Probamos la nueva versión Strong Hybrid del Vitara, con mecánica híbrida 'de verdad'

Toda la gama actual de turismos de Suzuki a la venta en nuestro país cuenta ya con algún tipo de electrificación, desde la hibridación suave del Ignis hasta el Across híbrido enchufable, pasando por el S-Cross, también con sistema de hibridación suave y que ya conducíamos en diciembre pasado tras ser sometido a una ligera renovación. Y la lista no acaba ahí: Swift, Swift Sport, Swace... Además, coincidiendo con el Andalucía Sunshine Tour 2022, un importante concurso hípico de saltos que patrocina la firma japonesa, Suzuki ha ampliado la oferta electrificada del Vitara, que ya disponía de versiones con hibridación suave y etiqueta eco, al presentar el nuevo Vitara Strong Hybrid, que hemos podido probar. Un Vitara Strong Hybrid que adopta una tecnología más moderna y eficiente, y que, por ejemplo, ya puede circular en modo 100% eléctrico en determinadas situaciones, pues realmente se trata ya de un híbrido autorrecargable HEV, y no de un híbrido suave MHEV.

Lógicamente no hay cambios en las dimensiones, con 4.175 milímetros de longitud, 1.775 de ancho y 1.610 de alto, y para encontrar las auténticas diferencias hay que buscar en su interior, donde esta versión estrena una mecánica con doble modo de propulsión y que rinde en total 115 CV de potencia. Por un lado tenemos el nuevo motor de gasolina de 1,5 litros Dualjet, con 102 caballos, y por otro un motor eléctrico de 24,6 kW (33,4 CV). Disponible exclusivamente con el cambio automático AGS de seis velocidades, Suzuki ha homologado una velocidad máxima de 180 km/h, mientras que los consumos medios oficiales son de 5,3 l/100 km, si equipa tracción delantera 2WD, o 5,8 l/100 km, en el caso de la versión con tracción total 4WD AllGrip, con emisiones medias de CO2 de 121 y 132 g/km, rspectivamente.

Y, además, esta nueva mecánica 1.5 Strong Hybrid convivirá en el mercado con el ya conocido 1.4 Boosterjet Mild Hybrid de 129 CV, con el que compartirá la misma etiqueta medioambiental eco, pese a que sus tecnologías difieren bastante. Versiones Boosterjet, por cierto, que además de ser más potentes (anuncian una velocidad punta de 190 km/h), homologan consumos medios muy parecidos: 5,4 l/100 km con tracción delantera 2WD y 5,8 l/100 km con la 4WD AllGrip. De hecho, las emisiones de CO2 son idénticas a las de los nuevos Vitara Strong Hybrid: 121 gramos con tracción delantera y 132 con tracción total.

No obstante, el Vitara Strong Hybrid sí logra reducir un poco el gasto de gasolina, y especialmente en ciudad, porque logra circular buena parte del tiempo en trayectos urbanos en modo cero emisiones. Además, su nuevo motor de gasolina 1.5 Dualjet se sirve de diferentes innovaciones tecnológicas, como un sistema de inyección dual de tipo multipunto, una alta relación de compresión, una temperatura de combustión más baja, un sistema de recirculación de gases (EGR) de nuevo diseño y la optimización de la distribución variable, con tiempos de apertura en admisión y escape más precisos para mejorar la eficiencia.

El sistema motriz del Vitara 1.5 Strong Hybrid está compuesto, además de por el citado propulsor térmico, por una unidad MGU y por el sistema Power Back (batería de iones de litio de 140V e inversor). Gracias a esta combinación, la nueva versión híbrida autorrecargable del Vitara puede circular tramos cortos en modo 100% eléctrico y optimizar la recarga de las baterías en los momentos de deceleración o frenada. Y si en lugar de elegir la tracción delantera nos inclinamos por la tracción total inteligente AllGrip, esta permite adaptar el tipo de transmisión a las circunstancias de la conducción mediante un selector de modos que encontramos tras la palanca de cambios, y que permite escoger entre cuatro programas: Auto, Sport, Snow y Lock.

El Vitara Strong Hybrid cuenta con las mismas cinco plazas del resto de la gama, pero su maletero anuncia una capacidad de 289 litros, reducción considerable si comparamos con el Vitara 1.4 Mild-Hybrid de 129 CV, que ofrece 362 litros. De serie incluye una pantalla central táctil de 7 pulgadas con conectividad con Apple CarPlay y Android Auto, y otra de 4,2 entre los dos relojes del cuadro de instrumentos, y el cliente puede elegir entre los niveles de acabado GLE y GLX con independencia del tipo de tracción.

En cuanto a los precios, el nuevo Vitara Strong Hybrid arranca en los 30.525 euros de la versión GLE de tracción delantera, que se quedan en 26.370 euros con todos los descuentos por campaña comercial y financiación. Y en el extremo opuesto, si queremos el tope de gama, con acabado GLX y tracción total AllGrip, la factura asciende a 34.730 euros, que incluyendo todos los descuentos posibles bajan a 30.575 euros. Pero, curiosamente, son tarifas muy superiores a las del ya citado Vitara Mild-Hybrid de 129 CV, que también cuenta con la etiqueta eco de la DGT y tiene un precio de partida de 26.988 euros, o 22.833 euros aplicando todos los descuentos.

Volvemos a probar el nuevo S-Cross

Aprovechamos nuestro viaje a Andalucía para probar de nuevo el actualizado S-Cross, un SUV con 4.300 milímetros de largo, 1.785 de ancho y 1.585 de alto cuya primera generación llegó al mercado en 2013, estando actualmente a la venta ya su tercera entrega. Suzuki ha renovado su imagen exterior, en la que destacan tanto la zona delantera, con nuevos faros LED, como la trasera, ahora con pilotos también LED. De serie toda la gama monta llantas de aleación de 17 pulgadas, pulidas en el acabado superior S3, y en la zona alta de la zaga encontramos un alerón más grande que busca mejorar la aerodinámica, mientras que en la parte baja el nuevo protector trasero de color plateado refuerza la apariencia 'todoterreno' de este modelo SUV.

Su interior también introduce cambios de diseño que no afectan a la habitabilidad, una de las cualidades del S-Cross, pues permite viajar de manera cómoda a cinco adultos. Los respaldos de las plazas traseras son reclinables, mientras que para colocar el equipaje disponemos de un maletero con 430 litros.

También nueva es la pantalla de infoentretenimiento en el centro del salpicadero, con unas dimensiones que varían desde las 7 pulgadas para los acabados S1 y S2 (ya con Apple CarPlay y Android Auto), hasta las 9 pulgadas para el tope de gama S3, que añade Apple Car Play de conexión inalámbrica. Tras el volante, entre los relojes, el renovado S-Cross añade una pantalla de información de mayor tamaño que su predecesor: 4,2 pulgadas, y en color.

Bajo el capó, el actualizado S-Cross monta el motor turbo 1.4 Boosterjet de inyección directa con el sistema de hibridación suave Mild-Hybrid de 48V, propulsor que brinda 129 CV de potencia y se traduce en la etiqueta eco de la DGT. Durante la conducción, modera el consumo de gasolina reduciendo la entrega de par motor y compensándolo con el motor eléctrico. Si en vez de elegir la tracción delantera, disponible con los tres grados de equipamiento, queremos añadir el sistema de tracción a las cuatro ruedas AllGrip de Suzuki, este únicamente estará disponible con los acabados superiores S2 y S3. Y si en lugar de caja manual queremos el cambio automático, este solo se vincula al nivel S3, ya sea con tracción 2WD o con la 4WD AllGrip.

En cuanto a precios, la actualización de la tercera generación del S-Cross arranca en España en 28.565 euros (23.565 euros con todos los descuentos por campaña comercial y financiación) en el 1.4T Mild-Hybrid con cambio manual de seis relaciones, acabado S1 y tracción delantera. El tope de gama, que es la versión 1.4T Mild-Hybrid con cambio automático, tracción a las cuatro ruedas AllGrip y equipamiento S3 sube a 36.590 euros, que se quedan en 31.394 acogiéndonos a todos los descuentos disponibles.

En cuanto a las sensaciones de conducción, el S-Cross destaca en apartados como la conectividad, el confort o la habitailidad, con una suspensión cómoda y que mantiene el coche estable sin necesidad de recurrir a una dureza excesiva. En cuanto al Vitara Strong Hybrid, que también pudimos probar, tiene una posición de conducción más elevada, así como un trabajo del sistema híbrido mucho más notorio, consiguiendo circular bastante rato en modo eléctrico, al menos a las velocidades que estuvimos circulando durante buena parte del trayecto, en torno a 60 o 70 km/h. En autovía la nueva versión responde bien, y no desaprovecha ninguna oportunidad en las deceleraciones o bajando cuestas para recargar la batería.

Pero lo que más sorprende es la capacidad 'off road' que atesoran ambos modelos, pese a no tratarse de vehículos todoterreno puros con grandes neumáticos o suspensiones de largo recorrido. Y es que la manera en que el sistema de tracción AllGrip gestionaba los distintos terrenos por los que circulamos nos pareció sorprendente, pues entramos a barrizales que, a priori, parecían escapar de los posibles escenarios que un S-Cross o un Vitara son capaces de afrontar. Sin embargo, y con neumáticos de calle corrientes y molientes, ambos coches pasaban sin problema por cualquier obstáculo, rodera, charco o terreno pantanoso, quedando clara otra de sus virtudes en el caso de las versiones con tracción integral, que garantizan la movilidad incluso en terrenos complicados, ya sea al afrontar aventuras en familia o para cumplir retos profesionales que requieran de un coche funcional en cualquier estación o entorno.