Nacional cuando declaró el pasado noviembre en calidad de investigado en Tándem. La Fiscalía le preguntó por un informe sobre su seguridad personal encontrado en el correo de Corrochano. “Puede tener relación con una información que a mí me llega de que la actividad del señor Pineda, una vez que estuvo detenido, estaba muy relacionada con gente del hampa. Corrochano [el jefe de Seguridad de BBVA] me decía que se relacionaba con gente rara”, respondió FG, aunque aseguró que no sabía que Villarejo había colaborado en la confección del dossier. “Si tiene Corrochano este documento es porque él cree que estoy en riesgo como consecuencia de que Pineda está en contacto con sicarios y pide al consejo de administración que extiendan mi vigilancia”, manifestó González.

Los investigadores no han determinado cuánto cobró Villarejo por ese encargo, pero la suma estaría incluida en el total de 10,2 millones de euros que le habría pagado BBVA entre 2004 y 2018 por ejecutar decenas de operaciones similares. Miguel Durán, abogado de Pineda, asegura a este diario que las sospechas de González no tenían ningún fundamento, como se demostró luego, y adelanta que presentará un escrito para exigir que se aclare como consiguió el banco y el comisario esa información sobre el compañero de celda de su cliente.

El presidente de Ausbanc quedó en libertad provisional en abril de 2019 y estos días se celebra su juico. Su compañero búlgaro también salió y en la actualidad regenta un restaurante junto a su mujer en una localidad del sur de Madrid. El que está ahora en Estremera es Villarejo. FG no ha pisado la cárcel pero está acusado de cohecho y revelación de secretos.

El sumario de la pieza de BBVA en el caso Tándem esconde un episodio profundamente sórdido que no había trascendido hasta ahora. A finales de 2016, el entonces presidente del segundo banco más importante de España, Francisco González (FG), llegó a la convicción de que Luis Pineda iba a matarle, y recurrió al comisario Villarejo para tratar de neutralizar esa amenaza, según han confirmado a este diario fuentes próximas a las pesquisas. La Unidad de Asuntos Internos ha descubierto documentos relacionados con ese encargo que ya están incluidos en las diligencias que instruye el Juzgado número 6 de la Audiencia Nacional.

Caso Ausbanc Luis Pineda Francisco González Comisario Villarejo Audiencia Nacional Heroína Caja Madrid Santiago Pedraz Drogas
El redactor recomienda