En-Nesyri ya es historia de los Mundiales: mete a Marruecos a 'semis' y manda a Cristiano a casa

Marruecos volvió a hacer historia y se metió en las semifinales del Mundial de Qatar, después de derrotar a la Portugal de Cristiano Ronaldo (1-0). El conjunto africano hizo gala, de nuevo, de su solidez defensiva y de su capacidad de sacrificio sobre el césped para convertirse en un muro impenetrable para el combinado luso que, a pesar de intentarlo de todas las maneras, no encontró la vía del gol y se despide del torneo en la que era la última bala para CR7.

Ya no se puede hablar de que la selección de Walid Regragui sea una sorpresa, pues está firmando un campeonato antológico donde lo está haciendo todo bien. Después de cinco partidos, tan solo ha encajado un gol -y fue en propia puerta-, ha demostrado ser un equipo muy sólido por encima de todas las individualidades y, por si fuera poco, es uno de los conjuntos con mejor contragolpe del torneo. Ya están en semifinales y tras cargarse a España y Portugal, mantienen vivo su sueño.

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El Confidencial

Durante más de media hora, el partido siguió un guion muy similar al del choque contra España, con solo un equipo proponiendo y Marruecos agazapada atrás... pero sin sufrir absolutamente nada. La posesión era absolutamente lusa, pero sin profundidad, sin generar peligro y, sobre todo, sin poder correr a la espalda de la selección norteafricana. Pero pasados los primeros treinta minutos, llegó el momento de las hostilidades y el partido se rompió.

El primero en tenerla fue Joao Félix en el 31', quien se inventó un tremendo disparo lejano que, tras pegar en El Yamiq, golpeó en la parte superior de la red de Yassine Bono. Solo tres minutos después, era Selim Amallah el que respondía... momento en el que llegó uno de los errores más groseros de la tarde y que sirvió para que Marruecos se adelantara al borde del descanso. Y es que Youssef En-Nesyri no desaprovechó el regalo de Diogo Costa para ajusticiar a Portugal.

Sucedió en el minuto 41, en una jugada que parecía intrascendente, pero que fue un golpe mortal para Portugal. Attiyat Allah ganó la banda izquierda y puso un centro sin demasiado peligro... pero el portero del Oporto hizo el resto. Y es que Diogo Costa salió flojo, blando y en dirección al segundo palo, momento en el que En-Nesyri le ganó la posición llegando desde atrás para, a puerta vacía, adelantar a Marruecos con un testarazo franco. Marruecos daba, otra vez, la sorpresa.

Solo un minuto después, a punto estuvo de empatar Portugal, después de que un centro-chutde Bruno Fernandes se envenenara y se estrellara contra el larguero de Bono, ya vencido. Sin embargo, los lusos estaban con una rodilla en el suelo, noqueados y golpeados por lo sucedido, y en la última ocasión de la primera parte el propio Attiyat Allah perdonó el segundo tanto de los 'Leones del Atlas'. El descanso era lo mejor que le podía pasar a Portugal.

Cristiano Ronaldo al rescate

Pero, de nuevo, la primera tras la vuelta de los vestuarios fue para los marroquíes y, otra vez, tras un nuevo error de Diogo Costa, que fue incapaz de hacerse con un centro lateral y dejó la portería vacía a un El Yamiq que no encontró las redes. Fue el momento en el que Fernando Santos decidió hacer saltar al campo a Cristiano Ronaldo, en busca de la igualada en un partido que se le estaba empezando a complicar. Y Portugal mejoró claramente con el '7' en el campo.

Su presencia hizo que Marruecos diera otro paso atrás y que Portugal se lanzara al ataque a tumba abierta en busca del empate, con CR7 muy activo por todas las posiciones de ataque. Fruto de una buena acción suya, en el minuto 64, llegó un balón claro a la frontal del área, donde un potentísimo disparo de Bruno Fernandes salió rozando el larguero de Bono. Los portugueses se lamentaban y no encontraban el camino del gol ante unos 'Leones del Atlas' muy bien plantados.

Portugal lo intentaba de todas las maneras, y una de las más claras llegó en el minuto 82, donde Bono firmó una parada antológica. Tras una recuperación de Bernardo Silva, filtró el balón al corazón del área, donde Cristiano hizo una dejada perfecta par a Joao Félix, que se inventó un brillante tiro con rosca desde la frontal que el meta del Sevilla descolgó a mano cambiada de su escuadra derecha. Portugal se desesperaba y Marruecos acariciaba su sueño.

Ya en el descuento, Cheddira veía la segunda amarilla por una patada a Joao Félix y Portugal se iba con todo en busca de la igualada. Y la más clara la tuvo Pepe a falta de un minuto para el final del tiempo añadido, pero su cabezazo se marchó rozando el palo izquierdo de Bono. La imagen de Cristiano Ronaldo marchándose del campo bañado en un mar de lágrimas es la perfecta definición de lo que pasó sobre el césped. El '7' se retira sin su Mundial y Marruecos mantiene el sueño vivo.