La mujer que aspira a lo inimaginable con Vilda, que se plantea dimitir tras la final del Mundial

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Como no podía ser de otra forma, el simple hecho de que desde la federación inglesa de fútbol digan que no descartan que la entrenadora de su selección femenina, la neerlandesa Sarina Wiegman (La Haya, 1969), pueda sustituir a Gareth Southgate al frente de la masculina no solo es noticia, sino que pone en valor a la mujer que este domingo se medirá en la final del Mundial a un Jorge Vilda que, aun siendo hombre, difícilmente podría imaginarse aspirar a algo parecido en España.

Aunque, claro, teniendo en cuenta que el sustituto de Luis Enrique fue Luis de la Fuente, un técnico sin ninguna experiencia en la elite, tampoco sería descartable que en la Federación Española de Fútbol (RFEF) pudieran llegar a pensar en él como sustituto del riojano, sobre todo si acaba levantando la Copa del Mundo. Según fuentes bien informadas, su idea es abandonar el cargo de seleccionador después de la final, a pesar de tener aún un año más de contrato, y cedérselo a su segunda, Montse Tomé. Eso sí, Vilda podría mantenerse como director deportivo y España tener a su primera seleccionadora absoluta.

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Salvo el caso de la galesa Hannah Dingley, fichada recientemente para dirigir al Forest Green Rovers, club de la League Two, equivalente a la Segunda Federación española, nunca una mujer ha entrenado a un equipo masculino en el fútbol profesional inglés. A diferencia de Vilda, a Sarina Wiegman le avalan sus dos títulos de campeona de Europa, en 2017 al frente de los Países Bajos y en 2022 con la propia Inglaterra, además de haber disputado con la selección de su país la final del Mundial 2019, en la que cayó ante Estados Unidos. La neerlandesa recaló en la FA en 2021 y tiene contrato hasta 2025, uno más que Southgate, de ahí las especulaciones.

El presidente ejecutivo de la federación inglesa, Mark Bullingham, aseguró que, en caso de que el seleccionador masculino se marche, se escogerá a la mejor persona para el puesto, "sin tener en cuenta si es hombre o mujer". "Sarina está haciendo un gran trabajo y podría hacer lo que quisiera en el fútbol. Si en algún punto del futuro decide que quiere cambiarse al fútbol masculino, será una conversación interesante, pero es su decisión", comentó el mencionado directivo de la FA para de este modo dejar abierta esta posibilidad.

Como futbolista Wiegman ya marcó tendencia, pues se convirtió en 2001 en la primera en llegar a las cien internacionales, tanto en la categoría femenina como masculina. No en vano, debutó con la selección de los Países Bajas en 1986, es decir, cuando tan solo tenía 16 años. Tras jugar en su país, se marchó a estudiar a Estados Unidos, donde siguió haciéndolo en los North Carolina Tar Heels. A su regreso, tuvo que compaginar el fútbol con su trabajo de profesora de educación física. En 1994 fichó por el Ter Leede, donde ganó dos Hoofdklasse y una Copa KNVB, hasta que en 2003 decidió retirarse tras quedarse embarazada de su segundo hijo.

Fue en 2006 cuando Sarina comenzó su carrera como entrenadora. Primero en el Ter Leede, después en el ADO Den Haag femenino, hasta que en 2014 se convirtió en entrenadora asistente de la Selección femenina de los Países Bajos, además de coordinadora de la Sub 19. Un año después, con el objetivo de acabar su formación en los banquillos, hizo un curso de la Real Asociación Neerlandesa de Fútbol (KNVB). De este modo fue como obtuvo la licencia de entrenadora y se convirtió en la tercera mujer en hacerlo. Nuevamente, Wiegan demostró ser una pionera, algo que haría en el caso de llegar a sustituir a Southgate, aunque esto son palabras mayores.

La sombra de Toña Is

Por más que tras la victoria ante Suecia y la consiguiente clasificación para la final del Mundial, el presidente de la RFEF quisiera reivindicar a Vilda diciendo que "Jorge es un entrenador top, que renunció a otras selecciones por más dinero por estar aquí en España", lo cierto es que el prestigio del madrileño es el que es y todo lo sucedido durante el último año le ha dejado muy tocado, por más que ahora se pretenda vender lo contrario. A la espera de ver lo que sucede en la final ante Inglaterra, es posible que algunas futbolistas, ya sea como campeonas o subcampeonas del mundo, se liberen y por fin digan lo que han callado hasta el momento.

Todo el mundo sabe el respaldo que Vilda tiene en la RFEF, donde prácticamente ha desarrollado toda su carrera como entrenador. En 2015 sustituyó al polémico Ignacio Quereda, quien se vio obligado a dimitir tras 27 años en el cargo. Sin embargo, cabe recordar que fue él quien prescindió de Toña Is, la ex seleccionadora de la Sub 17 que ganó Europeo y Mundial en 2018. Es decir, con un palmarés mucho mejor que el suyo, hasta la fecha en blanco, además de haber entrenado a muchas futbolistas de la actual Selección absoluta, a cuyo cuerpo técnico fue en primera instancia ascendida, si bien en 2020 se anunció su improcedente despido.

La sombra de Toña Is sigue siendo alargada, por más que, como aseguran desde las entrañas del fútbol femenino español, Vilda hizo todo lo posible para que la asturiana no estuviera en ningún banquillo donde pudiera tener notoriedad. Entre ellos, y como informamos en su momento en este diario, el del nuevo Real Madrid tras fusionar por absorción al CD Tacón. Ahí, la figura de Ana Rossell, la expresidenta de este club y actual directora deportiva del Madrid, fue clave dada su estrecha relación con el seleccionador español. El nivel de los entrenadores del fútbol femenino español aún es bajo, pero Toña Is era una Sarina Wiegman en potencia.

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Ya lo dijo su padre, el veterano Ángel Vilda, en los micrófonos de Radio Marca: "Si no llega a estar Luis Rubiales en la federación cuando pasó lo que pasó, Jorge no dura en la Selección ni 15 minutos". Evidentemente, el hecho de que este domingo España ganara el Mundial supondría, como ya hemos comentado, un espaldarazo para el madrileño. Aunque curiosamente cueste más imaginarse a Vilda al frente de la Selección española masculina que a la neerlandesa Wiegan en la de Inglaterra. Quienes conocen la manera de dirigir y manejar los partidos de la neerlandesa le ven con capacidad y autoridad como afrontar el reto que supondría entrenar a hombres. Aunque sabido es que una cosa es lo que se dice y otra lo que se hace. Igual que pasa con la marcha de Vilda tras la final...