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TRAS LAS MANIFESTACIONES

Moreno responde al frente sanitario con la mayor inversión de la historia de Andalucía

El presidente andaluz anuncia un nuevo aumento en la partida en Salud, un 45% más que el último Gobierno del PSOE. Tras frenar la ley de Doñana, la atención sanitaria se ha convertido en su principal piedra en el zapato

Foto: El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, en su visita a la Unidad de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario Virgen del Rocío. (EP/María José López)
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, en su visita a la Unidad de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario Virgen del Rocío. (EP/María José López)

La sanidad se ha convertido en la principal piedra en el zapato de Juanma Moreno en Andalucía. Solventada la polémica de Doñana tras firmar la tregua con el Gobierno central, la oposición centra el tiro en su gestión de hospitales y centros de salud, con críticas a los conciertos con la sanidad privada y manifestaciones en las calles. Tras un sábado de movilizaciones en las ocho provincias andaluzas, el Gobierno andaluz ha respondido con el convencimiento de que dato mata relato: según ha adelantado el presidente, la comunidad tendrá el próximo año la mayor partida presupuestaria en sanidad de su historia.

La inversión ascenderá a 14.246 millones de euros, un 3% más que el año anterior. De esta forma, la Consejería de Salud y Consumo asumirá el 30,5% del presupuesto, que será presentado este martes. Será el mayor de la historia de Andalucía, donde ya se venía incrementando la inversión en el sistema de salud en los últimos años. De hecho, los 14.246 millones suponen un 45% más respecto a 2018, las últimas cuentas con la firma de los socialistas, que ahora se manifiestan en las calles y cargan contra la gestión de Moreno. El presidente andaluz aprovechó su visita a un hospital para hacer este anuncio bajo el lema Sanidad pública de Andalucía. "Ahí están los números, nunca se invirtió tanto", insisten desde el PP.

Foto: Juanma Moreno, en la apertura de un hospital. (Junta de Andalucía)

No obstante, parte de las críticas de la oposición se centra en la forma de emplear ese dinero. La comunidad ha puesto en marcha un plan de choque para recortar las listas de espera que contempla derivar más de 700 millones de euros a la sanidad privada. Los sindicatos hablan de un "desmantelamiento" de la pública, aunque desde el Ejecutivo autonómico defienden la necesidad de dar respuesta a la saturación en algunas áreas que requieren de una actuación urgente. Los conciertos incluyen, por ejemplo, 30 millones destinados a la salud mental, donde ha habido un incremento destacado de pacientes en los últimos años. La colaboración con entidades privadas también incluye pruebas diagnósticas u operaciones quirúrgicas.

Juanma Moreno defiende que los conciertos sanitarios siempre fueron una fórmula utilizada por los distintos gobiernos del PSOE. Por ejemplo, en 2012 se aprobaron hasta siete conciertos sanitarios por un montante de 485 millones de euros. "Ve la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio", espetó el presidente andaluz al líder de la oposición, el socialista Juan Espadas, durante la sesión del control de la pasada semana. El Pleno del Parlamento andaluz se centró en la cuestión sanitaria, para la que la oposición viene pidiendo una sesión monográfica desde hace meses por algunos de los problemas más destacados: la saturación en los centros de salud, la dificultad para coger cita para una consulta o la falta de profesionales en algunas zonas rurales.

Tras una cascada de dimisiones, Moreno pide un esfuerzo conjunto para "gastar mejor" y "ser más eficientes"

Según denuncia el PSOE, en los últimos meses han dimitido o han sido cesados más de diez altos cargos en el Servicio Andaluz de Salud (SAS). Entre las renuncias más sonadas estuvo la del director general de Asistencia Sanitaria, quien firmó la orden de tarificación que obligó a recular al Gobierno de Juanma Moreno el pasado mes de mayo. Ante la amenaza de movilizaciones a las puertas del ciclo electoral, Moreno blindó la atención primaria de los conciertos y enterró cualquier sospecha de privatización en los centros de salud, una línea roja para los sindicatos. Ahora, tras un verano de tregua, sus críticos han vuelto a la carga.

El PP andaluz, que gobierna con mayoría absoluta desde hace un año y medio, es consciente del desgaste que pueden suponer los conflictos en materia sanitaria, a pesar de los datos que repiten una y otra vez. El Gobierno de Susana Díaz ya lo sufrió en los últimos años de hegemonía socialista: no fue el caso de los ERE de Andalucía lo que provocó una mayor movilización ciudadana, sino las críticas a la falta de recursos y la atención en centros de salud u hospitales. Entonces, las mareas sanitarias sacaron a la calle a miles de personas. Y este sábado volvieron a hacerlo. Según los datos ofrecidos por la Delegación del Gobierno, los asistentes a las ocho manifestaciones del sábado en Andalucía ascendieron a las 15.000 personas, aunque los convocantes calculan que fueron muchos más.

Foto: Juanma Moreno, en una visita al Hospital Militar de Sevilla. (EFE/Julio Muñoz)

“La voluntad de inversión no ha fallado, aunque hay muchas críticas y tenemos margen de mejora”, reconoció el presidente de la Junta, Juanma Moreno, durante su visita a la Unidad de Oncología del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla. En el acto también destacó la incorporación de dos aceleradores nuevos de radioterapia, cada uno por un valor de 2,5 millones de euros, que permiten mejorar la atención en los tratamientos de cáncer más complejos. El PSOE recordó que esos aparatos han sido "comprados por el Gobierno de España" y acusó a Moreno de "intentar aplacar las críticas" tras las manifestaciones. “Cuando hablamos de recursos sanitarios no hablamos solo de personal”, recordó Moreno durante su intervención, en la que pidió a todos un esfuerzo para “gastar mejor” y “ser más eficientes en la gestión”.

La sanidad se ha convertido en la principal piedra en el zapato de Juanma Moreno en Andalucía. Solventada la polémica de Doñana tras firmar la tregua con el Gobierno central, la oposición centra el tiro en su gestión de hospitales y centros de salud, con críticas a los conciertos con la sanidad privada y manifestaciones en las calles. Tras un sábado de movilizaciones en las ocho provincias andaluzas, el Gobierno andaluz ha respondido con el convencimiento de que dato mata relato: según ha adelantado el presidente, la comunidad tendrá el próximo año la mayor partida presupuestaria en sanidad de su historia.

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