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Este hombre guarda el secreto que ha llevado a Marruecos a las semifinales del Mundial
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A un paso de la gran final

Este hombre guarda el secreto que ha llevado a Marruecos a las semifinales del Mundial

Hasta 14 jugadores de los 26 que convocan la lista final de Marruecos para el Mundial de Qatar son nacionalizados, donde destacan Achraf Hakimi, Bono o Ziyech. ¿Cómo lo han logrado?

Foto: Los jugadores de Marruecos abrazan a Achraf Hakimi tras marcar el penalti que eliminaba a España del Mundial. (Reuters/Matthew Childs)
Los jugadores de Marruecos abrazan a Achraf Hakimi tras marcar el penalti que eliminaba a España del Mundial. (Reuters/Matthew Childs)
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Marruecos está a un paso de la gloria. Después de acabar con las esperanzas de España y romper la barrera de los cuartos de final de un Mundial al tumbar a Portugal, algo que nunca ninguna selección africana había logrado hasta ahora en un Mundial, la selección magrebí afronta el más difícil todavía: derrotar a la vigente campeona del mundo, Francia. El conjunto de Walid Regragui ha hecho historia, pero aún puede alcanzar cotas mayores en Qatar. Los números que ha dejado por el camino son sencillamente espectaculares. El técnico, exjugador del Racing de Santander, aterrizó en la selección de los Leones del Atlas el 31 de agosto. Desde entonces, ha dirigido ocho partidos, cinco de Mundial y tres amistosos. No ha perdido en ninguno y solo ha encajado un gol, en propia (contra Canadá, en la fase de grupos). ¿Dónde está el secreto del éxito?

Yassine Bounou nació en Canadá y vivió hasta los ocho años allí. Achraf Hakimi nació y vivió casi toda su vida en Madrid y Hakim Ziyech, en Países Bajos. Pero no son los únicos jugadores de Marruecos que brotaron fueran de sus fronteras, se formaron en otros países (europeos, la mayoría) y ahora juegan con la selección de sus padres y abuelos. Es el caso también de Munir Mohamedi, Romain Saïss, Noussair Mazraoui, Sofyan Amrabat, Selim Amallah, Amine Harit, Ilias Chair, Bilal El Khannous, Sofiane Boufal, Zakaria Aboukhlal y Walid Cheddira. Hasta 14 futbolistas de los 26 que conforman la lista definitiva de Walid Regragui en este Mundial son nacionalizados. La selección que mayor número de nacionalizados ha tenido en Qatar.

placeholder El jugador de Osasuna, Abde, celebra el pase a las semifinales junto a Achraf Hakimi. (EFE/Ali Haider)
El jugador de Osasuna, Abde, celebra el pase a las semifinales junto a Achraf Hakimi. (EFE/Ali Haider)

Solo Ahmed Reda Tagnaouti, Yahi Attiyat Allah y Yahya Jabrane juegan en Marruecos, los tres para el Wydad Casablanca. El Confidencial habla con el coordinador de los ojeadores de Marruecos, Rabie Takassa, para entender cómo el combinado magrebí ha aprovechado la diáspora para detectar talentos fuera de su país... y reclutarlos para la causa. ¿Juegan con Marruecos porque veían más posibilidades a nivel internacional? ¿O es una cuestión patriótica? Takassa afirma que "es cuestión de identidad y de sentimientos y de hacia dónde tira el corazón. Nada que ver con que hayan visto que tienen más posibilidades de jugar con Marruecos. Futbolistas como Achraf Hakimi (PSG), Hakim Ziyech (Chelsea) o Mazraoui (Bayern de Múnich) tienen nivel de sobra para jugar con la selección del país de adopción", cuenta.

"El corazón avisa y la cabeza ejecuta"

El exjugador del Real Madrid Achraf Hakimi explicó en Marca: "Fui a probar con la Selección española en Las Rozas, pero vi que no era mi sitio, no me sentía como en casa. No era por nada en concreto, sino por lo que yo sentía, porque no era lo que había mamado y vivido en casa, que es la cultura árabe, ser marroquí. Yo quería estar en la selección marroquí". ¿Tiran más los orígenes que haber nacido en otro país? "Antes de ir a probar con la Sub-18 de España, Achraf Hakimi ya había hecho varias concentraciones con la selección juvenil de Marruecos. Ha probado y ha decidido que su carrera internacional sea con Marruecos porque es lo que le ha dictado su corazón. Haber nacido fuera de tu país no quiere decir que tengas que olvidarte de dónde vienen tus padres", afirma el ojeador.

¿Cómo localiza a todos esos futbolistas que podían jugar con Marruecos? ¿Cómo trabaja su equipo? ¿Los necesitan convencer? ¿O vienen muy fácilmente? "Localizar a los jugadores no es la tarea más difícil que tenemos, tenemos una base de datos de futbolistas de origen marroquí que va creciendo cada año. Son muchos jugadores, no se puede llamar a todos, y ahí es donde tenemos que acertar, proponer al mejor entre un montón de perfiles, porque a la selección van los mejores. Miramos en Francia, España, Países Bajos, Bélgica y más países. Y en cuando al tema de convencer, cuando eres profesional y transparente con el jugador y cuando la federación pone a su disposición una de las mejores ciudades deportivas del mundo, el corazón avisa y la cabeza ejecuta".

placeholder Ziyech consuela a Morata tras el partido de octavos de final. (Reuters/Pedro Nunes)
Ziyech consuela a Morata tras el partido de octavos de final. (Reuters/Pedro Nunes)

La obra de Regragui

Marruecos ha conseguido hacer colapsar a Bélgica, España y Portugal en este Mundial de Qatar desde el orden defensivo y el contragolpe. Preguntado por la función de Regragui como pegamento de todo el talento marroquí, Takassa es tajante: "Regragui vino con una idea clara de cara al Mundial: lograr algo grande y justificar el porqué del cambio de seleccionador a tres meses del comienzo de la competición. Y para ello optó por un sistema de juego realista que se adapta al tipo de jugadores que tenemos, por un lado, y al nivel de los rivales, por otro. También es importante mencionar que por su cercanía a los jugadores ha logrado hacer de este equipo una familia en la que cada uno lo da todo por el otro".

En este sentido, el ojeador de Marruecos subraya que "es muy importante la relación entre el seleccionador y los jugadores, más allá de cualquier cuestión técnico-táctica. Esa confianza que les transmite y que cada jugador se siente como hijo y hermano del seleccionador. Sin esa relación y sin el sacrificio de los jugadores que han tenido que cumplir con tareas con las que no están acostumbrados, como es el caso de Ziyech y Boufal, que están haciendo labores defensivas que creo que nunca han hecho antes, Marruecos no estaría donde está ahora".

placeholder Boufal celebra el billete a semifinales con su familia. (Reuetrs/Paul Childs)
Boufal celebra el billete a semifinales con su familia. (Reuetrs/Paul Childs)

¿Podrá Marruecos marcar un antes y un después en el fútbol africano? Ni Ghana (2010), ni Senegal (2002) ni Camerún (1990) pudieron lograr la hazaña magrebí en su día. "Marruecos ha logrado romper esa barrera de cuartos que se estaba resistiendo a las selecciones africanas. Creo que esto les va a dar un impulso psicológico y anímico enorme a las demás selecciones para empezar a creer en sus capacidades e ir lo más lejos posible en los mundiales", contesta Takassa.

"Regragui lo dijo cuando estábamos jugando aún los partidos de la fase de grupos... '¿Por qué no aspirar a ganar el Mundial?', se preguntó en una de las ruedas de prensa. Algunos pensaron que se estaba pasando. Regragui sabía lo que decía y lo que hacía y tenía mucha fe en sus jugadores. El trabajo psicológico que hizo con el equipo es impresionante", añade. Sobre las posibilidades de Marruecos de llegar a la final, el ojeador de los Leones del Atlas se muestra esperanzado: "A dos partidos de la gloria, es imposible que Regragui y los jugadores no estén pensando en seguir haciendo historia y ganar el título. Luego depende de cómo van a llegar los jugadores a esos partidos, hay varios jugadores importantes con problemas físicos, pero juegue quien juegue, lo va a dar todo. Ya no hay margen de hacer análisis y pronósticos con esta selección. Todo es posible".

Marruecos está a un paso de la gloria. Después de acabar con las esperanzas de España y romper la barrera de los cuartos de final de un Mundial al tumbar a Portugal, algo que nunca ninguna selección africana había logrado hasta ahora en un Mundial, la selección magrebí afronta el más difícil todavía: derrotar a la vigente campeona del mundo, Francia. El conjunto de Walid Regragui ha hecho historia, pero aún puede alcanzar cotas mayores en Qatar. Los números que ha dejado por el camino son sencillamente espectaculares. El técnico, exjugador del Racing de Santander, aterrizó en la selección de los Leones del Atlas el 31 de agosto. Desde entonces, ha dirigido ocho partidos, cinco de Mundial y tres amistosos. No ha perdido en ninguno y solo ha encajado un gol, en propia (contra Canadá, en la fase de grupos). ¿Dónde está el secreto del éxito?

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