Probamos el Smart #3 Brabus, brutal versión con 428 CV del nuevo SUV cupé eléctrico
Conducimos el segundo modelo de la nueva etapa de Smart, el #3, y lo hacemos con la versión Brabus, la más deportiva y prestacional. Tanto, que acelera de cero a 100 km/h en solo 3,7 segundos
En 2019, Smart inició una nueva etapa tras convertirse en una marca germanochina, tras la unión entre Mercedes-Benz AG y Geely Holding Group para crear, cada una con un 50% de participación, la empresa conjunta Smart Automobile Co. Ltd, con nuevas ambiciones y un plan de producto ligado a modelos siempre 100% eléctricos. Con este anuncio llegaron novedades, como el cambio de producción de la marca de Europa a China; la ingeniería a cargo de Geely, que fabricaría las baterías y el conjunto del coche; mientras el diseño sería ‘alemán’, a cargo de Mercedes-Benz. Una hoja de ruta definida que en 2022 dio la bienvenida al primer modelo, el #1, un SUV de cinco puertas y cinco plazas con 4,27 metros de longitud por 1,82 de ancho y 1,64 de alto, que ya tuvimos ocasión de conducir y que parte desde 43.400 euros en nuestro país, sin incluir descuentos ni ayudas.
Y ahora hemos tenido ocasión de conocer y conducir el coche que representa el segundo capítulo de la actual etapa de Smart. Se llama #3 y es el primer SUV cupé (100% eléctrico, claro) del fabricante, que hereda multitud de elementos del #1. Ya se admiten pedidos del nuevo modelo, y las primeras unidades llegarán a España en el primer semestre de 2024, pero Smart todavía se guarda cuánto costará, "dato que confirmaremos en las próximas semanas", apunta el fabricante. Lo que sí sabemos es que estará disponible con cinco líneas de acabado: Pro, Pro+, Premium, Edición 25 Aniversario y Brabus, este último, el tope de gama y la variante más prestacional del modelo.
En cuanto a los tipos de baterías, el Smart #3 estará disponible en su acabado de acceso (Pro) con una batería de litio, hierro y fosfato (LFP) de 49 kWh con una autonomía de 325 kilómetros. En corriente continua recarga a un máximo de 130 kW, que permite que la batería pase del 10% al 80% en menos de 30 minutos. En corriente alterna, la potencia máxima es de 7,4 kWh, necesitando en este caso, cinco horas y media para cargar del 10% al 80%. Respecto al resto de acabados, todos ellos incorporan una batería de litio, níquel, cobalto y manganeso de 66 kWh, con distintas autonomías: en Pro+, 435 kilómetros, en Premium y en Edición 25 Aniversario, 455, y en Brabus, 415. Eso sí, comparten los tiempos de carga: hasta 150 kW en corriente continua, de nuevo, menos de 30 minutos para pasar del 10% al 80%, y en corriente alterna, admite hasta 22 kW; del 10 al 80% en menos de tres horas.
Si nos centramos en la versión deportiva Brabus, variante que hemos probado, cuenta con dos motores eléctricos, uno en el eje delantero de 115 kW y otro en el trasero de 200 kW. En total, hablamos de una potencia conjunta de 315 kW (428 CV) y 543 Nm de par máximo, siempre con tracción total. Con un peso en báscula de 1.910 kilogramos, el Smart #3 logra pasar de cero a 100 km/h en 3,7 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 180 km/h. Es la variante más prestacional de la gama, aunque el resto de versiones, con tracción trasera, ya rinden 200 kW (272 CV), 343 Nm de par y aceleran de cero a 100 km/h en 5,8 segundos. Cifras también muy rápidas, pero lejos de las logradas por el Brabus.
Respecto a sus dimensiones, el Smart #3 mide 4.400 milímetros de largo, 1.844 de ancho, 1.556 de alto y tiene una distancia entre ejes de 2.785 milímetros. Para entender mejor sus cotas, son similares a las de un Cupra Ateca, que mide 4.386 milímetros de largo, 1.841 de ancho y 1.599 de alto. En cuanto al maletero, el nuevo modelo de Smart ofrece 370 litros, y si se abate la segunda fila de asientos, esta cifra crece hasta los 1.160 litros. Además, en la parte delantera cuenta con un pequeño maletero de 15 litros que, según Smart, permite guardar una mochila pequeña o, por ejemplo, unas zapatillas de deporte.
Así es el Smart #3
A escasos minutos de ponernos al volante del Smart #3 Brabus, en su diseño observamos rasgos ya conocidos en el #1, como los faros LED CyberSparks unidos por una fina línea, unos voladizos cortos, pero también una parrilla más ancha que su hermano de gama, o unas entradas de aire más deportivas. En la zaga ocurre lo mismo, ya que los pilotos tienen el mismo diseño. No obstante, está versión Brabus tiene varios detalles que lo diferencian, como la denominación Brabus en la parte inferior de la carrocería, unos neumáticos Michelín Pilot Sport 4 con medidas 245/40 y llantas de aleación específicas de 20 pulgadas, o unas pinzas de freno Brembo de color rojo.
Y en el interior sucede lo mismo, ya que continuamente se combinan las costuras negras y rojas en el volante, el salpicadero o los detalles de las puertas, mientras en los reposacabezas delanteros aparece una letra B roja en grande, inicial de la denominación Brabus. Asientos, por cierto, con un toque deportivo, pero muy confortables y con un buen agarre lateral. Además, tienen reglajes eléctricos, y son calefactados y ventilados, pero no ofrecen función de masaje. En sí, el diseño del habitáculo del #3 es el mismo que el del #1, aunque los responsables de desarrollo de la marca germanochina afirman que el puesto de conducción es diferente, más pegado al suelo, y es cierto que en la práctica sí se percibe, pero tampoco tenemos la sensación de ir tan abajo como nos sugiere la marca.
El interior, en su conjunto, podemos definirlo como de estilo minimalista, digital y de buena calidad, ya que el tacto de los materiales es agradable, genera buena percepción y no hay crujidos. El volante es multifunción y tras él se ubica una instrumentación digital de 9,2 pulgadas, que ofrece la información necesaria: velocidad, el porcentaje de batería o la autonomía restante, entre otros. Información que se ve completada con el Head-up Display sobre el parabrisas, que detalla las señales de tráfico, la velocidad o las indicaciones de navegación.
Seguidamente, a nuestra derecha, se ubica la pantalla central elevada de 12,8 pulgadas, táctil, con buena resolución y que sorprende por su velocidad de procesamiento, como si de una tablet se tratara. En ella se pueden controlar una gran cantidad de funciones, pues en el Smart #3 apenas encontramos botones físicos, salvo los ubicados bajo la pantalla central como el encendido y apagado de la misma, los triángulos de emergencia o los modos de conducción. De hecho, debido a esta falta de botones, requerimos de un tiempo de aclimatación, ya que cuesta encontrar algunas funciones del coche. El habitáculo también ofrece cargador inalámbrico para el teléfono, iluminación ambiental o un sistema de sonido Beats, con una excelente calidad acústica.
Su aceleración impresiona
Una vez que comenzamos a recorrer kilómetros por las carreteras secundarias de la isla de Mallorca, lugar elegido por Smart para realizar la presentación dinámica internacional del modelo, comprobamos cómo los datos del #3 Brabus son una realidad: corre que se las pela. Su aceleración impresiona, ya que, como decíamos, alcanza 100 km/h desde parado en 3,7 segundos. Coge velocidad tan rápido, que es importante tener mesura, ya que, de otra forma, podríamos tener un problema. Así lo pudimos comprobar en las serpeantes carreteras de la zona, pues a pesar de que el coche entra con decisión en las curvas y no pierde tracción al pisar con decisión el acelerador, no parece un vehículo ideado para una conducción tan sumamente deportiva.
Respecto a los modos de conducción, dispone de cuatro opciones: Eco, ideado para realizar consumos eficientes; Normal, el modo más equilibrado de todos; Deporte, que otras marcas llamarían Sport pero que Smart ha traducido literalmente, y que ofrece un rendimiento más deportivo y dinámico; y Brabus, que pone toda la carne en el asador, endurece la dirección y la suspensión, y saca a relucir toda la potencia del coche. En nuestra prueba, que tuvo un recorrido inicial de 75 kilómetros, jugamos con todos los modos de conducción y probamos la aceleración del coche, en una ruta que combinó subidas y bajadas de carreteras secundarias, autopistas y travesías de pueblos con un límite de velocidad de 50 km/h. Y el resultado final fue un consumo combinado de 20,9 kWh/100 km. En un segundo recorrido más llano, de 48 kilómetros, y con mayor uso de la autovía, el gasto real bajó a 18,2 kWh/100 km. Datos de consumo que aún no podemos comparar con el homologado, ya que Smart todavía no ha revelado las cifras oficiales.
Respecto a la frenada regenerativa, el Smart #3 carece de levas tras el volante y tampoco cuenta con la opción B (Brake o freno) en el selector del cambio ubicado en la columna de dirección. No obstante, desde la pantalla central se pueden elegir entre dos tipos de recuperación de energía: Estándar y Fuerte. Y sí hay diferencias en la deceleración entre elegir uno u otro. Además, también está disponible la opción e-Pedal, para conducir usando un solo pedal. Una vez que se selecciona, el coche nos pide confirmarlo, y una vez que lo hacemos tarda 10 segundos en activarlo. Aunque, en marcha, la retención es muy similar a la que hay en el modo Fuerte mencionado anteriormente, y en ninguno de los dos modos el coche se para por completo.
Amplio equipamiento de seguridad
Pese a no conocer aún su precio en España, Smart ya ha revelado el equipamiento de serie del #3 Brabus, y desde luego en seguridad es muy cuantioso. En él se integran elementos como control de velocidad adaptativo con función Stop & Go, asistente de mantenimiento de carril, detección de ángulo muerto, reconocimiento de señales de tráfico, asistente para conducción en autopistas y autovías con asistente de cambio de carril y asistente de tráfico, sensores de aparcamiento, cámara de 360 grados, asistente automático de aparcamiento o luces adaptativas LED, estos dos últimos no disponibles en los acabados Pro y Pro+. Además, de serie, el Smart #3 cuenta con siete airbags.
En 2019, Smart inició una nueva etapa tras convertirse en una marca germanochina, tras la unión entre Mercedes-Benz AG y Geely Holding Group para crear, cada una con un 50% de participación, la empresa conjunta Smart Automobile Co. Ltd, con nuevas ambiciones y un plan de producto ligado a modelos siempre 100% eléctricos. Con este anuncio llegaron novedades, como el cambio de producción de la marca de Europa a China; la ingeniería a cargo de Geely, que fabricaría las baterías y el conjunto del coche; mientras el diseño sería ‘alemán’, a cargo de Mercedes-Benz. Una hoja de ruta definida que en 2022 dio la bienvenida al primer modelo, el #1, un SUV de cinco puertas y cinco plazas con 4,27 metros de longitud por 1,82 de ancho y 1,64 de alto, que ya tuvimos ocasión de conducir y que parte desde 43.400 euros en nuestro país, sin incluir descuentos ni ayudas.