A Cristiano, como a Zidane, no le gustan las operaciones del Madrid de este verano

Después de la derrota en Wembley, sorprendía que el departamendo de comunicación del Real Madrid eligiera a Nacho Fernández para dar la cara ante las cámaras de 'beIN Sports', la televisión con derechos. El defensa lleva ya cinco temporadas en el primer equipo, pero no es lo que se llama un peso pesado, un futbolista cuyas palabras vayan a tener un peso específico. El Madrid le daba la responsabilidad de aguantar el primer chaparrón a quien no le corresponde asumir ese deber. No hablaba uno de los capitanes. Eso pasó después. Habló el tercer capitán de la plantilla ante los medios. Y Cristiano no salió para aligerar los ánimos, bien cargados de por sí.

Cuando habla, Cristiano siempre deja algo. Un detalle que destaca por encima del resto o, por lo general, más de uno. Salió calmado, ya acicalado y con la mente fría después de la segunda derrota consecutiva y con un aspecto más maduro y calmado, lo cual no evitó que mandase un mensaje a sus superiores, un mensaje cargado de intención, aunque puede que no una mala intención. "Pepe, Morata y James nos hacían más fuertes, pero los de ahora son más jóvenes. Nos hacen falta también Carvajal y Bale. La plantilla junta es más fuerte; no es una plantilla peor, pero tiene menos experiencia y eso es muy importante", dijo.

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Añadió que no está a disgusto con el plantel del que dispone, pero dejó caer el detalle. Faltan años en el equipo, faltan jugadores que, sin ser indispensables, aporten una maestría de la que muchos de los actuales miembros del equipo carecen casi por completo. No le falta razón al delantero portugués, en cierta manera. Echemos un ojo al banquillo del Real Madrid de este miércoles en Londres. Junto a Zidane se sentaban Moha Ramos (17 años), Vallejo (20 años), Theo Hernández (20 años), Lucas (26 años), Asensio (21 años), Mayoral (20 años) y Ceballos (21 años). Solo uno de ellos no podría ser internacional sub-21.

Si los problemas del Real Madrid residen en los cambios en la plantilla con respecto al año pasado es opinable. Lo cierto es que la alineación del Madrid ante el Tottenham no tenía nada de inexperta. Salvo Achraf, juvenil de segundo año, el resto eran jugadores totalmente consagrados en la élite, 'bi' o 'tricampeones' de Europa. Otra cosa bien distinta es lo que pudo entrar desde el banquillo, cierto es, pero los dos primeros cambios ya los realizó Zinédine Zidane cuando el luminoso ya marcaba el 3-0 a favor de los 'spurs'.

Zidane ya se lo advirtió a Florentino

Cristiano, que no perdió tampoco la oportunidad de destacar, aunque de pasada, los fallos arbitrales que están perjudicando al Real Madrid, se unió a Zidane en su reclamo al presidente Florentino Pérez. El entrenador ya le comunicó al mandatario la necesidad de reforzar la plantilla con algún futbolista de primer nivel, no solo con chavales que apuntan muy alto. Florentino, consciente de las posibilidades económicas elevadísimas de las que disponía, prefirió guardarse el tiro. Zidane quería principalmente un delantero centro que supliera las bajas de Morata y Mariano, además de otro central. No consiguió ninguna de las dos.

No es la primera vez que Ronaldo deja un recado a sus compañeros en momentos en los que precisamente invita a lo contrario, a buscar la unión inexcusable de todos para sacar la situación adelante. La última ocurrió en febrero de 2016. Por entonces, Zidane ya era entrenador, pero todavía no había encauzado el camino hacia la Undécima que ganaría unos meses después. Acababa de perder su primer partido, el derbi contra el Atlético de Madrid. Y Cristiano recordó que prefería jugar con unos en vez de con otros jugadores.

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"No te voy a mentir, me gusta jugar con Karim por ejemplo, ya que cuando no está es más difícil; o con Bale, que cuando no esta es más difícil; con Marcelo, que cuando no está es más difícil. Hoy Danilo para mi gusto es el mejor en campo, por ejemplo. Pero para la temporada es complicado porque normalmente los mejores son los mejores casi siempre. Jesé y Lucas no digo que no son buenos, son muy buenos, pero es mi punto de vista". Claro y conciso: los buenos son Bale, Benzema y Marcelo y Lucas y Jesé eran mero complemento que no funcionaban tan bien como los otros.