Es noticia
Damaris debuta con los Países Bajos para sonrojo del fútbol femenino español, que la despreció
  1. Deportes
  2. Fútbol
LA JUGADORA DEL LYON ACUSÓ A VILDA DE MENTIR

Damaris debuta con los Países Bajos para sonrojo del fútbol femenino español, que la despreció

"Ser seleccionador no da a Jorge Vilda derecho a mentir y no podía esperar más", denunció en El Confidencial Egurrola Wienke, quien este viernes se estrenó con el país... de su madre

Foto: Damaris, durante su primer partido con la selección de los Países Bajos
Damaris, durante su primer partido con la selección de los Países Bajos

Se llama Damaris Egurrola Wienke y tiene 22 años. Nació en Orlando, Estados Unidos, de padre español, un pelotari vasco, concretamente, y madre neerlandesa. Su ilusión desde muy pequeña era ser futbolista y jugar en el FC Barcelona. Pero, tras salir entre insultos del Athletic de Bilbao por no querer renovar y donde pretendían cobrar 250.000 euros por unos derechos de formación que ella misma denunció en la Audiencia Nacional, tuvo que dejar la Liga Iberdrola y marcharse al Everton. De allí, el Olympique de Lyon no tardó en ficharle y desembolsar los 100.000 euros de su cláusula de rescisión, cantidad nunca antes pagada por una jugadora española.

Sí, española, pues Damaris también soñaba con jugar en la Selección absoluta de la Federación Española de Fútbol (RFEF). De hecho, lo hizo en sus categorías inferiores y fue campeona de Europa Sub 19 y subcampeona del mundo Sub 20. Sin embargo, este viernes Egurrola Wienke hizo honor a su segunda apellido y debutó con los Países Bajos, cansada de esperar a que Jorge Vilda se dignara a convocarla, algo que, visto lo visto, no solo no tenía pensado hacer, sino que llegó a condicionar a que fuera la propia futbolista la que se pusiera en contacto con él, posiblemente para darse el gustazo de igualmente no convocarla.

Foto: Damaris Egurrola, futbolista del Olympique de Lyon. (OL - PORTRAITS)

Lo denunció la propia Damaris en diciembre del año pasado en una entrevista concedida a El Confidencial. "Ser seleccionador no le da a Jorge Vilda derecho a mentir y no podía esperar más", aseguró la centrocampista del Olympique de Lyon, quien también desmintió tajantemente que el mencionado Vilda intentara "mantener contacto telefónico" con ella, tal y como dijo públicamente un seleccionador de lo más siniestro. "A mí no me ha contactado nadie y, que yo sepa, a mi club, tampoco. Lo que sí sé es que ha intentado hablar con alguna compañera mía sobre mí", desveló Egurrola.

placeholder Damaris Egurrola, en la final del Mundial Sub 20 de 2018 contra Japón. (EFE/Ian Langsdon)
Damaris Egurrola, en la final del Mundial Sub 20 de 2018 contra Japón. (EFE/Ian Langsdon)

Las contradicciones y mentiras de Vilda

Sin más argumentos que el tópico de decir eso de que "no conozco a ningún entrenador que se tire piedras sobre su propio tejado", Jorge Vilda no solo mintió, sino que también se contradijo al asegurar que "es una jugadora que hemos intentado convocar en dos ocasiones", algo que Damaris desmintió tajantemente y, como era de esperar, no tuvo respuesta por parte del seleccionador español. "Eso no es verdad. La última vez que fui convocada fue para unos amistosos ante del Mundial 2019 y no ha habido más intentos de convocatorias con la Selección española. Solo estuve convocada para la Sub 23", explicó la centrocampista del Lyon.

Dadas las circunstancias, inexplicables para cualquiera que siga el fútbol femenino español y europeo, es lógico pensar que quizás había algo más detrás de la decisión de Vilda de no contar con la futbolista española más cara de la historia. ¿Quizás tener la personalidad suficiente como para no rendirle pleitesía y reivindicar los derechos de las futbolistas? "Que yo sepa, no he tenido ningún problema personal con Vilda, pero no sé si él conmigo sí", comentó con una asombrosa madurez Damaris. La centrocampista si recordó que tenía una "una imagen grabada". "Fue en la final del Mundial Sub 20, cuando Vilda bajó al descanso y me dijo que no le gustaba mi juego. Recuerdo que salí al segundo tiempo llorando". Sobran comentarios y faltan explicaciones.

placeholder La familia de Damaris no quiso perderse su debut con los Países Bajos. (Twitter)
La familia de Damaris no quiso perderse su debut con los Países Bajos. (Twitter)

Su último partido con España también lo recordó la propia Damaris: "En mayo de 2019, un amistoso contra Camerún, en el que jugué menos de diez minutos". Y, efectivamente, después del reiterado ninguneo (cuando no desprecio) de Vilda, fue cuando Egurrola tomó la difícil decisión de renunciar a jugar en un futuro con España y, aunque también recibió la llamada de Estados Unidos por aquello de haber nacido en Florida, finalmente se decantó por hacerlo con el país de su madre.

"Entiendo que un seleccionador tiene todo su derecho a elegir sus jugadoras, pero yo no podía seguir esperando a una convocatoria con la Selección, ya que aspiro a jugar Europeos y Mundiales", dijo 'Dama'. Sin embargo, que Vilda no contara con ella no era fácil de asumir, pues no en vano se trata de una futbolista que juega en uno de los clubes más poderoso del fútbol femenino mundial, como es el Olympique de Lyon, y sus propias compañeras, todas internacionales al máximo nivel, así se lo comentaban.

Damaris debutó con los Países Bajos en el minuto 66 del partido disputado este viernes contra Chipre en Groningen, la ciudad de su madre, Alda, quien no faltó a la cita junto a Pablo Egurrola, padre de la ex jugadora del Athletic, y su hermana. Entró en sustitución de la veterana Spitse, la jugadora que seis minutos antes había marcado el 9-0 de un partido que acabó en 12-0. La Orange lidera su grupo de clasificación para el Mundial por delante de Islandia, con dos puntos y un partido menos, y muy destacada de la República Checa, Bielorussia y la mencionada Chipre. Sobra decir que verle con otra camiseta que no sea la de España debería sonrojar a quien pudo haberlo evitado. Pero así funciona la RFEF de Rubiales, más preocupado de sus cosas.

Se llama Damaris Egurrola Wienke y tiene 22 años. Nació en Orlando, Estados Unidos, de padre español, un pelotari vasco, concretamente, y madre neerlandesa. Su ilusión desde muy pequeña era ser futbolista y jugar en el FC Barcelona. Pero, tras salir entre insultos del Athletic de Bilbao por no querer renovar y donde pretendían cobrar 250.000 euros por unos derechos de formación que ella misma denunció en la Audiencia Nacional, tuvo que dejar la Liga Iberdrola y marcharse al Everton. De allí, el Olympique de Lyon no tardó en ficharle y desembolsar los 100.000 euros de su cláusula de rescisión, cantidad nunca antes pagada por una jugadora española.

Real Federación Española de Fútbol Chipre
El redactor recomienda