Pau Torres: "Me tira más jugar la Champions en el equipo de mi pueblo"

Pau Torres (Vila-real, 24 años) es el paradigma del central moderno: traspasa líneas de presión con pases limpios y tensos, controla los tiempos y apenas comete faltas para defender. No le molesta ser tachado de 'blando', sino que aspira a ser más contundente en las áreas. Forma con Albiol (36) una de las parejas de centrales más sólidas del fútbol europeo. Este verano, el defensa rechazó una oferta de 60 millones de euros del Tottenham al Villarreal porque quiere jugar la Champions con el equipo de su pueblo.

El cuadro de Unai Emery visita hoy Old Trafford en una revancha para el Manchester United de la final de la pasada Europa League celebrada en Gdansk. El Villarreal viene de haber empatado en el primer partido frente al Atalanta, y el United de Cristiano Ronaldo cayó inopinadamente ante el Young Boys suizo. Sin haber sido internacional en las categorías inferiores de España, Pau ha llegado a la élite para quedarse: encadenó la Eurocopa (medalla de bronce) y los Juegos Olímpicos (plata) en su afán por no perderse nada. Ha marcado un gol en los 14 partidos con la selección absoluta. Y Luis Enrique lo ve como un Adonis: "Es alto, es guapo, me gusta todo de él". En persona está más delgado que por televisión.

PREGUNTA. Lewandowski, en una reciente entrevista en 'El País', dijo que él seguía luchando por ser el mejor a los 34 años porque se acuerda cada día de lo mal que lo pasó al principio. A usted, en cambio, ¿le ha venido todo rodado?

RESPUESTA. En fútbol 7 sí iba por delante de los demás compañeros, pero en cadetes llegó una lesión bastante grave, rotura de tibia y peroné, y estuve un año sin jugar. Los años de juvenil ya los di de año en año, como tocaba. Y después tuve la suerte de saltarme el Villarreal C, pasé al B y me fui un año cedido al Málaga para foguearme en una categoría superior. Tuve que ir a Málaga para hacer ver al Villarreal que podía tener una oportunidad en el primer equipo. En los años de profesional sí he tenido la confianza de todos los entrenadores y la continuidad necesaria.

P. ¿Ese año sin jugar por lesión ha sido un motor?

R. Sí, fueron días difíciles, nueve meses. Fue un torneo en Inglaterra contra el West Bromwich Albion. Hago un pase y el otro jugador estira, me pilla en la pierna totalmente apoyada en tierra y me rompe. Tenía 15 años. Estás un año alejado de tus compañeros y no sabes cómo volverás. Has de tener muy claro que quieres seguir en el fútbol. De vez en cuando, me acuerdo de que no siempre todo fue bien, que tuve que superar obstáculos.

P. ¿Cómo reaccionó el club?

R. Muy bien. Me puso un avión medicalizado para mí, con un miembro del cuerpo técnico porque en compañía regular no me dejaban volar con la pierna completamente escayolada. Me respetaron ese año sin jugar y me pasaron a la categoría siguiente, como al resto de compañeros. Ves cómo el club te valora y te respeta.

P. Otro obstáculo es su fama de defensa blandito. ¿Le molesta?

R. No, nunca me ha afectado, siempre ha sido un reto para mejorar. Estoy en un equipo en el que la ambición la debes llevar de dentro porque, por ejemplo, en juveniles solo compites contra el Valencia y alguno más, el resto te pasas el partido atacando. Y cuando pegas el salto a Segunda B es cuando empiezas a enfrentarte a delanteros de más edad, más experiencia, y ahí es donde puedes ir creciendo. Sé que puedo mejorar en ese aspecto. Lo hablo mucho con el cuerpo técnico.

P. De hecho, a Lewandowski le dio una tarascada en la Eurocopa y fue amonestado.

R. A veces has de marcar el territorio y hacerte más fuerte. Lewandovski es un delantero muy fuerte, siempre bien perfilado, se desmarca muy bien, es muy completo.

P. Se ha puesto de moda la nostalgia por los centrales antiguos: duros y con bigote.

R. El fútbol ha evolucionado hacia un modelo de juego con una propuesta de iniciar el juego desde detrás. Somos un perfil diferente a esos defensores de otras épocas. Ni mejores ni peores.

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P. ¿Entiende las críticas a Eric García?

R. Eric tiene 19-20 años, está en periodo de formación y ha estado un año en que, por su situación contractual, apenas ha podido jugar en el City. Tiene que tener continuidad para ser cada día mejor.

P. ¿Cómo fue jugar parte de la Eurocopa con dos centrales zurdos?

R. Bien, el año anterior también lo hicimos aquí con Funes Mori. Con Laporte por la derecha, jugadores a ese nivel están capacitados para los dos perfiles.

P. Todo el juego pasa ahora por los centrales. ¿Se han convertido en los nuevos centrocampistas?, ¿tiene usted alma de '10'?

R. Nosotros, en nuestro campo, tratamos de dar salida al balón, tenemos mucha paciencia. Cuando estamos en campo contrario, damos a los compañeros el apoyo de seguridad y, sí, es verdad que siempre estamos iniciando el juego. Junto a los mediocentros, somos los encargados de llevar el balón a los delanteros en las mejores condiciones.

P. ¿Hay diferencias entre el Villarreal y la selección?

R. Son similares. En los dos sitios, el balón es lo más importante para ganar los partidos, llevar el partido adonde nosotros queremos, y este año en el Villarreal estamos presionando un poco más arriba, una cosa de la que la selección está impregnada: presionar en campo contrario para robar el balón lo antes posible.

P. ¿Su seguridad en el pase es innata?

R. Cuando te sale bien, superas líneas de presión y dejas a tu equipo en una situación ventajosa. También, dependiendo del sistema del rival, tendrás unas líneas de pase u otras. Es algo que se trabaja antes. La seguridad en el pase es algo que tenemos desde la cantera. Esa tranquilidad. Se puede fallar, pero la confianza en ti ha de ser muy alta.

P. ¿Qué le pone nervioso?

R. En el mundo del fútbol, nada. Estás trabajando y disfrutando. Y las cosas las afronto con naturalidad. A los demás eso les da serenidad.

P. ¿A Emery también lo tranquiliza?

R. El míster es muy exigente con él y con el equipo, y por eso el Villarreal está creciendo tanto con su figura.

P. ¿Ni siquiera le temblaban las piernas en el penalti que lanzó contra el Manchester en la final de la Europa League?

R. Más que temblarte las piernas, es la tranquilidad de cuando marcas, el quitarte un peso de encima.

P. ¿Qué le aporta Raúl Albiol?

R. Raúl jugaba Champions cada año y me ha aportado mucha experiencia. Ya los primeros días aprendía y continúo aprendiendo hoy: cosa que hace, la intento hacer yo. Es una persona muy humilde y siempre está bien posicionado dentro del campo, sabe dónde colocarse según el delantero al que se enfrenta, y qué esfuerzos hacer. Fuera del campo, se preocupa mucho por su forma física y por su recuperación. Tiene 36 y juega cada tres días. Le estoy muy agradecido.

P. ¿Qué le dio la cesión al Málaga?

R. Madurez en el terreno deportivo y el personal: primera salida fuera de mi familia y de la zona de confort, una división nueva, comenzar en el fútbol profesional de verdad. El Málaga acababa de bajar, nos exigían subir, jugamos 'play-off' y nos eliminó el Dépor. Crecí en un ámbito más defensivo porque con [Juan Ramón López] Muñiz hacíamos un juego no tan creativo desde detrás sino otras cosas; después sí, con Víctor Sánchez, ya teníamos más el balón... Fue un año en el que aprendí mucho.

P. ¿Qué entrenador le ha marcado más?

R. Javi Calleja. Lo tuve en el juvenil, un poco en el filial, y fue quien me dio la oportunidad de jugar en Primera. Siempre agradecido por la confianza y por el trato a día de hoy.

P. ¿En qué se diferencian Unai Emery y Luis Enrique?

R. Los sistemas. A Luis le gusta más el 4-3-3, y a Unai el 4-4-2. Cada cual lee el partido de una forma, pero son muy líderes, saben tener a todos los jugadores muy conectados, son dos de los mejores.

P. ¿Qué extrajo de la Eurocopa?

R. Es un torneo con mucha repercusión, muy exigente, comenzamos con empates que mermaban a la gente de fuera, pero nosotros veíamos que estábamos capacitados para hacer algo más. La mejora vino, llegamos a semifinales, enganchamos a la gente y éramos un grupo muy joven. Fue mi primer gran torneo con la selección y disfruté a pesar del inicio dubitativo. Tuvimos de todo: desde casos de covid hasta victorias por penaltis.

P. Al no haber sido internacional con las inferiores, ¿valora más estar en la Roja?

R. Sí, porque no te habías visto nunca en esas. Yo no había pisado Las Rozas hasta que fui con la absoluta.

P. ¿Notó la presión?

R. No, cuando estás fuera piensas que tiene más repercusión. Desde dentro no te das cuenta de lo que se vive fuera. Se lleva todo con normalidad.

P. ¿Qué les faltó contra Italia?

R. Jugamos mejor, conseguimos empatar, forzamos la prórroga, y el hecho de no jugar con un delantero fijo hizo que fuéramos superiores con balón, logramos disfrutar.

P. Y ahora vuelve la Nations League.

R. Es una selección con mucha gente joven, capacitada para competir con las mejores. Dentro de la selección tenemos muy claro lo que tenemos que hacer y lo que queremos conseguir.

P. A los pasados Juegos de Tokio ya llegó con galones.

R. Fue una experiencia un poco más relajada. Teníamos un equipo muy bueno, dominábamos todos los partidos, con muy buen ambiente, y disfrutamos mucho de convivir con otros deportistas. Te juntas en la villa olímpica con todo el mundo, cada uno tiene un deporte, pero todos somos iguales.

P. Incluso se pudo hacer una foto con Pau Gasol, los dos con el dorsal '4'.

R. Dio esa casualidad. No estoy acostumbrado a ver personas más altas que yo (Torres mide 1,92 y Gasol, 2,15). Y encima uno de los tres deportistas españoles más grandes de todos los tiempos. Era un sueño. He disfrutado mucho, de pequeñito, viendo los partidos de baloncesto.

P. Junto a Pedri, usted sumó una barbaridad de minutos la pasada campaña. ¿Quién se exprimió más?

R. Él jugó más partidos, pero yo más minutos acumulados.

P. Hubo muchas bromas en España con la cara cadavérica de Pedri durante los Juegos.

R. Yo de eso me pude escapar porque él tiene más repercusión. En Tokio no teníamos mucho sol, estábamos encerrados en el hotel y, por las tardes, al entrenar, no nos daba nunca el sol.

P. ¿Acabó saturado?

R. Sí necesitas ese descanso, esa desconexión para valorar lo que habías hecho. Era una locura encadenar las dos temporadas seguidas. Pero lo superas porque vas a gusto y la cabeza hace que puedas llegar.

P. ¿Cómo le sentaron las dos semanas de vacaciones?

R. De maravilla. He de agradecerle al míster que me diera esas dos semanas porque yo quise ir a los Juegos y encadenar esas dos competiciones. Y que después el club me diera descanso en plena competición suya. Me fui a Italia con mi novia. Desconecté.

P. ¿Alguien le reconoció en Italia?

R. Alguno, pero más tranquilo que aquí en España. A Roma, a Capri... El café es fantástico, el único lugar del mundo donde no echas a faltar la comida de España.

P. ¿Los tres delanteros que más trabajo le han dado?

R. Messi, Lewandowski y me gusta mucho Benzema.

P. ¿Y Cristiano?

R. Solo me he enfrentado una vez, en el amistoso antes de la Eurocopa, en Madrid contra Portugal, y está volviendo a marcar muchos goles en su regreso al Manchester, con ganas de seguir marcando diferencias.

P. ¿Qué tipología de delantero le da más guerra?

R. Los delanteros más grandes, más fuertes, tipo Lukaku, que les gusta más el cuerpo a cuerpo. Debes hacer otro tipo de defensa diferente a la de los pequeños.

P. ¿Cómo es Messi?

R. Imprevisible, entra por la derecha y desaparece por la izquierda, sabes que va a hacer algo y lo hace, ve muchos pases y cosas que pasarán después, maneja todos los registros.

P. ¿Los tres mejores centrales?

R. Piqué y Ramos siempre me han gustado mucho, y, a pesar de que ha estado mucho tiempo lesionado, Van Dijk, que ha marcado la diferencia en la Premier. Y también Ruben Dias.

P. ¿Usted está cerca?

R. He de trabajar todavía día a día mucho, todavía no estoy cerca.

P. ¿Por qué ha rechazado una oferta de 60 millones del Tottenham que le habría doblado el sueldo?

R. Porque al final me tiraba más jugar la Champions con el equipo de mi pueblo. En un año en que la selección tiene retos importantes y, cuando haces cambios, no sabes cómo irá. Tenía claro que era un año para disfrutar de la Champions con el Villarreal, cerca de mi familia. Es la cuarta vez que el Villarreal juega la Champions y es lo que más me ilusionaba.

P. ¿El Villarreal no le ha presionado para que aceptara la oferta?

R. En ningún momento. Desde el minuto uno, me dijeron que lo que yo decidiera me lo iban a respetar. Estoy muy contento en casa. Tengo contrato hasta 2024 y lo que sea mejor para todos, ya lo veremos.

P. ¿Se ve como un 'one club man'?

R. No lo descarto, de hecho siempre fue Bruno Soriano el jugador al que más admiré, entre otras cosas porque se quedó aquí el año del descenso a Segunda.

P. ¿Qué supuso para el pueblo de Vila-real ganarle un título al poderosísimo Manchester United?

R. Algo único, para estar muy orgullosos, competimos de tú a tú los 120 minutos y después tuvimos la suerte de ganar en los penaltis. Hicimos lo mismo contra el Chelsea en la final de la Supercopa sin el premio de los penaltis y no tenemos ningún miedo de aplicar nuestro juego en cualquier estadio. Muy contento por el ritmo del club para competir contra estos grandes equipos.

P. ¿Vivió de manera diferente el título por ser 'el xiquet del poble'?

R. Lo que más me marcó fue que, ya al ganar, conocía a todos en la grada: "Este del colegio, este el primo del otro, este es el tío", a todos los aficionados que viajaron. Y después, en la celebración, con los que no pudieron ir.

P. ¿La Premier tiene más ritmo que la Liga?

R. Sí, tiene más ritmo, es más física, y los partidos se rompen un poco más porque no todos los equipos intentan tener el control de la pelota. Ellos lanzan más en largo y, al final, es normal que los equipos se partan un poco más y sean partidos de ida y vuelta.

P. ¿Pueden todavía los españoles compensar con la calidad técnica el mayor físico de los ingleses?

R. Sí, sí, has de estar muy bien defensivamente, muy bien en sus transiciones, y, a partir de ahí, llevar el partido a donde el equipo es bueno, a tener la pelota y a desgastar al rival. Y aprovechar las ocasiones.

P. ¿Cómo visualiza el partido?

R. Ellos tendrán ganas de revancha. Se han reforzado muy bien, pero vimos que el Young Boys pudo ganarles y demostró que no es imposible. Nosotros venimos reforzados del partido contra el Madrid porque demostramos que fuimos superiores. Vamos a ser nosotros mismos. Sabemos que podemos jugar de tú a tú.

P. ¿La Liga ha bajado su nivel?

R. El Barça sí ha bajado, porque se ha ido el mejor jugador del mundo [Messi], pero ha sido un año en el que desde la Liga se ha apretado en el 'fair play' y muchos equipos no han podido fichar. Pero nosotros sí hemos podido reforzarnos con Danjuma y Boulaye Dia, que en sus ligas marcaban diferencias. Nosotros estamos mejor que el año pasado.

P. Usted se crio con su madre. ¿A qué se dedicaba?

R. Ella era contable en una empresa de azulejos. Y mi padre, comercial.

P. ¿Sufrió por el divorcio?

R. No, se dio cuando yo solo tenía tres años y me he criado con un padre y una madre, igual, pero viviendo cada uno en una casa.

P. ¿Y los estudios?

R. Me quedan unas asignaturas pendientes de segundo de Bachillerato, me gustaría desarrollar algo relacionado con el deporte dentro del mundo del fútbol.

P. ¿El futbolista vive en una burbuja?

R. Yo no, yo estoy muy en contacto con mi familia. Aunque yo sea futbolista y mi hermano otra cosa, los problemas de casa son para los dos igual. Eso me aporta normalidad. Y también estoy muy cerca de mis amigos. De primera mano, veo lo que sufre o disfruta cualquier persona.

P. ¿Pero es consciente de los problemas sociales? Por ejemplo, ¿sabe qué porcentaje de paro juvenil hay en España?

R. Mis amigos están acabando de estudiar, opositando, empezando a trabajar por primera vez... Es difícil comenzar a trabajar en España para los jóvenes, pero también porque los empresarios no tienen las ayudas necesarias. Cuanto más impuestos hagamos pagar a los empresarios, más difícil es dar trabajo a la gente. No sabría decirte la cifra de paro.

P. ¿Y el salario mínimo interprofesional?

R. Ha subido a 900 y pico... Ha subido 15 euros ahora.

P. ¿Tuvo mucha presión para ser futbolista?

R. Ninguna. Empezó mi hermano, tres años mayor, venía a verlo entrenar al acabar la escuela, vine con mis amigos del colegio a las prácticas del verano y ya después me quedé. Mis padres siempre me dijeron que hiciera lo que yo quisiera. Ninguna presión. A veces, los sábados ves a un padre gritando o diciéndole algo al padre o al entrenador... Deberían dejar que disfruten.

P. ¿Por qué persona se deja aconsejar?

R. Aquí dentro del club hay gente en la que confío. Y fuera, mi hermano, que ha hecho los tres cursos de entrenador, estudió Recursos Humanos, se ha matriculado en Periodismo y, por las tardes, está aquí de entrenador [en la ciudad deportiva del Villarreal]. Me dice las cosas claras.

P. ¿Cómo es que se expresa tan bien en valenciano?

R. En casa siempre hemos hablado valenciano y en el colegio muchos maestros también.