Unas misteriosas molestias dejan al Madrid sin Khedira, que sólo juega con Alemania

Sami Khedira ha jugado un partido completo con el Real Madrid esta temporada. Fue el de Copa del Rey contra el Cornellà. Sólo uno de los 20 que esta temporada llevan disputados los blancos entre todas las competiciones. Es decir, ha jugado 90 minutos las mismas veces con Alemania que con el club que le paga. Precisamente empezó y se marchó justo en el descuento en el encuentro que jugó la campeona del mundo contra España en Vigo. Y lo que es seguro ya es que este miércoles tampoco jugará ni un minuto en Basilea contra el Basel. No entró en la lista para enfrentarse a los suizos en un partido que, si no pasa una hecatombe, será un simple trámite que habrá que pasar. Y Khedira no lo podrá disputar.

La versión oficial es la que ofreció Ancelotti: "No ha podido viajar porque tenía una molestia en la cadera en el partido de Eibar. Se ha quedado en Valdebebas, como Pepe, para estar listo para el próximo partido". Khedira recibió un golpe durante aquel partido internacional con la Mannschaft. Esa pequeña lesión le habría impedido participar en Ipurua contra el Eibar. Ni siquiera le permitió calentar durante el partido. Lo curioso es que estaba convocado y estuvo en el banquillo todo el choque sin que pudiese hacer nada por ese golpe. Ahora, cuando se le esperaba como una alternativa a los habituales en el once de la Champions, no entra ni siquiera en la lista para viajar a Suiza. Así, Ancelotti, si quiere reorganizar su centro del campo para rotar a sus hombres importantes, no podrá incluir a Sami. Es, por lo tanto, la gran oportunidad de Asier Illarramendi. Siempre y cuando el técnico se decida por dar descanso a los titulares, claro.

Pero todo lo que está relacionado con Khedira desde el pasado verano resulta algo turbio. Esta lesión es el culmen a la que, por ahora, está siendo de largo su temporada más triste como madridista. Venía de completar un mes y medio de ensueño, con su titularidad en la final de la Champions League contra el Atlético (después de estar lesionado durante meses por una lesión, también producida con Alemania y en San Siro, mismo escenario donde se rompió Modrić con Croacia), y fue algo más que fundamental para su selección en la consecución del Mundial de Brasil. Tanto es así, que Joachim Löw lo ha incluido en la nueva terna de capitanes de la Mannschaft que lidera Bastian Schweinsteiger tras la retirada de Philipp Lahm.

Y en el Real Madrid era igual de importante… hasta que se lesionó. Se rompió el cruzado anterior y el colateral medial de la rodilla derecha y, desde entonces, poco, muy poco ha sido utilizado Khedira. Sin embargo, sí jugó cinco partidos de los siete del Mundial (estuvo fuera en el tercero de la fase de grupos, cuando ya estaba todo resuelto, y no pudo jugar la final por unas molestias que sufrió en el calentamiento). Vamos, que desde que se partió la rodilla, Khedira ha jugado más con Alemania que con el Real Madrid. Este inoportuno golpe que no le está dejando jugar ha disminuido también sus posibilidades de luchar por el hueco que ha dejado Luka Modrić con su lesión.

Todo este asunto de su pérdida de peso específico ocurre a la vez que se le va acabando su contrato con el Real Madrid. De aquí a siete meses, si no se retoman las negociaciones, Khedira dejará de ser jugador blanco después de cinco temporadas. En el momento en el que Khedira se lesionó, el Madrid le mostró su confianza y su esperanza en su recuperación con una oferta de renovación. En ese momento, Khedira la rechazó, esperando poder renovar después del Mundial, donde se alzaría a priori su valor. Así fue, y cuando el jugador estaba dispuesto a sentarse a hablar, el club ya no estaba tan impaciente por firmar el acuerdo. Tanto Ancelotti como Florentino ven que el alemán va perdiendo su hueco, ocupado por Kroos, Illarra, Modrić, Isco y con Medrán apretando fuerte por detrás.

A todas estas, y con el mercado de invierno a la vuelta de la esquina, ha aparecido un maestro en este tipo de negociaciones, el Bayern. Pep Guardiola ya cerró el fichaje de Robert Lewandowski (un delantero cuyo valor de mercado podría haber estado en torno a los 50 millones de euros) sin tener que desembolsar nada al Borussia Dortmund, el máximo enemigo en la Bundesliga. Y ahora espera repetir el golpe con Khedira. Según informó la Cadena SER, el acuerdo entre Khedira y el Bayern es total a partir del 1 de julio de 2015, y podría confirmarse desde el 1 de enero, momento en el que el mediocampista estaría en sus últimos seis meses de contrato y ya podría negociar su futuro con otro equipo. En Alemania van más allá y aseguran que fichará por el Bayern en enero por 8 millones de euros. Si esto ocurriese, Khedira no podría jugar la Champions League con los bávaros al haber sido alineado contra el Liverpool en Anfield.

El oscurantismo con su actual estado físico, ese que le impidió estar en Eibar y no le permite estar en Basilea, incita a este tipo de rumores sobre su futuro, que por otra parte está mucho más lejos del Real Madrid cada día que pasa. Antes de que pueda hablar oficialmente con el Bayern o con cualquier otra entidad, el Madrid dispone de 35 días para decidir si finalmente vuelve a ofrecer una renovación a Khedira y, sobre todo, ver si éste está dispuesto a aceptarla sabiendo que tiene muy complicado volver a ser ese jugador tan trascendental que fue acompañando a Xabi Alonso en el centro del campo. Puede que el destino le vuelva a juntar con el tolosarra pero con el escudo del campeón de la Bundesliga en el pecho.

Alineaciones probables:

Basilea: Vaclik; Degen, Frei, Walter Samuel, Safari; Delgado, Fabián Schär, Zuffi, Kakitani; Gashi y Embolo.

Real Madrid: Casillas; Arbeloa, Varane, Sergio Ramos, Coentrão; Kross, Isco, James; Bale, Cristiano Ronaldo y Chicharito.

Árbitro: Milorad Mazic (SRB).

Estadio: Saint Jakob Park.

Hora: 20.45 (19.45 GMT).