FG sobre la comida con la Policía: "No quería ir" y "ofrecí la tecnología de BBVA"

Las tres horas de interrogatorio de Francisco González, expresidente de BBVA, en la Audiencia combinaron los clásicos momentos del banqueros, hablando de su 'Código' y la digitalización del banco, con otros más tensos en los que chocó con el fiscal Ignacio Stampa por algunas preguntas incómodas.

Una de ellas fue la comida con la cúpula de la Policía en enero de 2015, de la que habría salido la denuncia anónima contra Ausbanc, según relató un directivo de BBVA, Eduardo Ortega.

"Esto es un poco, en fin... Yo acudí a la comida en Canillas por invitación director general de la Policía [Ignacio Cosidó]. Me invitó dos veces, yo tengo la agenda como para ir ahí", fue "un almuerzo institucional en el que yo ofrecí los servicios tecnológicos del banco", expresó el expresidente, según los audios de la declaración a los que ha tenido acceso este medio. González llegó a decir que cuando le llamaron para ir al segundo almuerzo "no tenía ninguna gana de ir" y le preguntó a sus asesores qué debía hacer.

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Gran parte de la declaración de FG giró sobre su versión de que como presidente de un banco internacional, "solo me llegaban cosas a partir de 50 millones de euros". El banquero gallego descargo la responsabilidad de las presuntas irregularidades por Villarejo en Julio Corrochano, su exdirector de Seguridad, quien a su vez —recordó en un par de ocasiones— reportaba a Ángel Cano, director de Medios, y éste a José Ignacio Goirigolzarri, consejero delegado y ahora presidente de Bankia.

Sobre todo lo que se ha ido publicando de los encargos del banco para VIllarejo, FG señaló que "todavía no me creo todo lo que ha ido saliendo" y que "es una chapuza tremenda".

Doctrina FG

Otro de los mensajes repetido innumerables veces por González durante su interrogatorio fue el autobautizado 'Código FG', que el banquero "recordó muy a menudo a Corrochano". Consiste en que todo lo que se hace tiene que ser legal, moralmente aceptable y publicable. "Si alguien me hubiera hablado de lo que hacía Cenyt hubiera estado al día siguiente en la calle", añadió.

FG dedicó gran parte de su declaración a las críticas al asalto de Sacyr con el "apoyo impresentable" del Gobierno. Según el banquero, el entonces vicepresidente, Pedro Solbes, le llamó por teléfono para expresar su respaldo a la constructora, aunque "por su tono reconocía que no quería hacerlo, se lo agradecí".

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El expresidente de BBVA también fue preguntado por el resultado del trabajo de investigación de Villarejo en 2004, por este asalto, del que dijo que le llegó un resumen de "dos o tres páginas intrascendentes que le di a mi secretaria". Dijo desconocer si esos papeles siguen en el banco o desparecieron.

Otro aspecto de su declaración giró en torno a las preguntas del fiscal por las contrataciones de Cenyt para cuestiones personales de FG, como el avión corporativo, las compras de fincas y la guerra contra Ausbanc. Al ser cuestionado si esto último fue "un capricho suyo", respondió al fiscal "¿De verdad tengo que responder a eso?". Sobre el avión aclaró que fue para poder usarlo en viajes de trabajo que incluían fines de semana.

Y dijo no ni idea si se habían hecho informes por las fincas que quería comprar "como inversor". Solo reconoció el de una propiedad en Marbella, que por cuestiones de seguridad tenía que elevar la altura de la valla. "Sería una sorpresa para mí", que su equipo hubiera pedido ayuda para ello a Cenyt.