Vilda, entre el desprecio de la FIFA y el despecho de algunas futbolistas que (ahora sí) rajan de él

A diferencia de la UEFA, que tampoco le premió, si bien le mantuvo entre los nominados, la FIFA dejó a Jorge Vilda fuera de los candidatos al premio The Best en la categoría entrenador de fútbol femenino. Es evidente que en la balanza entre haber ganado el Mundial de Australia y Nueva Zelanda y formar parte del entramado del inhabilitado presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, pesó más lo segundo.

Más aún, después de ver a Pedro Rocha y Elvira Andrés, dos rescoldos del rubialismo, presentes en la gala que tuvo lugar en Londres. De este modo, por primera vez que un técnico no aparece entre los cinco nominados después de haber ganado una Copa del Mundo, a pesar de que la FIFA, lejos de vetarle expresamente, lo hizo tácitamente.

Pues en sus normas volvió a dejar claro que a la hora de valorar los méritos de los votados, debía primar lo ocurrido precisamente en el Mundial. De hecho, la ganadora fue la entrenadora que Vilda tuvo como rival en la final, la neerlandesa Sarina Wiegman, quien, por cierto, no ha clasificado a Inglaterra para los Juegos Olímpicos. En España todavía hay quien piensa que el bochornoso espectáculo ofrecido por Rubiales en Sídney fue algo anecdótico.

Sin embargo, lo sucedido con su protegido y, por si fuera poco, protegido también de su testaferro, Pedro Rocha, quien destituyó al ahora seleccionador de Marruecos, pero le mantiene en su irregular Comisión Delegada de la RFEF como representante de los entrenadores, ha pasado y seguirá pasando factura al fútbol español en general, y al femenino en particular.

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Marta Cardona, entre el miedo y el egoísmo

Normal viendo a Montse Tomé, segunda de Vilda, al frente de la Selección española, pero también el comportamiento de algunas futbolistas que, ahora sí, se atreven a decir lo que antes callaron. Ya fuera por miedo o por egoísmo, como es el caso de Marta Cardona.

¿Por qué siguió yendo con la Selección a pesar del motín de las 15?, le preguntaron a la delantera del Atlético de Madrid en ABC. "Yo consideraba que si te llama la Selección, tienes que ir. El que está fuera y el otro personaje que también lo está, es lo que se tenía que conseguir porque no debían estar en la Federación", fue la respuesta de alguien que no hizo nada para que esto sucediera.

Dadas sus claras alusiones a Vilda y Rubiales, a la petición de que pusiera "algún ejemplo de alguna actitud inaceptable vivida en la RFEF", Cardona volvió a salir con evasivas. "Son temas de los que no me gusta hablar. Yo no he vivido nada en concreto que te pueda decir. Con ciertas compañeras, pues igual los tratos eran muy fríos por parte del seleccionador. Pero en general, yo creo que luego cayó todo por su propio peso", respondió.

A diferencia de Jenni Hermoso, quien en su reciente aparición en un programa de televisión, confirmó que "cuando nos íbamos a dormir, teníamos que dejar la puerta abierta y esperar a que él pasara por la noche y dejar que hablara con nosotras", la delantera rojiblanca no entró en detalles y volvió a salir por peteneras: "En vez de defender a sus jugadoras, defendió a una persona que no tenía que haber defendido, por mucho que fuese su presidente. Si defiendes a Luis Rubiales, está todo dicho de cómo puede ser mi ex seleccionador". Qué fácil es decirlo ahora...

Diferencias con las 15 amotinadas y las 7 indómitas

Tanto Cardona como Hermoso no estuvieron entre las 15 amotinadas ni, por tanto, entre las 7 indómitas que no enviaron el famoso correo pidiendo volver. A saber, porque nunca está de más recordarlas, Mapi León, Patri Guijarro, Lola Gallardo, Claudia Pina, Nerea Eizagirre, Amaiur Sarriegi y Ainhoa Moraza.

De ahí que choque tanto la respuesta de la rojiblanca cuando le preguntan qué sintió al ser fiel a la selección y a Vilda para después quedarse fuera del Mundial, lo mismo que le pasó a ella.

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"Fue una decepción muy grande. Las 15 que no van y otras seguimos yendo", comenta Marta, para a continuación confesar que "estabas un poco entre la espada y la pared. Si no ibas, no ibas a volver más, a no ser que fueses una de las mejores del mundo y tuviesen que contar contigo. El propio seleccionador habla mal de las 15 durante las concentraciones y luego las lleva al Mundial. Al final, a él le venía bien que se declarasen disponibles porque son las mejores del mundo. Es la realidad, pero me dejas fuera después de estar yendo todos los años a la Selección".

Escuchando ahora a Cardona o a la propia Jenni Hermoso, resulta inevitable acordarse de Damaris Egurrola, la única futbolista que se atrevió a levantar la voz y lo terminó pagando con el exilio, primero al Everton inglés y, después, al Olympique Lyonnais francés, además de verse abocada a aceptar la invitación de los Países Bajos para jugar en la selección, tras rechazar incluso la de Estados Unidos, en vista de que con España, al menos mientras siguiera Vilda como seleccionador, no iba a poder jugar. ¿Qué pensará ahora Damaris? Pues lo mismo que cuando se atrevió a decirlo y nadie se dignó siquiera de apoyarla públicamente.